Colombia abre la puerta a la entrada en pol¨ªtica de guerrilleros de las FARC

El camino para que la guerrilla colombiana de las FARC participe en pol¨ªtica despu¨¦s de que deje las armas ha empezado a despejarse esta semana. La Corte Constitucional de Colombia dio v¨ªa libre el pasado mi¨¦rcoles para que los combatientes que se desmovilicen ¡ªsi es que el proceso de paz llega a buen t¨¦rmino¡ª puedan ocupar cargos p¨²blicos con excepci¨®n de los condenados por delitos de genocidio y de lesa humanidad. Entre estos cr¨ªmenes figuran el secuestro, el desplazamiento forzado y el reclutamiento de menores.

Sin embargo, la resoluci¨®n del alto tribunal no aclara con exactitud qu¨¦ guerrilleros ser¨¢n los que finalmente puedan participar en pol¨ªtica, y, sobre todo, si podr¨¢n hacerlo los m¨¢ximos jefes de las FARC. Seg¨²n aval¨® el Constitucional, el Congreso de Colombia ser¨¢ el responsable de definir qu¨¦ delitos no impedir¨¢n que los guerrilleros puedan acceder a cargos de elecci¨®n popular. Pero eso s¨®lo ocurrir¨¢ una vez que se firme el acuerdo de paz.

A¨²n as¨ª, la decisi¨®n que tom¨® este mi¨¦rcoles el Tribunal Constitucional es un espaldarazo a la estrategia jur¨ªdica que inici¨® el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, con el llamado Marco Jur¨ªdico para la Paz, aprobado por el Congreso en 2012, con el que se busca poner en marcha los acuerdos necesarios que permitan la desmovilizaci¨®n de la guerrilla, su sometimiento a un sistema de justicia de transici¨®n, de reparaci¨®n a las v¨ªctimas y su participaci¨®n en pol¨ªtica.

¡°Esta decisi¨®n fortalece el proceso de paz al descalificar las cr¨ªticas que se le hab¨ªan hecho al Marco por permitir la posibilidad de que los exguerrilleros participen en pol¨ªtica. Esa posibilidad qued¨® en firme, aunque no cobija a los que cometieron delitos de lesa humanidad, algo que ya contemplaba el Marco¡±, dice el analista Juan Carlos Palou.

Las cr¨ªticas vienen principalmente del Centro Democr¨¢tico, el partido que encabeza el expresidente ?lvaro Uribe, el m¨¢s f¨¦rreo opositor de Santos y del proceso de paz, que, seg¨²n insiste, traer¨¢ impunidad.

Precisamente, el pronunciamiento de la Corte fue una respuesta a la demanda del uribista Rafael Guar¨ªn, que buscaba evitar que los exguerrilleros pudieran participar en pol¨ªtica. De la misma opini¨®n son muchos colombianos que apoyan el proceso de paz, pero no quieren que los exguerrilleros se conviertan en parlamentarios o alcaldes sin pagar un solo d¨ªa de c¨¢rcel por los delitos cometidos. Para unos y otros es inadmisible que despu¨¦s de haber cometido violaciones de los derechos humanos, los miembros de las FARC accedan directamente a instituciones como el Congreso.

Pero el hecho de que el Constitucional, una entidad que goza de gran prestigio internacional, haya avalado el Marco para la Paz podr¨ªa moderar ese rechazo. ¡°Demuestra que el Gobierno no est¨¢ improvisando, sino que intenta hacer las cosas bien¡±, dice Palou.

El senador Roy Barreras, uno de los autores del Marco, considera que ese aval deja sin base el argumento de la oposici¨®n de que las negociaciones con las FARC traer¨¢n impunidad y ¡°cierra la boca a los enemigos de la paz¡±. Santos tambi¨¦n lo advirti¨® en su discurso de investidura como presidente del Gobierno esta semana, consciente de que el proceso judicial de los exguerrilleros es uno de los m¨¢s sensibles: ¡°No ser¨¢ una justicia perfecta, pero tendr¨¢ que asegurar un m¨¢ximo de satisfacci¨®n a las v¨ªctimas¡±, prometi¨® el presidente colombiano.

Tambi¨¦n celebr¨® la decisi¨®n del Constitucional el procurador general (fiscal general), Alejandro Ord¨®?ez, a pesar de sus cr¨ªticas al proceso de paz. Para Ord¨®?ez, lo m¨¢s positivo del fallo del alto tribunal es que veta a los m¨¢ximos comandantes de la guerrilla. ¡°En principio, los responsables de tales cr¨ªmenes internacionales son al menos la c¨²pula¡±, se?al¨® en un comunicado. Sin embargo, seg¨²n la fiscal¨ªa, hasta ahora no hay ning¨²n jefe de las FARC condenado por delitos de lesa humanidad.

Los uribistas interpretan el fallo de la Corte desde su propia perspectiva. Aunque deja intacto el Marco para la Paz, introduce requisitos que deber¨¢n cumplir los exguerrilleros que quieran participar en pol¨ªtica. ¡°Esas condiciones son que hayan contribuido a la verdad, a la reparaci¨®n de las v¨ªctimas y cumplido la pena que se le haya impuesto¡±, explica Rafael Guar¨ªn, para quien la participaci¨®n pol¨ªtica no ser¨¢ autom¨¢tica. Esta interpretaci¨®n la comparte el procurador general. Sin embargo, otros analistas estiman que los guerrilleros desmovilizados podr¨¢n cumplir con sus obligaciones la justicia, la verdad y la reparaci¨®n a la vez que participan en pol¨ªtica.

Solo el Congreso podr¨¢ despejar estas dudas una vez que regule la participaci¨®n en pol¨ªtica de los guerrilleros, Por ahora, las FARC, que siempre han rechazado el Marco para la Paz porque lo ven como una imposici¨®n del Gobierno, no se han pronunciado al respecto. Su m¨¢ximo l¨ªder, Rodrigo Londo?o Echeverri, en un comunicado publicado el viernes, se limit¨® a se?alar que ¡°tras el acuerdo de paz, Colombia no seguir¨¢ siendo la misma¡±.