¡°Los Castro imitan la transici¨®n rusa, para que sigan gobernando los mismos¡±
El disidente cubano Guillermo Fari?as se trata en Miami de las secuelas de 23 huelgas de hambre. En los pr¨®ximos d¨ªas planea viajar a Europa para denunciar que la represi¨®n contin¨²a
Por el cuerpo de Guillermo Fari?as han pasado una guerra, veintitr¨¦s huelgas de hambre, tres largas detenciones y 51 a?os de edad. Fari?as, disidente cubano y vocero de la opositora Uni¨®n Patri¨®tica de Cuba, es psic¨®logo y periodista. Tambi¨¦n fue soldado, combati¨® junto a las tropas de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Cuba en Angola, y desde abril de 1980, cuando comenz¨® el ¨¦xodo de cubanos a trav¨¦s del puerto de Mariel, comenz¨® a dudar de la legitimidad de la revoluci¨®n. El 12 de abril lleg¨® a Miami como parte de la gira que emprender¨¢ por el mundo y que en los pr¨®ximos d¨ªas lo llevar¨¢ a Europa, para denunciar que las reformas migratorias aprobadas por el Gobierno de Ra¨²l Castro son solo ¡°cosm¨¦ticas¡± y que la represi¨®n en la isla no ha terminado.
Pregunta. ?C¨®mo sigue su salud? ?Qu¨¦ le han dicho los m¨¦dicos de Miami?
Respuesta. Hoy mismo me restablecieron una parte de la dentadura que hab¨ªa perdido en una golpiza en la c¨¢rcel, y tengo una trombosis en la confluencia de las arterias subclavia y la yugular a consecuencia de la ¨²ltima huelga de hambre, que quiero tratar en estos d¨ªas.
P. Hizo esa huelga para pedir la liberaci¨®n de 26 presos que luego fueron enviados a Espa?a y hoy viven en una situaci¨®n precaria.
R. Algunos compatriotas ten¨ªan la idea de que todo se lo iban a resolver, porque en Cuba el Gobierno asume esa actitud paternalista para quitarte las libertades y el impulso del trabajo. S¨¦ que algunos de estos compatriotas que est¨¢n en Espa?a no quieren trabajar o han cometido actos vand¨¢licos. Ellos son invitados y deben atenerse a las reglas, la disciplina y las leyes de ese pa¨ªs. Quisi¨¦ramos que Espa?a tuviese m¨¢s posibilidad de ayudarlos, pero entendemos que el nivel de desempleo es grande y la prioridad son sus propios ciudadanos.
P. Orlando Zapata muri¨® en huelga de hambre, usted continu¨® su protesta y le siguieron otros opositores. ?El m¨¦todo es a¨²n efectivo para liberar presos pol¨ªticos en Cuba?
R. Cuando hay planificaci¨®n estrat¨¦gica, buena divulgaci¨®n, buena petici¨®n de solidaridad y se busca el momento efectivo para crear conmoci¨®n dentro de la opini¨®n p¨²blica, se logran los objetivos. Para que la huelga de hambre tenga credibilidad hay que caer en los hospitales del Estado cubano y que el propio Estado d¨¦ tu diagn¨®stico exacto. Los huelguistas comenzaron a caer y eso le dio credibilidad a la protesta. El Gobierno cubano trata de crear matrices de opini¨®n contra la huelga de hambre, porque es un m¨¦todo muy efectivo donde surge solidaridad inmediata hacia los reclamantes. Si los huelguistas se mantienen firmes, incluso muri¨¦ndose, da resultado. El Gobierno cubano se ve en la disyuntiva: ?lo dejo morir o lo dejo vivir, y le doy lo que reclama? En el caso de Orlando Zapata se demostr¨® la crueldad del Gobierno cubano. En mi caso, nunca pens¨¦ que el castrismo fuera a soltar a los presos y a dejarme vivo. Pens¨¦ que me iban a dejar morir y despu¨¦s los iban a soltar. Tambi¨¦n fue importante que un grupo de hermanos comenz¨® a hacer fila para la huelga: ¡°Cuando te mueras t¨², voy yo¡±. El Gobierno no sab¨ªa cu¨¢ndo eso se iba a acabar.
P. ?En qu¨¦ momento pol¨ªtico se encuentra Cuba?
R. El hecho de que estemos sentados en una cafeter¨ªa de Miami y que no sea Yoani S¨¢nchez sino usted quien me est¨¦ entrevistando, da la medida de la debilidad del r¨¦gimen. El Gobierno cubano est¨¢ tratando bajo cualquier concepto de limpiar su imagen ante la opini¨®n p¨²blica internacional, para pedirle despu¨¦s a sus socios de la izquierda democr¨¢tica que aboguen para que se levante el bloqueo y para que lleguen inversiones. Ellos saben que la transici¨®n es irreversible. Cuba no es China ni Vietnam, ellos tienen que prepararse para una especie de putinismo. Est¨¢n intentando imitar la transici¨®n rusa, para que los mismos que gobernaron con el totalitarismo sigan gobernando con la democracia.
P. Si la transici¨®n en Cuba fuese como la rusa, ?qui¨¦n ocupar¨ªa el lugar de las mafias?
R. Ellos est¨¢n tratando de buscar un mascar¨®n de proa que sea Miguel D¨ªaz-Canet Berm¨²dez. Pero realmente quien dirige Cuba en este momento es el Ministerio de las Fuerzas Armadas Revolucionarias, est¨¦n de uniforme o de civil. Son ex generales y coroneles los que est¨¢n al frente de emporios econ¨®micos, de empresas mixtas del turismo. Pol¨ªticamente y para el exterior, Miguel D¨ªaz-Canet ser¨ªa el que mandar¨ªa, pero habr¨ªa detr¨¢s un complejo mafioso-militar que ser¨ªa el que tendr¨ªa el poder efectivo.
P. El Gobierno cubano tambi¨¦n ha logrado reposicionarse en la regi¨®n: tiene la presidencia pro tempore de la Celac, ocupa un lugar en Unasur, la OEA le invit¨® a reincorporarse¡
R. S¨ª, pero al mismo tiempo le est¨¢n exigiendo que d¨¦ resultados hacia la democracia. El Gobierno cubano necesita tener la fachada de que permite cierta amplitud, que no va a penalizar la discrepancia pol¨ªtica, entre otras cosas. Pero el punto de inflexi¨®n va a ser la muerte de Fidel Castro. Ra¨²l va a tratar de tener una oposici¨®n manejable y de incentivar cambios para poder perpetuarse junto a sus seguidores. Y no podemos permitir que eso ocurra, el soberano debe ser el pueblo, deben hacerse elecciones con todas las garant¨ªas para que ese pueblo pueda votar por quien quiera. De ah¨ª la necesidad de tener un bloque ¨²nico que represente a la oposici¨®n pac¨ªfica, no-violenta.
P. ?Qu¨¦ tan cerca est¨¢ ese escenario de elecciones libres?
R. No le puedo decir si est¨¢ lejos o cerca. S¨ª s¨¦ que el Gobierno cubano est¨¢ creando el escenario para que haya elecciones porque el contexto le es desfavorable y los l¨ªderes de la revoluci¨®n cubana se est¨¢n muri¨¦ndo. La designaci¨®n de Miguel D¨ªaz-Canel Berm¨²dez como segundo al mando del pa¨ªs no es por gusto, es porque es un hombre negociador, porque no tiene las manos manchadas de sangre y porque es muy cercano a Ra¨²l Castro.
P. De haber elecciones, ?qu¨¦ posibilidades de triunfo tendr¨ªan?
R. Si no hay fraude, contamos con el 97% de la poblaci¨®n cubana. Con Fidel Castro realmente est¨¢n 200 mil personas, que son las m¨¢s comprometidas y las que m¨¢s prebendas tienen. Ahora el camino de la oposici¨®n es hacer proselitismo, aglutinar la mayor cantidad de gente, convertirnos en organizaciones de masas que manejen entre 25 mil y 100 mil opositores p¨²blicos al Gobierno.
P. ?Qu¨¦ expectativas tiene sobre la crisis que atraviesa el Gobierno de Venezuela, un apoyo vital para los Castro?
R. Cuando Cuba estaba siendo presionada por la Uni¨®n Europea para que cambiase hacia la democracia representativa, triunfa Ch¨¢vez en Venezuela y los Castro encontraron en ¨¦l un salvavidas. Ese salvavidas se ha ido desinflando porque la sociedad venezolana ha sido muy intransigente y, teniendo en cuenta la experiencia cubana, est¨¢ dando la batalla adentro de su pa¨ªs. Eso le dificulta la gobernabilidad al chavismo, al nuevo gobierno de Maduro. Todos los socialismos han tra¨ªdo la guerra entre compatriotas, divisi¨®n ideol¨®gica y empobrecimiento, y esto ya se est¨¢ viendo de manera severa en Venezuela. A¨²n con todos los recursos que tiene ese pa¨ªs, el nivel de pobreza, la carencia de alimentos e insumos b¨¢sicos es cada d¨ªa mayor, y hasta tiene que ser reflejada por la propia televisi¨®n p¨²blica cubana, porque tanto los venezolanos como los cubanos que est¨¢n en Venezuela est¨¢n enviando constantemente noticias desalentadoras con respecto a lo que all¨ª est¨¢ ocurriendo.
P. ?La sociedad cubana teme que con la ca¨ªda del chavismo se repita la crisis del periodo especial?
R. Esa es la gran incertidumbre: si el Gobierno cubano ser¨¢ capaz de hacer una apertura pol¨ªtica, social y econ¨®mica antes de caer en una crisis como la que comenz¨® en 1990, hasta el triunfo del chavismo en 1998. La mayor¨ªa de los j¨®venes en Cuba tiende a huir, a dejar la patria atr¨¢s para evitarse verse inmiscuidos en el estallido social que va a haber si la crisis regresa. En aquel momento la sociedad cubana estaba m¨¢s consolidada. Pero ahora es una sociedad desgastada y va a ser muy dif¨ªcil mantener el nivel de estabilidad y gobernabilidad por parte de las autoridades. No hay una ortodoxia ideol¨®gica. No se sabe, ideol¨®gicamente hablando, qu¨¦ es el castrismo actualmente. Hay una p¨¦rdida del rumbo. No se insiste en el marxismo, se est¨¢n tomando medidas neoliberales y sin embargo, no se quiere ser capitalista. Hay una ambig¨¹edad muy grande en la postura del Gobierno y aunque la poblaci¨®n siente miedo, ha aumentado la protesta social, incluso entre los propios seguidores de Fidel Castro. Por eso est¨¢n tratando de tomar medidas para que la protesta social no se transforme en protesta pol¨ªtica.
P. ?Hay unidad en la oposici¨®n en cuanto al sistema pol¨ªtico al que aspiran?
R. Hay diversidad y creemos debe que ser as¨ª. Dentro del consejo de coordinadores de la Uni¨®n Patri¨®tica de Cuba hay gente de franca derecha, de centro y de izquierda. Pero nos unimos en base a cinco puntos fundamentales: la liberaci¨®n incondicional y sin destierro de todos los presos pol¨ªticos; la pr¨¢ctica y aceptaci¨®n de la declaraci¨®n universal de los derechos humanos y todos los otros pactos de las Naciones Unidas; que todos los cubanos tengan derecho a la libre informaci¨®n y puedan establecer medios de prensa alternativos al Gobierno sin que se penalice la libre opini¨®n; que todos los cubanos puedan establecer partidos pol¨ªticos dentro de la isla sin ser penalizados; y que todos los cubanos tengan derecho a participar en la vida pol¨ªtica, econ¨®mica y social de la nueva Cuba que queremos. Esos son los cinco puntos en los que todo el mundo est¨¢ de acuerdo. Las discrepancias en cuanto al bloqueo y otros temas, vamos a dejarlas para cuando triunfemos.
P. Desde que sali¨® de Cuba ha visitado Estados Unidos, Honduras y planea viajar a Europa. ?C¨®mo paga su gira?
R. Me financian dos millonarios cubanos del exilio, uno es de Puerto Rico y otro es de Miami y para m¨ª es un orgullo que los cubanos que han sido pr¨®speros fuera de Cuba aporten a la causa cubana. Decirme mercenario a m¨ª es dec¨ªrselo a Jos¨¦ Mart¨ª, porque ¨¦l recib¨ªa ayuda de los exiliados de Tampa, Cayo Hueso y Nueva York, y yo recibo ayuda de los exiliados.
P. Considerando su formaci¨®n militar, ?c¨®mo opt¨® por la no violencia como principio?
R. Cuando regres¨¦ de Angola, Ra¨²l Castro me regal¨® una pistola y recib¨ª muchas condecoraciones porque fui herido, despu¨¦s me decomisaron todo. En Angola le vi la cara a la guerra y vi que era el mayor de los absurdos. Cuando sal¨ª de la vida militar me jur¨¦ que nunca m¨¢s iba a ser un ser humano violento. Me pueden matar como parte de una guerra o puedo morirme como parte de una huelga de hambre, pero nunca voy a tratar de matar a un ser humano igual que yo. Eso me lo ha ense?ado el amor al pr¨®jimo, incluso al adversario pol¨ªtico, a los que me han torturado, vejado y difamado. El mejor ant¨ªdoto contra ellos es enviarles un mensaje de amor, eso me ha ense?ado esta lucha.
P. ?En su fuero m¨¢s interno no ha pensado ¡°menos mal que no me mor¨ª en aquella ¨²ltima huelga¡±?
R.?En Miami me he dado cuenta de que me he convertido en un s¨ªmbolo y de lo importante que soy para la causa. No ten¨ªa idea de que eso fuese as¨ª. Ahora no me puedo permitir el lujo de hacer algo reprobable porque el Gobierno querr¨ªa desprestigiarme.
R. ?Dentro de Cuba tambi¨¦n lo es?
R. S¨ª, dentro de Cuba soy un s¨ªmbolo, aunque la gente no se puede identificar p¨²blicamente conmigo. De eso me percat¨¦ cuando los ¨²ltimos oficiales que me han reprimido me han dicho: ¡®Para m¨ª es un honor ser el oficial que lo atiende¡¯.
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