Venezuela echa a tres diplom¨¢ticos de Estados Unidos acusados de sabotaje

El presidente de Venezuela, Nicol¨¢s Maduro, expuls¨® en la tarde del lunes a tres funcionarios de la Embajada de Estados Unidos en Caracas. Los empleados p¨²blicos, identificados inicialmente por distintos medios como Kelly Kenterline, Elizabeth Hoffman y David Mutt, tienen 48 horas para abandonar el pa¨ªs. Kenterline era la encargada de Negocios, la diplom¨¢tica de m¨¢s alto rango en el pa¨ªs, donde Washington no tiene embajador

Maduro dijo que asum¨ªa ¡°toda la responsabilidad¡± de esta medida, as¨ª como de las que vendr¨ªan ¡°para proteger al pa¨ªs¡±. Seg¨²n el mandatario venezolano, los diplom¨¢ticos norteamericanos habr¨ªan participado en el financiamiento de grupos de sabotaje, ¡°especialmente activos en el estado Bol¨ªvar¡±, provincia al sureste del pa¨ªs donde se aloja el grueso de la industria pesada venezolana, en particular, el sector sider¨²rgico, que en la actualidad enfrenta una larga huelga de sus obreros.

¡°No le tenemos miedo a lo que vaya a hacer el gobierno de Barack Obama¡±, desafi¨® a Washington.

En los ¨²ltimos d¨ªas, en Venezuela corren todo tipo de rumores. Adem¨¢s de las ya cr¨®nicas dificultades de abastecimiento y la virtual quiebra de las arcas p¨²blicas, las versiones de inquietud en los cuarteles son la comidilla del d¨ªa.

Durante la intervenci¨®n en la que Maduro pidi¨® a su canciller, El¨ªas Jaua, tramitar la expulsi¨®n de los funcionarios estadounidenses, anunci¨® tambi¨¦n la creaci¨®n de un nuevo Centro Estrat¨¦gico de Seguridad y Protecci¨®n de la Patria encargada de, seg¨²n dijo, ¡°conocer y derrotar a tiempo los planes que se hagan contra nuestro pa¨ªs¡±. El presidente puso a la cabeza de la nueva dependencia al general del Ej¨¦rcito Gustavo Gonz¨¢lez L¨®pez, quien hasta ahora se desempe?aba como comandante de la secci¨®n de vigilancia del sistema el¨¦ctrico.

Desde hace semanas, Maduro viene denunciando que Venezuela es objeto de una guerra de nueva generaci¨®n, de la que ser¨ªan expresiones la escasez, la inflaci¨®n, los repetidos cortes en el servicio el¨¦ctrico y diversas intentonas, siempre frustradas, de magnicidio. ¡°Ellos buscan generar un punto de quiebre¡±, asegur¨® durante el acto de conmemoraci¨®n del bicentenario del Batall¨®n de Infanter¨ªa Atanasio Girardot. ¡°Con ese quieren que se precipiten otros puntos de quiebre¡±, fue la imagen utilizada por Maduro, quien ha se?alado este mes de octubre como decisivo para la continuidad de su gesti¨®n, en vista de un supuesto plan denominado ¡°Colapso Total¡± que fuerzas de la oposici¨®n venezolana y de potencias extranjeras ¨Cpresumiblemente, de Estados Unidos- habr¨ªan convenido ejecutar ese mes.

Las palabras del presidente venezolano no sirvieron, sin embargo, para disipar los rumores de malestar entre las filas castrenses, resquemores que tendr¨ªan origen en la renuencia del Gobierno de Maduro a reclamar a la vecina Guyana sus recientes concesiones petroleras en el Territorio Esequibo ¨Cuna regi¨®n que Georgetown controla pero que Caracas reclama desde hace un siglo-, y las informaciones, nebulosas y nunca confirmadas, sobre la nacionalidad del propio mandatario, de quien voceros opositores sostienen naci¨® en Colombia.

¡°Nuestras Fuerzas Armadas no ser¨¢n nunca m¨¢s cancerbero del imperialismo y de la burgues¨ªa¡±, proclam¨® Maduro frente a un auditorio predominantemente militar. Evoc¨® los casos de los oficiales que participaron en la asonada de abril de 2002 contra Hugo Ch¨¢vez, y en la represi¨®n contra los motines populares de febrero de 1989, quienes habr¨ªan sido ¡°desechados por la burgues¨ªa despu¨¦s de usarlos¡±. Hizo un llamado a reforzar la unidad c¨ªvico.militar, columna vertebral del chavismo en el poder desde 1999, y jur¨® que ¡°no permitiremos que nadie desestabilice a Venezuela¡±.