Un centro abierto hace 40 a?os por las Hermanas de San Vicente Pa¨²l en el suburbio m¨¢s pobre de Puerto Pr¨ªncipe atiende a cientos de ni?os desnutridos y da educaci¨®n a mil peque?os.
En la sala de nutrici¨®n los peque?os m¨¢s graves son ingresados y atendidos durante semanas o meses. Comen tres veces al d¨ªa, duermen en una cama digna y juegan en las instalaciones para ellos dispuestas.Mauricio VicentLas madres de los ni?os malnutridos pasan el d¨ªa con ellos en el centro y all¨ª aprenden a coser y a bordar, un oficio para poder buscarse la vida despu¨¦s.Mauricio VicentLas madres aprenden a hacer mu?ecas, postales, delantales y manteles, y las mismas monjas comercializan su producci¨®n y les entregan lo recaudado.Mauricio VicentLos alumnos del colegio de las hermanas de la Caridad adoran a Sor Milagros, toda una instituci¨®n en Cit¨¦ Soleil.Mauricio VicentHace 40 a?os el centro empez¨® como peque?o puesto m¨¦dico. Hoy tiene farmacia, laboratorio y un centro de nutrici¨®n, adem¨¢s de una escuela de preescolar y de primaria.Mauricio VicentCuatro m¨¦dicos haitianos y varias enfermeras atienden cada d¨ªa unas 200 casos, en su mayor¨ªa embarazadas y ni?os malnutridos.Mauricio VicentEl porcentaje de ni?os con bajo peso al nacer y con enfermedades relacionadas con la malnutrici¨®n es muy elevado en Hait¨ª.Mauricio VicentDespu¨¦s de comer los ni?os m¨¢s peque?os echan la siesta en una sala que las monjas han habilitado para ello.Mauricio VicentEn el taller de costura aprenden a coser y a bordar unas 60 madres con hijos ingresados en el centro de nutrici¨®n.Mauricio VicentEl centro de salud ha ido creciendo y ahora tiene su propio laboratorio en el que se realizan los an¨¢lisis b¨¢sicos.Mauricio VicentSoldados brasile?os de la Misi¨®n de las Naciones Unidas para la Estabilizaci¨®n en Hait¨ª (Minustah) visitan a Sor Milagros en Cit¨¦ Soleil.Mauricio Vicent
