El zoco geoecon¨®mico
La UE se apresura a buscar alternativas al gas ruso cuando Rusia y China ya cierran tratos
Con Ir¨¢n ha funcionado el r¨¦gimen de sanciones. Sin ellas y sin sus efectos sobre la poblaci¨®n, no se entiende la buena disposici¨®n a negociar de Hasan Rohan¨ª. No es seguro que funcionen con Rusia, a pesar de que la anexi¨®n de Crimea requerir¨ªa una respuesta igual o mayor que la empleada con Ir¨¢n por su programa nuclear. La capacidad persuasiva de las sanciones es m¨ªnima a corto plazo e incluso contraproducente. Sobre todo por su car¨¢cter limitado e incluso inofensivo. Nadie quiere expulsar de verdad a los magnates rusos de la econom¨ªa global. Rusia tiene palancas, diplom¨¢ticas y econ¨®micas, para limitar su alcance y combatir sus efectos, y van desde las negociaciones de m¨¢s alto nivel sobre Siria, Ir¨¢n u Oriente Pr¨®ximo hasta los acuerdos de adopci¨®n de ni?os rusos en Espa?a.
Tampoco est¨¢ claro que funcionen en el largo, estrechando poco a poco el dogal como se ha hecho con Ir¨¢n. Para Rusia son un est¨ªmulo al viraje hacia una nueva geometr¨ªa en las relaciones comerciales, con un aflojamiento de los lazos con la Uni¨®n Europea y el mundo atl¨¢ntico y una apertura a otras alternativas, fundamentalmente hacia Asia. Un primer paso nos llega de la reuni¨®n en Shangh¨¢i entre Putin y Xi Jinping, hermanados por la tensi¨®n reciente con Washington, por Ucrania el primero y por la orden judicial contra los militares esp¨ªas chinos el segundo. El encuentro es una exhibici¨®n de la mec¨¢nica multipolar tan anunciada: la UE se apresura atolondrada a buscar alternativas al gas ruso mientras la Federaci¨®n Rusia cierra acuerdos gas¨ªsticos con China, preparados con buen ojo estrat¨¦gico desde hace diez a?os.
En ning¨²n caso es una nueva guerra fr¨ªa, ni siquiera geoecon¨®mica, que nadie se puede permitir. En las relaciones con Washington habr¨¢ una nueva geometr¨ªa m¨¢s tensa y adversativa, acorde con la redistribuci¨®n de poder mundial; pero no ser¨¢ bipolar. China quiere gas ruso, pero a buen precio; tambi¨¦n defenderse ante las acusaciones por el espionaje digital y su expansionismo mar¨ªtimo; pero no tiene inter¨¦s en formar con Rusia un bloque antioccidental. En su posici¨®n se asemeja a otros emergentes, como la vecina India de Narendra Modi, que pronto la atrapar¨¢ en poblaci¨®n, quiere atraparla en crecimiento econ¨®mico y le va a la zaga en poder militar. El cambio en India es tan expresivo de los nuevos aires multipolares, hechos de pugna y tambi¨¦n de cooperaci¨®n, como la crisis ucrania o la tensi¨®n creciente en el Mar de China Oriental. Habr¨¢ que seguir con atenci¨®n los primeros pasos del nuevo premier indio en la escena internacional.
Las sanciones pertenecen a un mundo unipolar en declive. Estamos en un zoco geoecon¨®mico mundial, sin monopolios ni duopolios, en el que media docena de comerciantes compran, venden, y a veces tambi¨¦n se enga?an unos a otros. Y en el zoco siempre existe el peligro de que en mitad de la discusi¨®n se llegue a las manos.
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