¡°Las protestas van a seguir. El venezolano est¨¢ harto¡±

El 18 de febrero pasado, Leopoldo L¨®pez, l¨ªder del partido Voluntad Popular, se present¨® en medio de una manifestaci¨®n contra el Gobierno en Caracas sabiendo que lo iban a detener. La justicia lo buscaba por promover supuestamente la violencia en las protestas antigubernamentales que entonces comenzaban a hacerse sistem¨¢ticas en Caracas. Minutos antes de la detenci¨®n, dio un discurso en el que dijo que se entregaba a una justicia ¡°injusta¡± y ¡°corrupta¡±. Junto a ¨¦l estaba su esposa, Lilian Tintori, de la que se despidi¨® con un beso que dej¨® una de las fotos ic¨®nicas de las protestas contra el Gobierno de Nicol¨¢s Maduro en Venezuela. ¡°Cuando Leopoldo se iba a entregar le dije, no te entregues, no hay justicia. Te van a dejar preso por mucho tiempo y no hay justicia que te defienda¡±, recordaba este lunes Tintori en Madrid. ¡°Leopoldo me dijo: ¡®Precisamente por eso me entrego, porque esto tiene que cambiar en mi pa¨ªs¡¯. Fue un momento muy dif¨ªcil, emocionalmente muy fuerte. En ese momento yo me desped¨ª, le dije que contaba conmigo. Me pidi¨® que cuidara a mis hijos y que les siguiera educando. Que les explicara bien por qu¨¦ daba este paso. Y me pidi¨® resistencia¡±.

Tres meses despu¨¦s de aquella foto, L¨®pez sigue preso y a¨²n no ha comparecido ante un juez. La vista de su caso fue aplazada por razones confusas. ¡°Est¨¢ aislado y secuestrado. Se le est¨¢n violando los derechos al debido proceso judicial. Pero como preso, tambi¨¦n se le est¨¢n violando sus derechos. No puede recibir visitas abiertas, no puede recibir cartas privadas y no puede hablar con ning¨²n otro preso. Solo ha podido ver a sus padres, a sus hijos y a mi. En tres meses. Lo tienen aislado en un ala de castigo. Es tan injusto como que tengan presos a estudiantes inocentes o a dos alcaldes. Esto tiene que parar¡±. No tiene ninguna pista de cu¨¢ndo podr¨¢ L¨®pez hablar ante un juez. ¡°En Venezuela no existe un Estado de derecho como tal ahora mismo¡±.

Leopoldo me pidi¨® que cuidara a mis hijos y que les siguiera educando. Que les explicara bien por qu¨¦ daba este paso. Y me pidi¨® resistencia

En este tiempo, Tintori (Caracas, 36 a?os) ha pasado de ser personaje de la cr¨®nica social y esposa del l¨ªder opositor a convertirse en una voz protagonista de las marchas contra el Gobierno. ¡°Hoy en Venezuela hay una dictadura y luchamos por rescatar la democracia¡±, afirma, en l¨ªnea con los l¨ªderes opositores que piensan que el pa¨ªs no tiene tiempo de esperar a las pr¨®ximas elecciones, o a un refer¨¦ndum revocatorio. Dice que el Gobierno de Nicol¨¢s Maduro est¨¢ empleando contra la oposici¨®n los recursos que no emplea para combatir la violencia. ¡°Usan la fuerza contra los j¨®venes, contra las mam¨¢s que est¨¢n en la calle protestando. Es muy triste. Nos han cerrado todas las puertas. Solo nos dejan marchar por determinados municipios de la capital. Con todo y eso, hace cinco d¨ªas hubo una marcha de los estudiantes y las fuerzas de seguridad hicieron una emboscada, rodearon la marcha y agarraron a 129 estudiantes presos. Se los llevaron sin ninguna orden de captura, orden judicial, sin ning¨²n expediente abierto. Los montaron en camiones militares y se los llevaron. Hoy hay 129 familias mas destruidas y aterrorizadas por el Gobierno¡±.

Tintori visita Espa?a y Francia en busca de apoyo internacional para la oposici¨®n ante el control que, dice, ejerce el Gobierno sobre los medios de comunicaci¨®n en Venezuela. ¡°Venimos a pedir ayuda a los pa¨ªses donde se respeta la democracia para pedirles que no nos dejen solos. Nosotros vamos a resistir, pero necesitamos apoyo de todos los pa¨ªses. Que se manifiesten, que alcen su voz para que en Venezuela se respeten los derechos humanos¡±.

L¨®pez tom¨® la decisi¨®n de entregarse a la justicia despu¨¦s de pasar una semana escondido ante el anuncio del Gobierno de que lo hac¨ªa responsable directo de la violencia en las calles. ¡°Lo decidi¨® Leopoldo de una manera muy l¨®gica. ?l quer¨ªa hacer esa entrega representando la cara del venezolano. Y as¨ª lo dijo cuando se entreg¨®: ¡®Si mi encarcelamiento hace que el pueblo despierte y reaccione, bien valdr¨¢ la pena¡¯. Y dio un paso, un sacrificio muy grande de dejar de estar con su familia por un pa¨ªs que necesita de pasos valientes¡±.

Creemos en la constituci¨®n y el di¨¢logo cuando existan las condiciones

Tambi¨¦n rechaza cualquier responsabilidad de L¨®pez en los hechos violentos que provocaron su detenci¨®n. ¡°Leopoldo es un l¨ªder de paz, un l¨ªder progresista. Siempre ha llamado a la protesta pacifica, organizada y disciplinada. Siempre hemos rechazado todo hecho violento. Han querido montar una trampa alrededor de Leopoldo, ha querido decir que es un fascista, golpista, terrorista. No es eso. Es un l¨ªder progresista que sue?a con la mejor Venezuela. Yo jam¨¢s me hubiese casado con un terrorista¡±.

La deriva violenta de las protestas, que comenzaron en noviembre, ha hecho ver una divisi¨®n entre la oposici¨®n venezolana. Por un lado, los l¨ªderes de la Mesa de Unidad que se present¨® a las elecciones, han aceptado moment¨¢neamente sentarse a hablar con el Gobierno, unos di¨¢logos que est¨¢n en suspenso ante la falta de ejecuci¨®n de los acuerdos. Por otro, l¨ªderes como L¨®pez o la diputada Mar¨ªa Corina Machado han apostado claramente por la presi¨®n en la calle para que el Gobierno cese de alguna de las maneras previstas en la Constituci¨®n. Tintori rechaza, sin embargo, tal divisi¨®n. ¡°Creemos en la Constituci¨®n y el di¨¢logo cuando existan las condiciones¡±. Unas condiciones que se resumen en que ¡°se respeten los derechos humanos¡±.

A pesar de los di¨¢logos, la oposici¨®n venezolana no parece dispuesta a bajar el pist¨®n de las protestas. ¡°Las protestas van a seguir. El venezolano est¨¢ harto. El venezolano lo ¨²nico que quiere es conseguir aceite para cocinar, papel toilette, pa?ales para los beb¨¦s, poder caminar o ir a un parque con sus hijos de una forma tranquila y segura, que hoy no tenemos. Eso es lo que quiere el venezolano. Lo que exige es que mejore el pa¨ªs en seguridad, escasez e inflaci¨®n¡±.