M¨¦xico revive la tragedia de las mujeres de Ju¨¢rez
El Estado de M¨¦xico vive un alarmante ascenso en la cifra de feminicidios Las autoridades se niegan a declarar la alerta de g¨¦nero
No siempre se aprende de los errores. Hace una d¨¦cada, M¨¦xico se horrorizaba con la aparici¨®n casi diaria de cad¨¢veres de mujeres en Ciudad Ju¨¢rez. Entonces, el Estado mexicano no fue capaz de garantizar el derecho a la vida de las mujeres, como condena una sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos de 2009. Y ahora, 20 a?os despu¨¦s de que comenzaran los feminicidios que dejaron cientos de muertas en la ciudad fronteriza, M¨¦xico afronta una nueva crisis: no es Ciudad Ju¨¢rez en los a?os 90, es el Estado de M¨¦xico en 2013.
Las asociaciones civiles argumentan que en 2011 y 2012 se registraron en este Estado del centro del pa¨ªs 563 casos de mujeres asesinadas por la ¨²nica raz¨®n de ser mujer. Esta ¨²ltima semana es un claro ejemplo de la tragedia: los cad¨¢veres de cinco j¨®venes, todos ellos con s¨ªntomas de una brutal violencia, han aparecido en el Valle de Chalco, una localidad de unos 350.000 habitantes situada precisamente en el Estado de M¨¦xico.
Hace cinco a?os que se cre¨® el mecanismo de la alerta por violencia de g¨¦nero, que se ha convertido en una alarma muda. Ni estas cinco muertas ni las 563 de los dos ¨²ltimos a?os han convencido al Sistema Nacional para Prevenir, Atender, Sancionar y Erradicar la violencia de que lo activen. Este viernes han vuelto a negarse a poner en marcha una alerta que hasta el momento sigue in¨¦dita a pesar de que el n¨²mero de muertes en el pa¨ªs aument¨® un 68% entre 2007 y 2009, seg¨²n ONU Mujeres. La cifra, por ejemplo, se triplic¨® en el Estado de Baja California. Las asociaciones han demandado su activaci¨®n en seis ocasiones: una en Oaxaca, dos en Guanajuato, una en Nuevo Le¨®n, otra en Hidalgo y otra en el Estado de M¨¦xico. En estos cinco a?os, y en tan solo trece de los Estados, murieron violentamente 4.112 mujeres y ni?as, seg¨²n el Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio (OCNF).
¡°Tenemos los mecanismos para enfrentarnos a este problema, pero las autoridades parecen no querer reconocerlo. Y si no se reconoce, no se pueden poner soluciones. Mientras, las mujeres mueren¡±, explica Mar¨ªa de la Luz Estrada, coordinadora del OCNF. Este organismo sostiene que, de las 563 v¨ªctimas de feminicidio en el Estado de M¨¦xico, solo 115 fueron catalogadas como tal por las autoridades, evitando as¨ª enfrentar el problema.
De las 563 v¨ªctimas de feminicidio en el Estado de M¨¦xico que reportan las asociaciones, solo 115 fueron catalogadas como tal?
Marcela Lagarde, presidenta de la Red de Investigadoras por la Vida y la Libertad de las Mujeres, considera que hay ¡°un fuerte problema de impunidad, de casos que no se reconocen como feminicidio pero que tienen unos patrones que se repiten: mujeres j¨®venes que desaparecen y que son encontradas con signos de agresi¨®n sexual y una violencia desmedida¡±, explicaba Lagarde en un acto reciente. La Procuradur¨ªa del Estado de M¨¦xico "ha reconocido que el 73% de las mujeres asesinadas en la entidad en 2011 y 2012 fueron encontradas en v¨ªas p¨²blicas como basureros, y que el 42% fueron asesinadas con el uso de la fuerza f¨ªsica", explican desde el Observatorio.
Si se activara la alerta en el Estado de M¨¦xico, donde el presidente Pe?a Nieto fue gobernador, se pondr¨ªan en marcha unos protocolos para saber qu¨¦ ocurre en los diez municipios que concentran m¨¢s de la mitad de los asesinatos. Tambi¨¦n tendr¨ªan que investigarse a fondo las 955 desapariciones de mujeres que se registraron en un per¨ªodo de 18 meses (de enero de 2011 a junio de 2012).
M¨¢s de la mitad de las desaparecidas ten¨ªan menos de 21 a?os. ¡°Parece bastante obvio pensar que si la mayor¨ªa de las desaparecidas son ni?as, puedan ser v¨ªctima de la trata¡±, asegura Mar¨ªa de la Luz Estrada. ¡°Sabemos que si se las busca en las primeras horas hay m¨¢s posibilidades de que no hayan podido sacarlas del Estado o del pa¨ªs. Por eso no se puede investigar como una desaparici¨®n com¨²n, sino atendiendo a un criterio de violencia contra la mujer. Sabiendo que hay un problema que est¨¢ golpe¨¢ndolas a ellas¡±, explica, por su parte, Marcela Lagarde.
Mientras, las mujeres mueren.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.