Bruselas vetar¨¢ la colaboraci¨®n con Israel que afecte a los territorios ocupados

La Uni¨®n Europea no volver¨¢ a firmar ning¨²n acuerdo con Israel que implique la participaci¨®n de los territorios ocupados. La Comisi¨®n Europea ha aprobado unas normas de cooperaci¨®n con ese pa¨ªs que excluyen los proyectos que tengan que ver con las zonas ocupadas en 1967. Eso supone, por ejemplo, que no habr¨¢ financiaci¨®n para planes de investigaci¨®n y desarrollo que tengan como protagonistas a centros de estudio con sede en los territorios palestinos ocupados.

El Ejecutivo comunitario adopt¨® esa decisi¨®n a finales de junio, pero la prensa israel¨ª ha empezado a hacerse eco este martes de esas implicaciones. Una portavoz comunitaria asegura que las normas de actuaci¨®n no hacen sino ratificar la actitud que ha mantenido hasta ahora la Uni¨®n Europea, que no reconoce la potestad israel¨ª sobre esos territorios. La ¨²nica novedad es que ahora se pone por escrito. No obstante, la publicaci¨®n de esta gu¨ªa amenaza con abrir un conflicto pol¨ªtico con Israel, que se ha tomado como una afrenta ese texto. M¨¢xime porque en la pr¨¢ctica obliga a consignar que los acuerdos firmados con la Uni¨®n Europea excluir¨¢n la utilizaci¨®n de los asentamientos.

¡°Esa gu¨ªa permitir¨¢ a la Uni¨®n Europea y a Israel discutir sobre los acuerdos bilaterales que se est¨¢n preparando con vistas a introducir una cl¨¢usula territorial clara¡±, asegura la portavoz comunitaria. Es decir, para beneficiarse de esos intercambios, las autoridades israel¨ªes tendr¨¢n que reconocer, m¨¢s o menos expl¨ªcitamente, que los proyectos no incluyen a ninguna entidad p¨²blica o empresa con sede en esos territorios ocupados. Las normas adoptadas por la Comisi¨®n derivan de un mandato que otorgaron los Estados miembros a finales de 2012 para limitar los acuerdos con Israel a los territorios reconocidos por la comunidad internacional.

La mayor parte de la cooperaci¨®n entre Israel y la Uni¨®n Europea se centra en el ¨¢mbito comercial o en proyectos de investigaci¨®n y desarrollo, donde Israel es puntero. Hasta ahora hab¨ªa casos en los que pod¨ªa concurrir a un proyecto (y obtener financiaci¨®n europea) con una universidad enclavada en los asentamientos ilegales o bien vender productos con un arancel m¨¢s bajo de empresas cuya sede social o materia prima proced¨ªa de las zonas ocupadas. Algunos de esos casos se hab¨ªan frenado por protestas realizadas sobre todo por organizaciones palestinas, pero a partir de ahora quedar¨¢ claro que la operaci¨®n es imposible desde el principio.

Esa nueva doctrina ser¨¢ de aplicaci¨®n para todos los nuevos proyectos firmados en el marco presupuestario 2014-2020, en buena medida en el programa de investigaci¨®n Horizonte 2020. La portavoz comunitaria asegura que las instituciones europeas simplemente aplican su convicci¨®n de que los asentamientos ¡°son ilegales bajo las leyes internacionales¡±. Y espera que Israel se implique igualmente en los proyectos comunitarios. ¡°Queremos asegurarnos de que la participaci¨®n israel¨ª no se pone en cuesti¨®n, de forma que Israel pueda hacer uso de todas las posibilidades que ofrece el nuevo marco financiero¡±.

Las primeras reacciones del Ejecutivo israel¨ª ponen en duda esa reacci¨®n amistosa. ¡°Se trata de una iniciativa muy inquietante adoptada en un mal momento porque no hace sino reforzar el rechazo de los palestinos a retomar las negociaciones¡±, ha asegurado el viceministro de Asuntos Exteriores, Zeev Elkin, informa France Presse. Pese a todo, el dirigente ha intentado quitar hierro a lo aprobado: ¡°Est¨¢ claro que va a crear dificultades adicionales en nuestros contactos con la Uni¨®n Europea pero no hay que exagerar el impacto. No se trata de una llamada al boicoteo¡±.