Ucrania sopesa acercarse a Rusia en detrimento de la Uni¨®n Europea

En una bien vigilada cl¨ªnica de J¨¢rkov, la ex primera ministra de Ucrania, Yulia Timoshenko, espera a que se decida su destino, que es clave para que su pa¨ªs pueda firmar el Tratado de Asociaci¨®n con la Uni¨®n Europea el 28 de este mes en la cumbre de Vilna. Los pron¨®sticos no son buenos para la mujer que en 2004 simboliz¨® las esperanzas de la Revoluci¨®n Naranja y que en 2011 fue condenada a siete a?os de c¨¢rcel por firmar unos desventajosos contratos de importaci¨®n de gas con Rusia. Del presidente de Ucrania depende que su irreconciliable rival pueda ser tratada en el extranjero, pero V¨ªctor Yanuk¨®vich apura el plazo disponible, mientras calcula si le vale la pena congelar por un tiempo el acercamiento a la UE a cambio de que Rusia le preste un apoyo econ¨®mico que le ser¨ªa muy ¨²til para ser reelegido en 2015.

Los pron¨®sticos tampoco son buenos para el carcelero de Timoshenko, que podr¨ªa convertirse en vasallo de Rusia. Vlad¨ªmir Putin no conf¨ªa en promesas y, para ayudar a su colega eslavo, exige una irreversible integraci¨®n de Ucrania en la Uni¨®n Aduanera (formada por Rusia, Bielorrusia y Kazajist¨¢n) antes de los comicios presidenciales ucranianos. Esta semana es decisiva en la Suprema Rada (Parlamento ucraniano) para aprobar o no la ley que permitir¨ªa el tratamiento de reclusos en el extranjero, as¨ª como las leyes de reforma de la fiscal¨ªa y del sistema electoral, exigidas tambi¨¦n por la UE.

?C¨®mo vive Yulia Timoshenko? En una reciente conversaci¨®n con EL PA?S en Kiev, Yevguenia, de 33 a?os, la ¨²nica hija de Timoshenko, dice temer por la vida de su madre. Yulia Timoshenko ¡°no puede caminar sin ayuda y tiene una capacidad de movimiento muy limitada, porque desde hace un a?o combate el dolor con dosis cada vez m¨¢s elevadas de analg¨¦sicos¡±, dice. La ex primera ministra sufre una dolencia de espalda por la que es tratada en un aposento especialmente habilitado para ella en una cl¨ªnica de Jarkov. La terapia que le administran all¨ª ¡°no es suficiente¡±, ya que ¡°es necesaria una operaci¨®n, como recomendaron los profesores alemanes que la visitaron tras la crisis sufrida el pasado verano¡±, se?ala Yevguenia.

¡°Mi madre est¨¢ agradecida a los m¨¦dicos ucranianos que la tratan, pero esos m¨¦dicos, al igual que los jueces, los fiscales y los funcionarios de prisiones que la rodean est¨¢n sometidos a enormes presiones. Hacen lo que les mandan y no podemos confiar en ellos¡±, afirma. El pasado s¨¢bado Yulia Timoshenko difundi¨® un comunicado acusando a las autoridades penitenciarias de mentir, al alegar que sufr¨ªa una gripe para impedir que la visitaran sus colegas de partido. Las autoridades penitenciarias ¡°est¨¢n dispuestas a cumplir cualquier orden, si hay que pegar, pegan; si hay que matar, matan, y desvergonzadamente ejercer¨¢n la violencia contra todos los que consideren peligrosos para s¨ª y su poder¡±, se?alaba el comunicado.

El Parlamento de Kiev debate esta semana la ley que permitir¨¢ a los presos tratarse en el extranjero

Yevguenia afirma que sobre su madre se ha ejercido una ¡°fuerte presi¨®n psicol¨®gica¡± mediante c¨¢maras de v¨ªdeo que registraban todos sus movimientos e incluso las conversaciones con su abogado. Las c¨¢maras fueron eliminadas en febrero de 2012 por orden de Yanuk¨®vich, se?ala. ¡°Lo m¨¢s doloroso¡±, contin¨²a, ¡°fue cuando le pegaron el 20 de abril de 2012 al transportarla a la cl¨ªnica y nadie fue castigado por ello¡±. Yevguenia dice visitar a su madre ¡°una o dos veces por semana¡± y tener derecho a visitarla de forma ilimitada en tanto que ¡°defensor p¨²blico¡±, una categor¨ªa prevista en la legislaci¨®n ucraniana. La ex primera ministra no dispone de m¨®vil ni de Internet, pero s¨ª de un televisor. Las ventanas de su habitaci¨®n est¨¢n enrejadas y se abren parcialmente de forma vertical. De vez en cuando, los medios de informaci¨®n ucranianos anuncian nuevos procesos, por supuestas cuentas en el extranjero e incluso por supuesta implicaci¨®n en asesinato. Estos anuncios, que no llegan a confirmarse, son ¡°una burla psicol¨®gica destinada a desacreditar a Timoshenko ante los l¨ªderes occidentales¡±, dice Yevguenia. ¡°Las autoridades han contratado a diferentes auditor¨ªas extranjeras y no pudieron encontrar nada contra mi madre¡±, sentencia.

La familia de Timoshenko est¨¢ hoy dispersa. Su marido, Alexander, est¨¢ en Praga tras obtener asilo pol¨ªtico en la Rep¨²blica Checa en 2012. Yevguenia dice haber dejado ¡°los negocios inmobiliarios¡± en Kiev para hacer campa?a a favor de su madre. ¡°Ten¨ªa varias compa?¨ªas inmobiliarias y luego tuve varios restaurantes. En los ¨²ltimos dos a?os, ya no puedo dedicarme a los negocios, aunque alquilo locales¡±. ¡°Ten¨ªa un restaurante en Dnepropetrovsk que me quitaron hace unas semanas por decisi¨®n de los jueces¡±, afirma, refiri¨¦ndose a un negocio familiar en aquella ciudad, donde a¨²n vive su abuela materna. En el restaurante expropiado se preparaba la comida para Yulia Timoshenko, que no prueba los alimentos de la prisi¨®n, seg¨²n su hija. ¡°Le llevamos los alimentos y el agua. Ella teme y nosotros tambi¨¦n tememos por su vida. Le entregamos un paquete cada semana, pero el peligro no solo viene por la comida y el agua, puede venir de otras partes¡±, sentencia. ¡°Mi madre es la rival n¨²mero uno de Yanuk¨®vich, pero cualquiera que sean los sentimientos de este, no deber¨ªan hacer fracasar la oportunidad hist¨®rica para Ucrania, que merece una vida mejor¡±.