Un candidato del Frente Nacional sugiere ¡°concentrar en campos¡± a los gitanos

A tres semanas de las elecciones municipales en Francia, la extrema derecha atiza la ret¨®rica racista y recupera ideas aplicadas en los a?os veinte y treinta del siglo XX. Paul-Marie Co?teaux, cabeza de lista del Frente Nacional / Unidad Blue Marine, el partido de Marine Le Pen, en el VI distrito de Par¨ªs, ha propuesto a trav¨¦s de su blog ¡°concentrar¡± a los gitanos ¡°en campos¡± para recuperar ¡°la dignidad nacional¡± y poner coto a una ¡°invasi¨®n¡± que atenta contra el ¡°orden est¨¦tico¡± de su barrio.

El presidente de Soberan¨ªa, Independencia y Libertades (SIEL, un minipartido aliado del Frente Nacional) ha escrito varios art¨ªculos denunciando la presencia de gitanos en las calles de su distrito, atravesado de este a oeste por el c¨¦lebre bulevar Saint Germain.

En su ¡®post¡¯ del 19 de febrero, ilustrado con fotos de algunas personas durmiendo en la calle, Co?teaux afirm¨®: ¡°Me dedico a fotografiarlos cuando me cruzo con un gran n¨²mero de ellos, aunque solo sea para calmar la rabia que me produce el espect¨¢culo desolador de esas mujeres, esos ni?os, y a veces esas familias enteras en un estado de abandono indescriptible, (que) rompen el encanto de cualquier paseo¡±.

El socio de Marine Le Pen califica la presencia de los roman¨ªes de ¡°lepra¡± e ¡°invasi¨®n¡± que ¡°atenta contra el orden est¨¦tico¡± de su barrio, y que ¡°atestigua la irresponsabilidad general y un absoluto abandono de la dignidad nacional¡±. Seg¨²n Co?teaux, ¡°la suciedad¡± de las familias gitanas ¡°producir¨¢ sin duda epidemias¡±.

El texto del escritor, ensayista y exeurodiputado, nacido en Par¨ªs hace 58 a?os, contin¨²a afirmando que el alcalde del distrito se desentiende del problema y lo reenv¨ªa al prefecto de Polic¨ªa, y que este no recibe instrucciones del ministro del Interior. Y se pregunta: ¡°?Pero qu¨¦ podr¨ªa hacer el ministro del Interior, aparte de concentrar a estas poblaciones extranjeras en campos, donde su vida ser¨ªa sin duda menos agradable de la que disfrutan con los viajes que prefieren hacer para huir de pa¨ªses poco hospitalarios?¡±.

Si el ¡°valiente ministro¡± hiciera eso, agrega Co?teaux, ¡°chocar¨ªa sin duda con los ukases bruselenses, de la Corte Europea de los Derechos Humanos, de todo el aparato europeo, sin contar con el catolicismo y con el Papa en persona, de forma que no se le ocurren esos extremismos¡±.

Para intentar defenderse de las cr¨ªticas recibidas, Paul-Marie Co?teaux ha explicado a la Agencia France Presse que no era su intenci¨®n sugerir que se construyan campos de concentraci¨®n. ¡°No hay ning¨²n sitio en ese texto donde yo pida la construcci¨®n de campos y alambradas. Es una forma interrogativa; ?qu¨¦ puede hacer el ministro? Lo que pido es que vayamos a la fuente de los problemas. Y el problema es Schengen¡±.

¡°Si no, solo nos queda la impotencia general o las soluciones que nadie quiere, y yo tampoco, en raz¨®n de mi profundo catolicismo¡±, ha a?adido. ¡°Yo soy cat¨®lico y romano, y no meto a la gente en campos, eso no se hace desde hace mucho tiempo¡±.

Para el candidato de la ultraderecha, ¡°la ¨²nica soluci¨®n legal ser¨ªa celebrar una reuni¨®n europea que decida la suspensi¨®n general de la aplicaci¨®n de los acuerdos de libre circulaci¨®n de personas¡±.

La asociaci¨®n SOS Racismo ha rechazado ¡°las palabras inmundas de Paul-MarieCo?teaux¡±, y ha anunciado que en los pr¨®ximos d¨ªas presentar¨¢ una denuncia ante los tribunales ¡°en vista de la gravedad y la abyecci¨®n de su prosa antirrepublicana¡±.

En Francia malviven unos 17.000 gitanos del este de Europa, la mitad de ellos menores de edad, seg¨²n afirman los datos de las asociaciones que los acogen. El ministro del Interior, Manuel Valls, afirm¨® hace unos meses que los roman¨ªes ¡°no tienen intenci¨®n de integrarse porque son culturalmente distintos¡± a los franceses.

Valls entr¨® as¨ª en el lenguaje habitual de la derecha y la extrema derecha con la excusa de que es necesario frenar el ascenso del Frente Nacional. Los sondeos para las elecciones europeas de mayo de este a?o estiman que el FN podr¨ªa ser el partido m¨¢s votado.

En 2013, el Gobierno socialista expuls¨® de sus chabolas y campamentos a m¨¢s de 20.000 roman¨ªes (muchos fueron evacuados m¨¢s de una vez), oblig¨¢ndoles a levantar nuevas barracas en otros lugares o a dormir al raso en las calles de las ciudades.

Al ser preguntado por esa pol¨ªtica, que seg¨²n las ONGs copia la de Nicolas Sarkozy, agudiza la precariedad, convierte a los gitanos en el chivo expiatorio y no utiliza los fondos europeos habilitados para integrarlos, el presidente, Fran?ois Hollande, respald¨® a Valls en enero pasado, al afirmar: ¡°No nos averg¨¹enza¡±.