El chavismo arenga a sus seguidores
Los trabajadores de la petrolera estatal encabezan una manifestaci¨®n en apoyo del presidente para contrarrestar el peso que han ganado sus detractores
Los trabajadores petroleros identificados con el Gobierno caminaron algo m¨¢s de 2,5 kil¨®metros entre la plaza Venezuela y el palacio presidencial de Miraflores. Es un acto simb¨®lico que parte de una excusa ¡ªla presentaci¨®n del reciente convenio colectivo de la industria al presidente Nicol¨¢s Maduro¡ª para intentar una demostraci¨®n de fuerza como la que viene dando la oposici¨®n desde el mi¨¦rcoles pasado en Caracas.
Pasadas las dos y media de la tarde (las ocho en la Espa?a peninsular) Maduro no hab¨ªa intervenido. Como suele suceder cada vez que el chavismo toma la calle varios teloneros antecedieron a la atracci¨®n principal. Habl¨® el ministro de Energ¨ªa y Petr¨®leo y presidente de la estatal petrolera PDVSA, Rafael Ram¨ªrez; hablaron tambi¨¦n la ministra de la Defensa Carmen Mel¨¦ndez y el presidente del sindicato de trabajadores de la industria Willis Rangel para calentar a la audiencia.
A diferencia de lo que ocurr¨ªa con la manifestaci¨®n que acompa?¨® la entrega del opositor Leopoldo L¨®pez, la movilizaci¨®n chavista cont¨® con una transmisi¨®n ininterrumpida del canal del Estado, Venezolana de Televisi¨®n. Simpatizantes, diputados, ministros, el jefe del sindicato del sector desfilaron por la pantalla lanzando loas al proceso y reafirmando su compromiso con el Gobierno dirigido por Maduro.
Mientras los trabajadores caminaban hacia su destino final la ministra de la Defensa envi¨® un mensaje que no parec¨ªa estar dirigido a la audiencia chavista, sino a sus contrarios. ¡°La Fuerza Armada Nacional Bolivariana, representada por el Comando Estrat¨¦gico Operacional, los comandantes de los Componentes Militares, de la Milicia Bolivariana y yo, en mi car¨¢cter de ministra para el poder popular para la Defensa manifestamos al pa¨ªs, a la patria de Bol¨ªvar y Ch¨¢vez nuestro total apego a la constituci¨®n y leyes de la Rep¨²blica Bolivariana de Venezuela, que de ninguna manera contempla la toma del poder pol¨ªtico que no sea la expresi¨®n del soberano por la senda electoral¡±, asegur¨® Mel¨¦ndez.
Ese apoyo a Maduro ha envalentonado al chavismo. Los alrededores de la plaza Venezuela, sitio inicial de la concentraci¨®n, estaban repletos de personas con indumentarias rojas. Muchas vinieron en autobuses desde la provincia contratados por el Estado para la ocasi¨®n; otros salieron desde los ministerios vecinos a la zona con su camiseta roja de mangas cortas y su gorra del mismo tono. Cuando la vanguardia se aproximaba a Miraflores a¨²n quedaba un peque?o grupo bailando frente a una tarima instalada para la ocasi¨®n. Otro grupo jugaba un partido de baloncesto. Los jugadores encestaban en aros movibles.
Maduro apareci¨® a las tres de la tarde hora local (las 18.30 de la Pen¨ªnsula espa?ola) para darle la bienvenida a los manifestantes ¡°a la casa eterna de Hugo Ch¨¢vez¡±. ¡°Los hemos convocado al combate por la paz, la independencia y el derecho que tiene el pueblo a vivir¡±, salud¨® el mandatario. El presidente, euf¨®rico, estaba escoltado por el ministro Ram¨ªrez y por varios militares uniformados con sus trajes de campa?a. Luego dijo que estaba conduciendo la operaci¨®n contra el fascismo. ¡°Puedo decir a esta hora que hemos garantizado la paz y hemos contenido, por ahora, el ataque¡±.
El p¨²blico lo aplaud¨ªa. A pesar de ese parte exitoso, la ministra de Comunicaci¨®n e Informaci¨®n, Delcy Rodr¨ªguez, anunci¨® en su cuenta de Twitter la muerte de una persona en la sede de una cooperativa textil en la urbanizaci¨®n Los Cortijos, en el este de Caracas. La funcionaria atribuy¨® el asesinato a la acci¨®n ¡°de grupos violentos sobre motos de alta cilindrada¡±.
Es un eufemismo utilizado por el relato oficial para caracterizar a miembros violentos de la oposici¨®n. Hubo, seg¨²n su testimonio, varios heridos, entre ellos uno de gravedad. Sin esperar los resultados de las investigaciones Rodr¨ªguez ofreci¨® su propia conclusi¨®n: ¡°Estos grupos violentos ejecutan un gui¨®n golpista dise?ado en Estados Unidos¡±.
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