Caen 20, sobrevive Merkel

La crisis como excusa, como lugar com¨²n. La crisis como explicaci¨®n para cualquier fen¨®meno, desde el descenso del ¨ªndice de divorcios o de accidentes en carretera al aumento de la mortalidad entre Gobiernos democr¨¢ticos. La crisis global, una enfermedad casi cr¨®nica gestada tras aquel hurac¨¢n financiero del mundo posLehman Brothers, se ha llevado por delante a una veintena de Ejecutivos en Europa en el ¨²ltimo lustro. Notables (Berlusconi en Italia, Zapatero en Espa?a), megal¨®manos que iban a refundar el capitalismo (el franc¨¦s Sarkozy) y pol¨ªticos m¨¢s modestos en la escena continental han ca¨ªdo sin remisi¨®n desde que en abril de 2009 el checo Mirek Topolanek se convirtiera en el primer l¨ªder barrido por la poderosa y a la vez gastad¨ªsima crisis. Conservadores, liberales, independientes y sobre todo progresistas: nadie parec¨ªa capaz de resistir los embates provocados por la peor crisis desde la II Guerra Mundial. Hasta Angela Merkel. Las elecciones alemanas del primer d¨ªa de oto?o han acabado este domingo con ese fen¨®meno pol¨ªtico, si se a?ade la excepci¨®n que supuso el let¨®n Valdis Dombrovskis.

La crisis europea sigue siendo dura en el norte (Holanda acaba de aprobar duros recortes) y sobre todo en el castigado sur, pero Alemania est¨¢ viviendo una crisis muy benigna. No est¨¢ en recesi¨®n. Su paro est¨¢ en m¨ªnimos de las dos ¨²ltimas d¨¦cadas. Apenas ha hecho reformas desde la ¨¦poca del socialdem¨®crata Schr?der. Y a pesar de la crisis de deuda europea, o precisamente por ella, Berl¨ªn se ha ahorrado miles de millones en intereses. Mientras toda Europa aplica a rajatabla recortes y reformas, Merkel se ha presentado a la reelecci¨®n con un programa de 30.000 millones para gasto social y apoyo a las familias, apropi¨¢ndose propuestas de los Verdes (el cierre de centrales nucleares) y socialdem¨®cratas (salario m¨ªnimo, freno a los alquileres en grandes ciudades), ha suprimido el copago y se ha resistido ¡ªhasta ahora¡ª a cualquier f¨®rmula que obligue al contribuyente alem¨¢n a rascarse el bolsillo para pagar la crisis del euro. El debate electoral se ha centrado en las revelaciones sobre el espionaje de EE UU, la subida de los precios energ¨¦ticos y los servicios a la infancia. Apenas nada m¨¢s. Ni rastro de pol¨ªticas de recorte, ni rastro del camino de espinas que provoc¨® que otros Gobiernos cayeran, uno tras otro, desde aquella moci¨®n de censura a Topolanek en primavera de 2009.

Alemania lleg¨® a la crisis con los deberes hechos. Hizo todo eso hace 10 a?os, aunque en condiciones muy diferentes: con todos los dem¨¢s pa¨ªses subidos a una ola de crecimiento y deuda. Con Merkel convertida en la primera jefa de Gobierno continental capaz de resistir el vendaval de la crisis, su liderazgo es incontestable en Europa: ¡°Espero continuar cooperando estrechamente con Merkel¡±, ha dicho este domingo Herman Van Rompuy, presidente del Consejo Europeo, recogiendo la sensaci¨®n general en Bruselas y en todas las capitales, a la espera de una Merkel m¨¢s constructiva que en el pasado.