La historia de Papa Mayito: periodista y secuestrado

Mario Segura es un hombre bajito, moreno y muy sonriente. Tiene 52 a?os. Cae simp¨¢tico desde el minuto uno. Es periodista y tambi¨¦n act¨²a con su familia como payaso. En el escenario se hace llamar Papa Mayito. Dirig¨ªa la revista El Sol del Sur y un blog de denuncias, Alerta Oportuna, en Tampico (noreste de M¨¦xico). Por eso lo secuestraron. Lo soltaron ocho d¨ªas despu¨¦s. Es el primer periodista inscrito en el gubernamental Mecanismo de Protecci¨®n a personas Defensoras de los Derechos Humanos y Periodistas. Denuncia que no le ha servido de nada. Cuando se le pregunta si desea que su foto aparezca en este diario, responde seguro: ¡°Claro. Yo nunca he sido un periodista que se esconde. No soy de los que tiran y esconde la mano. Adem¨¢s yo soy una persona. Tengo rostro. Yo existo¡±. Mario Segura existe y es un superviviente de la guerra de Tamaulipas.

La Ley para la Protecci¨®n de Defensoras de los Derechos Humanos y periodistas fue aprobada con solemnidad en el Congreso mexicano en junio de 2012 y fue aplaudida por la Oficina de la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos. Pero el Mecanismo para la Protecci¨®n a personas Defensoras de los Derechos Humanos y los Periodistas, inscrito en esa legislaci¨®n, tiene todas sus letras pero no es en absoluto eficaz, denuncia Segura. ¡°Son tres los aspectos en que me deber¨ªan proteger. Psicol¨®gico, legal y seguridad¡±. Afirma que en los tres le han incumplido.

El Mecanismo, al que se ha destinado un presupuesto de 300 millones de pesos desde 2012 (casi 23 millones de d¨®lares), no ha atendido el 57,8% de los casos. De las 152 solicitudes que se han recibido, hay 88 expedientes que ni siquiera han sido revisados, seg¨²n denuncian ONGs. La respuesta gubernamental a los amenazados debe producirse en al menos 10 d¨ªas. Hay casos que llevan sin atenderse m¨¢s de a?o y medio. Hablamos de personas que buscan ayuda porque han recibido amenazas de muerte o han sido secuestradas.

88 de los 152 casos recibidos por el Mecanismo no han sido siquiera revisados, denuncian ONGs

El propio secretario de Gobernaci¨®n (ministro de Interior), Miguel ?ngel Osorio Chong, ha reconocido que la iniciativa es ¡°un fracaso¡± y se comprometi¨® a reestructurarla, aunque no detall¨® la fecha para lograrlo. M¨¦xico es uno de los pa¨ªses m¨¢s peligrosos para ejercer periodismo, seg¨²n Reporteros Sin Fronteras. Desde 2010, 31 periodistas han sido asesinados.

Mario Segura, el primer periodista inscrito en el Mecanismo, explica que dej¨® la ayuda psicol¨®gica que le propon¨ªa el Gobierno porque las citas eran desordenadas y adem¨¢s le obligaban a moverse por varios puntos de la enorme Ciudad de M¨¦xico. La asesor¨ªa legal la define como ¡°pl¨¢ticas¡±. Dice que son charlas en las que un abogado le explica lo que puede hacer, pero sin que el Estado pague para que le represente. Y finalmente, en seguridad, comenta que le dieron acceso a un n¨²mero telef¨®nico que, en teor¨ªa, es un ¡°bot¨®n de p¨¢nico¡± pero Segura no conf¨ªa en que funcione. No ha recibido tampoco ning¨²n tipo de protecci¨®n especial, pese a que, adem¨¢s del secuestro, existen amenazas expl¨ªcitas en su contra. Tambi¨¦n le ofrecieron una suerte de protecci¨®n m¨¦dica, pero cuando fue a revisar sus niveles de az¨²car (es diab¨¦tico) encontr¨® que el centro que le hab¨ªan asignado no ten¨ªa el equipo para medir la glucosa.

El v¨ªa crucis de Segura comenz¨® hace dos a?os. Era agosto de 2012. El periodista hab¨ªa actuado con su mujer e hijos en un cumplea?os infantil. Su compa?¨ªa se hace llamar ¡°Familia Payasos Show¡±. Iba para all¨¢, recuerda, cuando un compa?ero le llam¨® para decirle que hab¨ªa que borrar un art¨ªculo publicado en su web porque ¡°hab¨ªa molestado¡± a un grupo criminal. Al otro d¨ªa lo secuestraron. Le apuntaron con una pistola, lo golpearon. Lo mantuvieron encerrado ocho d¨ªas en un cuarto que ol¨ªa a ¡°suciedad y marihuana¡±. Le pegaron con una tabla. Le dec¨ªan que lo iban a matar y que a su mujer y a sus hijos ¡°los iban a hacer cachitos¡±.

El secuestro fue el punto culmen, pero explica que las amenazas comenzaron en 2010. Alerta Oportuna era un sitio con miles de visitas al d¨ªa, utilizado por los usuarios como una web de mensajes de precauci¨®n y denuncias. Segura est¨¢ convencido de que lo secuestraron por las acusaciones de corrupci¨®n pol¨ªtica y de v¨ªnculos entre Gobierno y narco que, afirma, son comunes en Tamaulipas. El exgobernador Tom¨¢s Yarrington es acusado en EE UU de aceptar sobornos de los dos carteles que pelean Tamaulipas y de lavado de dinero. Yarrington, que militaba en el oficialista Partido Revolucionario Institucional (PRI) antes de ser suspendido en 2012, afirma que las acusaciones son parte de una ¡°persecuci¨®n pol¨ªtica¡± en su contra. La justicia estadounidense e Interpol lo califican de ¡°pr¨®fugo¡±.

Los secuestradores dec¨ªan a Segura que "iban a hacer cachitos" a su mujer y a sus hijos

El periodista se lamenta de ¡°el dolor que ha causado¡± a su familia y explica que por mucho tiempo se sinti¨® culpable. Pero ¨¦l mismo reconoce que la espiral de violencia que atraviesa Tamaulipas, territorio que ha padecido disputas entre el cartel del Golfo y Los Zetas y pugnas internas de esos grupos, es ¡°imposible de ignorar¡±. Asegura que ha expiado la culpa al entender que ¡°ser periodista no es ning¨²n motivo¡±, y que los responsables del dolor de sus seres queridos son quienes ordenaron su secuestro, crimen que, adem¨¢s, permanece impune como el 98% de los delitos que se cometen en M¨¦xico, seg¨²n? la Comisi¨®n Nacional de Derechos Humanos.

Segura sali¨® de Tamaulipas ayudado por la organizaci¨®n Art¨ªculo 19. Le pagaron el vuelo y el hotel por tres meses. Se lamenta de la ¡°falta de solidaridad¡± entre los periodistas en M¨¦xico. ¡°A las autoridades les sale mejor comprar medios y los utilizan para descalificar nuestras denuncias¡±, describe. ¡°Lo de Goyo fue algo excepcional. Ojal¨¢ se hiciera m¨¢s veces. Somos tantos¡­¡±. Se refiere a Gregorio Jim¨¦nez, un humilde periodista secuestrado y asesinado en Coatzacoalcos (Veracruz) en febrero pasado. Su crimen levant¨® una ola de indignaci¨®n in¨¦dita en el gremio. Un grupo de periodistas independientes present¨® hace unas semanas un informe que denuncia los m¨²ltiples fallos en la investigaci¨®n.

?Se arrepiente? De nuevo, responde seguro: ¡°No¡±. Explica que se hab¨ªa cansado ya de callar y que lo que ocurre en su tierra es demasiado grave como para no denunciarlo. ¡°Extra?o mucho a mi Tampico. Mis pap¨¢s, mis viejitos, mis amigos. Pero no puedo callar. No podemos callar¡±. Desde que sali¨® de Tamaulipas, Mario Segura no ha vuelto a hallar trabajo como periodista.