Mar¨ªa Corina Machado: ¡°Ni magnicidio, ni golpe de Estado. Que Maduro renuncie¡±

La destituida parlamentaria Mar¨ªa Corina Machado (Caracas, 1967) vuelve a la primera plana. Este mi¨¦rcoles el Gobierno de Venezuela la acus¨® de tramar el asesinato del presidente de la Rep¨²blica, Nicol¨¢s Maduro. El chavismo mostr¨® correos electr¨®nicos presuntamente enviados por ella en los que promete hacer todo lo posible por ¡°obtener el financiamiento y aniquilar a Maduro¡±.

Y tambi¨¦n dice: ¡°Hay que limpiar esta porquer¨ªa, comenzando por la cabeza, y aprovechando el clima mundial con Ucrania y ahora con Tailandia¡±.

La exprecandidata presidencial niega ser la autora de esas l¨ªneas y ha demandado a los funcionarios que la vincularon con ese supuesto plan. El pulso parece apenas estar comenzando. Machado es una de las m¨¢s activas promotoras de la situaci¨®n venezolana en el exterior. El chavismo busca la forma de confinarla en el pa¨ªs para evitar que se sigan difundiendo versiones no oficiales del conflicto que mantiene con la oposici¨®n desde hace cuatro meses.

Pregunta.?La fiscal general de la Rep¨²blica, Luisa Ortega D¨ªaz, dijo que todas las personas involucradas por el alcalde Jorge Rodr¨ªguez en el supuesto intento de asesinato del presidente Nicol¨¢s Maduro ser¨ªan investigadas. Y para justificar la intercepci¨®n de sus correos electr¨®nicos que se exhibieron en esa rueda de prensa, Ortega D¨ªaz asegur¨® que contra usted existe una averiguaci¨®n penal desde el 19 de marzo pasado, y un juez autoriz¨® al Servicio Bolivariano de Inteligencia (Seb¨ªn) vigilar sus comunicaciones. ?No indica esa diligencia que el Gobierno procedi¨® de manera legal al interceptar sus correos?

Respuesta.?Yo no he sido informada de esa investigaci¨®n, as¨ª que hay all¨ª una violaci¨®n al debido proceso. Adem¨¢s, en ese momento a¨²n asist¨ªa al hemiciclo (Machado fue destituida en abril por un procedimiento expr¨¦s del presidente del Parlamento Diosdado Cabello) por lo que correspond¨ªa solicitar un antejuicio de m¨¦rito en mi contra ante el Tribunal Supremo de Justicia y luego, aprobado ese requisito, allanarme la inmunidad parlamentaria. Pero partamos del hecho de que la investigaci¨®n es real. Eso quiere decir que las actuaciones del Ministerio P¨²blico est¨¢n en una etapa de reserva de las actas y las pruebas, se supone, solo deben estar en manos de la fiscal. ?C¨®mo es posible entonces que el alcalde Rodr¨ªguez las ense?e en una rueda de prensa? Eso evidencia una confabulaci¨®n de todos los poderes p¨²blicos para perseguirme.

P. En la rueda de prensa ense?aron no solo sus cuentas de correo sino su n¨²mero de tel¨¦fono m¨®vil. ?Qu¨¦ ha sucedido desde entonces?

R. Ya perd¨ª la cuenta de las llamadas que he recibido con insultos. Este tel¨¦fono no cesa de repicar. Eso, adem¨¢s de una invasi¨®n a la privacidad, ha llegado al extremo de las amenazas de muerte contra m¨ª y contra mi familia. Voy a solicitar que se haga una experticia a la l¨ªnea telef¨®nica.

P. La oposici¨®n asegura que la fiscal¨ªa est¨¢ subordinada a los intereses del Poder Ejecutivo. Si esto es as¨ª, ?por qu¨¦ presentar una denuncia contra el llamado Alto Mando Pol¨ªtico de la Revoluci¨®n Bolivariana?

R. Estoy clara: no habr¨¢ una decisi¨®n que contrar¨ªe al gobierno. No ha habido en todos estos a?os una sola sentencia de la Sala Pol¨ªtico-Administrativa del Supremo en contra del Ejecutivo. Pero hay que dejar registro de los atropellos y agotar el fuero interno para luego acudir a instancias internacionales. Y en segundo lugar porque la justicia alg¨²n d¨ªa va a llegar. Nosotros estamos luchando porque esta situaci¨®n de impunidad no se repita nunca m¨¢s en Venezuela La propia fiscal ha reconocido que 94% de los delitos que ocurren en el pa¨ªs no son castigados. Esa es la justicia que hoy tenemos.

P. ?C¨®mo explica usted que el Gobierno tenga estas pruebas en su poder?

R. La misma fiscal lo confes¨® en la conferencia de prensa que ofreci¨® este jueves. Un periodista se lo pregunt¨® y ella respondi¨® algo muy grave: que no hab¨ªa sido la fiscal¨ªa sino el Sebin que le hab¨ªa hecho llegar al alcalde de Caracas esa informaci¨®n. Eso es un esc¨¢ndalo. Cuando se rompe la cadena de custodia de evidencias cualquier proceso se puede declarar nulo. Pero esto no es lo m¨¢s importante. Todos sabemos que todos estos correos fueron escritos por ellos mismos. Yo dej¨¦ de utilizar una de esas cuentas en abril de 2013 luego de que me hackearon la cuenta y revelaron fotos de mi vida privada. M¨¢s all¨¢ de su veracidad, he solicitado que un perito inform¨¢tico revise esa cuenta y haga constar lo que yo estoy afirmando. Lo dije el mi¨¦rcoles. Yo no me ando escondiendo. Quienes promovemos en la calle una salida a esta situaci¨®n hemos sido claros. La Constituci¨®n venezolana establece mecanismos que permiten salir de este Gobierno antes de que llegue el a?o 2019. Aqu¨ª hay quienes piensan que no hay nada que hacer, y quienes estamos convencidos de que urge un cambio por la v¨ªa democr¨¢tica. La Salida es un movimiento que busque la renuncia de Maduro. Debemos ser capaces de ofrecer una transici¨®n hacia la democracia que culmine en una Asamblea Nacional Constituyente. Ambos planes no son excluyentes.

P. Cuando usted fue precandidata presidencial no era partidaria de convocar a una Asamblea Nacional Constituyente para refundar al Estado. ?Por qu¨¦ ha cambiado de opini¨®n?

R. Hay un sector importante de la sociedad que se identific¨® con Hugo Ch¨¢vez y debe derivar hacia estructuras pol¨ªticas que les permita convivir con otras expresiones pol¨ªticas de distinto signo, de tal manera que podamos reencontrarnos en la construcci¨®n de una nueva sociedad. La sociedad nos demanda cambios profundos. Ni magnicidio ni golpe. Que Maduro renuncie y nos permita de una manera pac¨ªfica una transici¨®n hacia la democracia. Maduro est¨¢ empe?ado en imponer un sistema totalitario que reproduce el sistema pol¨ªtico de la Habana y que permite sostener al r¨¦gimen de los Castro con los ingresos provenientes del petr¨®leo venezolano.

P. La fiscal tambi¨¦n dijo tambi¨¦n que a los involucrados les podr¨ªan prohibir la salida del pa¨ªs. Usted es tal vez la opositora que m¨¢s ha viajado por Am¨¦rica y Europa denunciando lo que a su juicio sucede en Venezuela. Esas visitas han provocado reacciones concretas de la comunidad internacional para condenar o promover sanciones contra Venezuela. ?C¨®mo afectar¨ªa una medida judicial que le impida salir del pa¨ªs a esa estrategia de la oposici¨®n?

R. En ese caso tendr¨ªa que haber un juicio en el cual sea condenada.

P. El juez tambi¨¦n podr¨ªa pedir que, mientras dure el juicio, usted no pueda salir del pa¨ªs.

R. Yo he demostrado que no me quiero ir del pa¨ªs. Cuando me acus¨® el alcalde Rodr¨ªguez dijo que yo estaba en Panam¨¢ y que ven¨ªa de Estados Unidos. Estuve por ¨²ltima vez en ese pa¨ªs hace 70 d¨ªas. Y es cierto: ten¨ªa un compromiso este jueves en Panam¨¢, pero decid¨ª suspenderlo para acusar penalmente al alto gobierno. Ser¨ªa una medida injustificable, pero aqu¨ª cualquier cosa puede pasar.

P. Leopoldo L¨®pez lleva ya m¨¢s de tres meses preso y usted est¨¢ sometida a esta averiguaci¨®n. ?La Salida ha quedado definitivamente descabezada?

R. Al contrario. Han surgido miles de l¨ªderes. Se ha criticado mucho que el movimiento de protesta que tom¨® la calle en febrero no ten¨ªa estructura piramidal y que su car¨¢cter aut¨®nomo lo hac¨ªa an¨¢rquico. Eso, lejos de ser una debilidad, es una fortaleza. Las protestas no est¨¢n dirigidas por una instancia central. Esto ha sido una reacci¨®n de la sociedad venezolana que est¨¢ unida por muchos factores: los universitarios que consideran con raz¨®n que no tienen futuro en Venezuela, los j¨®venes que est¨¢n hartos de la violencia y la delincuencia. Este movimiento es impredecible en sus formas de lucha y organizaci¨®n. Toda la sociedad se ha unido en torno a ellos. Son centenares y organizaciones de muy diverso tama?o, j¨®venes, mujeres, personas de barrio y urbanizaci¨®n, asambleas de ciudadanos. Ahora estos grupos est¨¢n obligados a articularse. Si algunos somos anulados vendr¨¢n muchos otros a sustituirnos.

P. Usted ha dicho en varias entrevistas que est¨¢ obsesionada con propinarle una derrota al chavismo. Despu¨¦s de tantos a?os de luchas y fracasos, ?no se ha paseado por la posibilidad de explorar y tramar, como lo asegura el gobierno, una salida distinta a la electoral?

R. Mi respuesta es: Ni magnicidio, ni golpe de Estado. Que Maduro renuncie. Mucha gente est¨¢ pasando hambre en Venezuela. Se necesitan tres sueldos m¨ªnimos para poder adquirir los alimentos, a lo que se suma la p¨¦rdida de empleos como consecuencia de la destrucci¨®n del sector privado. El pa¨ªs no aguanta m¨¢s. Si como sector civil no somos capaces de proveer un mecanismo democr¨¢tico para la transici¨®n, la respuesta podr¨¢ venir de otra parte. Y seremos responsables de no haberle sabido presentar al pa¨ªs una oferta.

P. ?Puede haber otra salida distinta a la electoral? Esa es la denuncia que plantea el Gobierno.

R. Pudiera producirse un autogolpe, por ejemplo. Venezuela es un estado mafioso con facciones que se est¨¢n disputando las cuotas de poder.

P. ?C¨®mo eval¨²a la reacci¨®n del ala moderada de la oposici¨®n que no est¨¢ de acuerdo con La Salida?

R. Yo no he parado de recibir llamadas de apoyo de todo el pa¨ªs. Dirigentes estudiantiles, diputados, no me he dado abasto para agradecerles a todos. La unidad de la oposici¨®n es fundamental pero ¨¦sta debe incluir y trascender a los partidos. Es fundamental que esas v¨ªas de organizaci¨®n sean incluidas dentro de la Mesa de la Unidad Democr¨¢tica. Los ciudadanos quieren ser escuchados. No es un debate pol¨ªtico, sino una lucha existencial.

P. La subsecretaria de Estado para Latinoam¨¦rica, Roberta Jacobson, dijo que no era el momento adecuado para sancionar a Venezuela, a prop¨®sito de la aprobaci¨®n en la C¨¢mara de Representantes de una moci¨®n que establecer¨¢ sanciones a funcionarios responsables de la violaci¨®n de derechos humanos en el pa¨ªs. ?Qu¨¦ opini¨®n tiene usted sobre este asunto?

R. Nadie sensato plantear¨ªa imponer sanciones a un pa¨ªs en la situaci¨®n econ¨®mica actual. Lo que se ha considerado es sancionar a individuos que hayan violado de manera cruel los derechos humanos para que no puedan beneficiarse de un pa¨ªs democr¨¢tico. Al tomar esas acciones habr¨ªa un efecto disuasivo porque le elevar¨ªa a los represores el costo pol¨ªtico de sus acciones. M¨¢s all¨¢ de esto, nos corresponde a nosotros los venezolanos asumir la plena vigencia de los derechos consagrados en nuestra Constituci¨®n.