El papa Francisco vuelve a Am¨¦rica
El Pont¨ªfice viaja a R¨ªo de Janeiro a la Jornada Mundial de la Juventud
El papa Francisco hered¨® de Benedicto XVI un informe secreto sobre los venenos que afligen al Vaticano, una enc¨ªclica sobre la fe casi escrita y un viaje a R¨ªo de Janeiro para presidir la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ). Los tres legados del anciano Joseph Ratzinger se entrelazan ahora de forma simb¨®lica. Jorge Mario Bergoglio vuelve a Am¨¦rica en medio de los rumores sobre la dimisi¨®n de monse?or Battista Ricca, el diplom¨¢tico que nombr¨® el 15 de junio para limpiar las cuentas del banco del Vaticano y cuyo escandaloso pasado le hab¨ªa sido ocultado. Adem¨¢s, durante su estancia del 22 al 28 de julio en Brasil, el papa Francisco tendr¨¢ la oportunidad de recordar ante millones de j¨®venes, principales afectados por unos tiempos plagados de incertidumbres, un mensaje que sintetiza su discurso y que incluy¨® en la enc¨ªclica Lumen Fidei: ¡°No os dej¨¦is robar la esperanza¡±.
Antes de perder las fuerzas ¨Cy tal vez la esperanza¡ª para acometer el ¨ªmprobo trabajo de limpiar el Vaticano, Joseph Ratzinger anunci¨® as¨ª, al t¨¦rmino de la Jornada Mundial de la Juventud que se celebr¨® en Madrid en agosto de 2011, la elecci¨®n de R¨ªo de Janeiro: ¡°La c¨¦lebre estatua del Cristo Redentor, que domina aquella hermosa ciudad brasile?a, ser¨¢ su s¨ªmbolo elocuente. Sus brazos abiertos son el signo de la acogida que el Se?or regala a cuantos acuden a ¨¦l, y su coraz¨®n representa el inmenso amor que tiene por cada uno de vosotros. ?Dejaos atraer por ¨¦l!¡±.
Durante los ¨²ltimos d¨ªas, el papa Francisco se ha acercado a visitar a Joseph Ratzinger, que sigue viviendo en el monasterio Mater Ecclesiae del Vaticano, y han rezado juntos por el ¨¦xito de las jornadas, en las que se prev¨¦ la participaci¨®n de dos millones y medio de j¨®venes de todo el mundo. Luego, Francisco, menos ceremonioso que su antecesor, ha utilizado su cuenta de Twitter para confirmar la cita: ¡°Muchos de ustedes, queridos j¨®venes, han llegado ya a R¨ªo y otros muchos est¨¢n llegando en estas horas. Nos vemos all¨ª dentro de tres d¨ªas¡±.
Antes, Jorge Mario Bergoglio ha tenido que solventar otros asuntos menos agradables que el encuentro con unas multitudes ya predispuestas a los v¨ªtores, el rezo conjunto y la fiesta. El Vaticano, como sufri¨® en sus carnes Benedicto XVI y explica el misterioso informe elaborado por tres cardenales, es un nido de intrigas. El asunto de monse?or Battista Ricca, nombrado el 15 de junio como prelado del Instituto para las Obras de Religi¨®n (IOR) y ca¨ªdo en desgracia hace unos d¨ªas, despu¨¦s de saberse que la Curia hab¨ªa ocultado al Papa que su nuevo hombre de confianza ten¨ªa a sus espaldas un rosario de esc¨¢ndalos de cariz sexual, ha demostrado a Francisco que aquella frase esculpida por L¡¯Osservatore Romano para definir la situaci¨®n de Benedicto XVI tal vez siga estando vigente: ¡°Un pastor rodeado por lobos¡¡±.
?Lograr¨¢ el Papa argentino llevar adelante sus ambiciosas reformas o cosechar¨¢ el mismo fracaso que el Papa alem¨¢n, secuestrado por el poder de una Curia inmovilista? Una de las primeras medidas que tom¨® Francisco para evitar el peligroso aislamiento ¨Cy de paso lanzar un mensaje contra el lujo¡ªfue renunciar al apartamento papal y quedarse a vivir en la residencia de Santa Marta, donde comparte misa y desayuno con los religiosos que all¨ª se hospedan. Pero, como acaba de demostrar el caso Ricca, los grupos ultraconservadores de la Iglesia que tan bien vivieron con Juan Pablo II y lograron bloquear a Benedicto XVI est¨¢n dispuestos a debilitar el tremendo empuje reformista de Francisco.
Unos planes de cambio que ser¨¢n m¨¢s asequibles cuanto m¨¢s se compaginen palabras y hechos. Y, a este respecto, el viaje a R¨ªo de Janeiro ¡ªaunque heredado¡ª viene de perlas a sus planes. El papa que lleg¨® del fin del mundo vuelve a la periferia para encontrarse en una favela con los excluidos, en un hospital con los que sufren adicci¨®n y enfermedad y en el palacio arzobispal con un grupo de presos.
Tambi¨¦n ver¨¢ a los dirigentes pol¨ªticos de Brasil y de otros pa¨ªses invitados por la presidenta Dilma Rousseff y, antes de que se inicie oficialmente las Jornada Mundial de la Juventud, volar¨¢ a la bas¨ªlica de Nuestra Se?ora Aparecida, a la que profesa gran devoci¨®n. All¨ª se encontrar¨¢ con el presidente de la Confederaci¨®n Nacional de Obispos de Brasil, Raymundo Damasceno Assis, quien este domingo se refiri¨® en un art¨ªculo de prensa a las protestas de millones de brasile?os: ¡°?No queremos una juventud alienada e indiferente! Los cientos de miles de j¨®venes demostraron indignaci¨®n ante estructuras de poder y acciones de gobierno que hieren la vida y no respetan la dignidad humana¡±.
Aunque sigue siendo el pa¨ªs con mayor n¨²mero de cat¨®licos, la Iglesia de Brasil ha visto c¨®mo en los ¨²ltimos a?os sus templos se vaciaban mientras se llenaban los de las Iglesias evang¨¦licas. Seg¨²n un sondeo del Instituto Datafolha publicado el domingo por la prensa brasile?a, el n¨²mero de personas mayores de 16 a?os que se declaran cat¨®licos baj¨® del 64% al 57% en los ¨²ltimos cinco a?os. Seg¨²n el estudio, los asuntos que separan a los cat¨®licos de la Iglesia son su postura frente al matrimonio homosexual, el aborto, los m¨¦todos anticonceptivos y la adopci¨®n de ni?os por parte de parejas del mismo sexo. Curiosamente los mismos temas que el papa Francisco se ha encargado de evitar en sus discursos desde que fue elegido Papa.
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