Los democristianos hacen gui?os fiscales al SPD ante la dif¨ªcil negociaci¨®n pol¨ªtica

Los democristianos alemanes de la CDU empiezan a moverse hacia el centroizquierda, en busca de la coalici¨®n con la que Angela Merkel pueda gobernar Alemania durante los pr¨®ximos cuatro a?os. La canciller se qued¨® sin sus actuales socios de Gobierno, los liberales del FDP, fuera del Parlamento desde que no llegaron al 5% de los votos en las generales, el domingo. El ministro de Hacienda en funciones, el democristiano Wolfgang Sch?uble,ha sugerido este mi¨¦rcoles una primera concesi¨®n a los socialdem¨®cratas del SPD: al no descartar una subida los impuestos. El SPD y Los Verdes se presentaron a las elecciones prometiendo aumentar la carga fiscal sobre los que m¨¢s ganan para financiar m¨¢s gastos en infraestructuras y educaci¨®n. Preguntado al respecto por el semanario Die Zeit, Sch?uble ha dicho que ¡°habr¨¢ que ver c¨®mo se desarrollan las conversaciones¡±. Son los primeros cantos de sirena del ministro m¨¢s influyente del actual Ejecutivo, que durante la campa?a electoral hab¨ªa criticado duramente los planes fiscales de la oposici¨®n. Uno de los lemas de Merkel fue que ¡°con la CDU no habr¨¢ subidas de impuestos¡±.

El nuevo Bundestag queda reducido a cuatro grupos, entre los que el democristiano de Merkel tendr¨¢ un peso abrumador. La canciller qued¨® a cinco esca?os de la mayor¨ªa absoluta y necesita un socio. El SPD y de Los Verdes quieren evitar la impresi¨®n de que buscan el acuerdo con Merkel a cualquier precio. Los socialdem¨®cratas han abierto un debate interno, en el que descuellan las voces cr¨ªticas a una nueva gran coalici¨®n como la que pactaron con Merkel en 2005. Seg¨²n una encuesta elaborada el d¨ªa de las elecciones, el 57% de los alemanes favorece una reedici¨®n de aqu¨¦l pacto de Gobierno. La alternativa a una alianza de Merkel con el SPD o con Los Verdes ser¨ªan unas nuevas elecciones. Y la oposici¨®n podr¨ªa salir muy malparada.

Los socialdem¨®cratas pagaron un abrumador precio electoral por sus cuatro a?os como socios minoritarios de Merkel, que capitaliz¨® los ¨¦xitos del Ejecutivo que sac¨® a Alemania de la crisis de 2008 y 2009. Ahora, el SPD est¨¢ mostrando una resistencia obligada, al menos, por las apariencias. Sea cual sea el resultado de la reuni¨®n de su Ejecutiva del viernes, los l¨ªderes del partido tendr¨¢n que dar muchas explicaciones a unas bases reacias a otros cuatro a?os de v¨ªa crucis bajo el liderazgo de Merkel. La experiencia de los liberales durante estos ¨²ltimos cuatro a?os tampoco anima a un pacto con la canciller: igual que el SPD entre 2005 y 2009, los liberales padecieron una vertiginosa ca¨ªda de popularidad y prestigio. En 2009, el FDP cosech¨® su mejor resultado hist¨®rico. En 2013, el peor, que por primera vez le ha dejado fuera del Bundestag.

El soci¨®logo de Hamburgo Oliver Strijbis cree que el principal riesgo de los grandes partidos en una nueva gran coalici¨®n ser¨ªa el impulso que tendr¨ªan las formaciones situadas en los extremos del espectro democr¨¢tico. A la izquierda, el SPD podr¨ªa perder de nuevo los apoyos que logr¨® recuperar de Die Linke. Los de Merkel, por su parte, sufrir¨ªan una mayor erosi¨®n por la derecha hacia el partido euroesc¨¦ptico Alternativa para Alemania (AFD) o formaciones parecidas que podr¨ªan aparecer en los pr¨®ximos a?os si no amaina la crisis europea. Los antieuro no entraron en el Bundestag, pero fueron la ¨²nica formaci¨®n que logr¨® pescar votos en los viveros de la CDU. La gran cantera del joven partido fue el malhadado FDP, del que se llevaron casi medio mill¨®n de votos.

La salida de J¨¹rgen Trittin como jefe parlamentario de Los Verdes puede allanar tambi¨¦n el camino hacia una novedosa coalici¨®n entre democristianos y ecologistas. Al dar marcha atr¨¢s en sus planes de alargar la vida ¨²til de las centrales nucleares, Merkel derrib¨® hace dos a?os el principal muro que los separaba. El l¨ªder de la CDU en Renania del Norte-Westfalia, Armin Laschet, ha abogado por tender puentes para negociar con Los Verdes.