El exdirigente chino Bo Xilai, condenado a cadena perpetua

Un tribunal ha condenado hoy al exdirigente del Partido Comunista Chino Bo Xilai a cadena perpetua, tras ser declarado culpable por cargos de soborno, malversaci¨®n de fondos y abuso de poder. El resultado del juicio con m¨¢s implicaciones pol¨ªticas de China en m¨¢s de tres d¨¦cadas fue anunciado por el Tribunal Popular Intermedio de la ciudad oriental de Jinan en su cuenta oficial del microblog Weibo (http://e.weibo.com/jinanzhongyuan), el Twitter chino, despu¨¦s de una breve audiencia el domingo por la ma?ana.

"La opini¨®n del acusado y de sus abogados defensores no es aceptada por la corte", dijo el presidente del tribunal, seg¨²n Weibo. "El tribunal ha decidido imponer cadena perpetua, despojar (a Bo) de sus derechos pol¨ªticos de por vida, y confiscar todos sus bienes personales". Algunos comentaristas han dicho que la dura sentencia -se esperaban 15 a?os de prisi¨®n- tiene todos los visos de ser una decisi¨®n del Gobierno de Pek¨ªn para intentar poner fin al esc¨¢ndalo que rodea a Bo, cuya esposa Gu Kailai fue condenada el a?o pasado por el asesinato en 2011 de Neil Heywood, un hombre de negocios brit¨¢nico.

El asesinato desencaden¨® el mayor esc¨¢ndalo pol¨ªtico desde las represiones de la plaza de Tiananmen en 1989 y la reparaci¨®n de las grietas creadas entre los aliados y opositores de Bo ha sido uno de los principales retos para el nuevo l¨ªder chino, Xi Jinping, durante su primer a?o en el poder. El caso se desencaden¨® en febrero del a?o pasado, cuando Wang Lijun, ex jefe de la polic¨ªa de Chongqing e importante asesor de Bo en la ¨¦poca, huy¨® al consulado de Estados Unidos en Chengdu, la capital de la provincia de Sichuan al suroeste del pa¨ªs. Wang declar¨® que tem¨ªa ser asesinado por los agentes de Bo, tras decirle que ten¨ªa pruebas de que su mujer hab¨ªa matado a Heywood.

Hasta su ca¨ªda, Bo era el m¨¢ximo l¨ªder de la ciudad interior de Chongqing, y miembro del Politbur¨® del partido, uno de los 25 hombres m¨¢s poderosos del pa¨ªs. Bo tambi¨¦n era uno de los principales candidatos al m¨¢ximo ¨®rgano de gobierno, el Comit¨¦ Permanente. Antes de ser el secretario del partido en Chongqing entre 2007 y 2012, Bo fue alcalde de la ciudad nororiental de Dalian, en la provincia de Liaoning, en la d¨¦cada de los 90, gobernador de Liaoning de 2001 a 2004 y luego ministro de Comercio.

Amistoso y h¨¢bil con los medios de comunicaci¨®n, Bo ten¨ªa seguidores a nivel nacional, principalmente dirigidos por la "nueva izquierda", un movimiento que aboga por un renacimiento de los valores mao¨ªstas y mayor intervencionismo estatal en la sociedad y la econom¨ªa. Su popularidad hizo que Bo se convirtiera en una figura que divid¨ªa a los dirigentes del partido: unos lo ve¨ªan como un personaje clave para revitalizar el partido, y otros le consideraban una amenaza para el sistema de toma de decisiones basado en el consenso que ha prevalecido durante las ¨²ltimas d¨¦cadas.

Pero tras el estallido del esc¨¢ndalo, Bo fue destituido de sus cargos pol¨ªticos, expulsado del Politbur¨® y del partido, y sometido a investigaci¨®n. En otro juicio el a?o pasado, Gu recibi¨® una sentencia de muerte suspendida por el asesinato del hombre de negocios brit¨¢nico, mientras que Wang fue condenado a 15 a?os de prisi¨®n, por encubrimiento y otros delitos.

Los juicios de este tipo en China suelen estar cuidadosamente coreografiados, con el resultado decidido con mucha antelaci¨®n. Pero Bo pareci¨® haber confundido las expectativas al declararse no culpable de los cargos y poner en marcha una defensa en¨¦rgica, admitiendo s¨®lo haber cometido "serios errores de juicio" que hab¨ªan avergonzado al pa¨ªs durante su juicio el mes pasado.

Bo fue acusado de aceptar sobornos por m¨¢s de 20 millones de yuanes (2,4 millones de euros), que recibi¨® de socios de negocios y utiliz¨® para pagar viajes, una villa en el sur de Francia y otros lujos y malversaci¨®n de cinco millones de yuanes (600.000 euros) m¨¢s en fondos estatales. Tambi¨¦n fue acusado por abuso de poder al despedir a Wang como jefe de polic¨ªa para impedir la investigaci¨®n sobre el asesinato de Heywood. Los cargos excluyeron supuestos abusos durante la represi¨®n del crimen organizado que Bo supervis¨® en Chongqing, donde prest¨® poca atenci¨®n al procedimiento legal.

Hablando sobre la obstrucci¨®n a la justicia de Bo en el caso Heywood, Wang Xuming, el juez en Jinan, dijo que "tuvo una influencia particularmente mala en la sociedad y da?¨® seriamente los intereses de la naci¨®n y el pueblo".

El tribunal no dijo si Bo planeaba apelar, aunque reconoci¨® su derecho a hacerlo. Antes de la sentencia, miembros cercanos a la familia hab¨ªan expresado sus planes de recurrirla. Las apelaciones en China rara vez tienen ¨¦xito en los casos criminales y casi nunca en los pol¨ªticamente sensibles por sus caracter¨ªsticas, seg¨²n expertos legales y pol¨ªticos.

Para el juicio de Bo, las autoridades chinas tomaron la medida sin precedentes de publicar transcripciones parciales de las vistas casi a tiempo real a trav¨¦s de Weibo, en lo que algunos analistas ven como un intento de dar m¨¢s credibilidad a los procedimientos a los ojos de un p¨²blico esc¨¦ptico.