Los presos en huelga de California podr¨ªan ser alimentados a la fuerza
136 internos se matienen sin comer desde hace 44 d¨ªas en protesta por las condiciones de los encarcelados en aislamiento
Una orden judicial federal ha autorizado a los funcionarios de prisiones del Estado de California a alimentar por la fuerza a los presos en huelga de hambre en el caso de que peligre su vida, a¨²n en contra de su voluntad. El dictamen se produce despu¨¦s de que el Estado argumentase ante el juez del distrito federal, Thelton Hendenson, que ¡°exist¨ªa el riesgo de que los reclusos podr¨ªan haber sido obligados a participar en la huelga de hambre y coaccionados a declarar por escrito su deseo de no ser reanimados a la fuerza¡±.
De momento no se ha llevado a la pr¨¢ctica esta orden, pero podr¨ªa ponerse en marcha los pr¨®ximos d¨ªas en el caso de que se vea gravemente deteriorada la salud de los 136 internos que desde hace 44 d¨ªas mantienen la huelga de hambre. Protestan por las ¡°condiciones inhumanas¡± que sufren los internos sometidos a aislamiento indefinido en las prisiones de California. 69 de los huelguistas han mantenido el ayuno desde que comenzara la huelga el 7 de julio y 67 lo han hecho por periodos m¨¢s cortos, seg¨²n fuentes penitenciarias.
Estudios cl¨ªnicos se?alan que despu¨¦s de 40 d¨ªas sin ingerir alimentos el cuerpo comienza a acusar serios da?os y aumenta el riesgo de infartos y ataques al coraz¨®n. Joyce Hayhoe, portavoz medico de las prisiones, ha manifestado que ¡°aunque todav¨ªa ning¨²n interno ha llegado al estado cr¨ªtico en que necesite ser alimentado, vamos a ser proactivos al respecto¡±.
¡°Cuando sea necesario¡±, ha dicho Hayhoe, ¡°vamos a administrar a los prisioneros nutrientes por v¨ªa intravenosa¡±. Si bien, no se descarta tampoco el uso de sondas nasales que bombean alimentos al est¨®mago, el sistema utilizado con los prisioneros de Guant¨¢namo.
Jules Lobel, representante de muchos de los reos que protestan por sus condiciones de confinamiento, manifiesta que ¡°la alimentaci¨®n forzosa viola las leyes internacionales y debe ser solo usada como un ¨²ltimo recurso. Existen otras alternativas tales como permitir a los presos atenuar la huelga de hambre ingiriendo jugos y negociar con ellos¡±. A ambas medidas el Estado ha dicho claramente ¡°no¡±.
Es la segunda vez que los prisioneros se declaran en huelga de hambre para protestar por las pol¨ªticas de aislamiento indefinido que practica el sistema penitenciario de California con los internos vinculados a bandas criminales. En esta ocasi¨®n, la protesta ya se ha prolongado el doble del tiempo que en 2011 y adem¨¢s ha sido masiva, con 30.000 presos en huelga en su momento de mayor apogeo.
Esta huelga se suma a los muchos problemas que tiene que afrontar el gobierno de Jerry Brown en lo relativo al sistema penitenciario. Antes de que termine el a?o 9.600 presos deben ser liberados, para cumplir con el objetivo de reducir al 137,7% la capacidad de las prisiones de California. Las ¨®rdenes de los jueces federales compelen al Estado a poner fin a la saturaci¨®n que desde hace mucho tiempo vienen padeciendo las prisiones de California.
¡°No vamos a permitir una liberaci¨®n masiva de presos¡±, ha manifestado Brown en la cumbre medioambiental de Lake Tahoe que se est¨¢ celebrando estos d¨ªas. ¡°El Estado tendr¨¢ que hacer algunas inversiones¡±, ha dicho. De hecho se contempla utilizar 450 millones de d¨®lares de los mas de 1.000 millones de d¨®lares del fondo de emergencia destinados a prisiones privadas y otros alojamientos alternativos. Todas las piezas del puzle deber¨¢n quedar colocadas en no mas de cuatro meses. Y no va ser f¨¢cil.
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