El Papa somete al banco vaticano a una ley de control y transparencia
La legislaci¨®n tiene como objetivo prevenir actividades monetarias ilegales y evitar el lavado de dinero y la financiaci¨®n del terrorismo
A finales del pasado mes de junio, la polic¨ªa italiana detuvo a un alto prelado del Vaticano, monse?or Nunzio Scarano, por intentar transportar desde Suiza a Italia 20 millones de euros en un jet privado. Aquella operaci¨®n de pel¨ªcula ¡ªadem¨¢s del llamado monse?or 500 participaron un exagente de los servicios secretos y un intermediario financiero buscado en Espa?a por fraude¡ª dej¨® tras de s¨ª dos certezas.
La primera ¡ªen virtud de las escuchas practicadas por la fiscal¨ªa de Roma¡ª es que el banco del Vaticano, cuyo nombre oficial es Instituto para las Obras de Religi¨®n (IOR), operaba ¡°bajo un sistema organizado para escapar a los controles de las autoridades¡±. La segunda es que el papa Francisco estaba firmemente dispuesto a limpiar de una vez por todas el banco del Vaticano y, si era necesario, incluso cerrarlo.
A partir de ahora, una autoridad podr¨¢ escudri?ar todas las cuentas
Aquella determinaci¨®n de Jorge Mario Bergoglio, que no hizo nada por sacar de prisi¨®n a monse?or Scarano ¡ª¡°no lo han detenido por ser la beata Imelda¡±, lleg¨® a declarar en el vuelo de regreso de R¨ªo de Janeiro¡ª, se vio enseguida respaldada por la publicaci¨®n, el pasado 8 de agosto, de un motu proprio o documento pontificio en el que dejaba claro: ¡°Deseo renovar el compromiso de la Santa Sede en adoptar los principios y ejecutar los instrumentos jur¨ªdicos desarrollados por la comunidad internacional, adecuar a¨²n m¨¢s el orden institucional para la prevenci¨®n y la lucha contra el blanqueo, la financiaci¨®n del terrorismo y la proliferaci¨®n de armas de destrucci¨®n masiva¡±. Se trataba de una declaraci¨®n de intenciones por escrito que tendr¨ªa que llenarse de contenido con la publicaci¨®n de una ley. Es lo que la Comisi¨®n Pontificia para el Estado de la Ciudad del Vaticano acaba de hacer ahora con la aprobaci¨®n, el martes, de una legislaci¨®n muy precisa para garantizar la transparencia del IOR mediante mecanismos f¨¦rreos de vigilancia e informaci¨®n.
¡°Con esta ley¡±, declar¨® el padre Federico Lombardi, portavoz del Vaticano, ¡°se cubren al 99% los est¨¢ndares europeos; ya solo quedan peque?os detalles¡±. De lo que se trata, sobre todo, es de otorgar poderes reales a la Autoridad de Informaci¨®n Financiera (AIF) para que escudri?e no solo las operaciones del IOR, sino tambi¨¦n la de todos los organismos del Vaticano que tengan contacto con el dinero. No hay que olvidar que el a?o pasado un informe del comit¨¦ europeo contra el lavado de dinero advirti¨® que, pese a las instrucciones dadas por Benedicto XVI en pos de la transparencia, a¨²n hab¨ªa mucho que hacer. Seg¨²n el arzobispo Dominique Mamberti, el llamado ministro de asuntos exteriores del Vaticano, ¡°la ley ¡ªque entra en vigor hoy¡ª pone al Estado Ciudad del Vaticano m¨¢s cerca de las recomendaciones y est¨¢ndares internacionales¡±. Con la nueva legislaci¨®n, el AIF puede investigar incluso la honestidad de los directivos del IOR e inspeccionar, en cualquier momento, documentos o cuentas que le parezcan sospechosas.
La pasada semana, por primera vez en su historia, el IOR hizo p¨²blico un balance anual, el de 2012, que arroj¨® un beneficio neto de 86,6 millones de euros, de los que 54,7 ir¨¢n a las arcas de la Iglesia. Seg¨²n sus propios datos, el banco del Vaticano gestiona 13.700 cuentas que, en teor¨ªa, deben ser de miembros del clero, empleados o exempleados del Vaticano. Lo curioso es que en 2012 estos supuestos clientes depositaron 6.300 millones de euros, entre los que destacan los 3.200 millones en contratos de gesti¨®n patrimonial.
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