Berkeley donar¨¢ marihuana para los ciudadanos con menos recursos
El Ayuntamiento aprueba que los dispensarios m¨¦dicos donen al menos el 2% del cannabis a los residentes con bajos recursos
Si por algo siempre se ha caracterizado Berkeley es por su esp¨ªritu anti convencional, a la vanguardia de tendencias que van un paso m¨¢s all¨¢ de lo establecido. Ya en la d¨¦cada de los 60, el Free Speech Movement (la libertad de expresarse de una manera libre), nacido en la Universidad de Berkeley, marc¨® un hito en toda la naci¨®n americana.
Y ahora esta carism¨¢tica ciudad de la Bah¨ªa de San Francisco vuelve a sorprender; y lo hace con la aprobaci¨®n de una ordenanza municipal que requiere a todos los dispensarios m¨¦dicos que donen al menos el 2% del cannabis a los residentes con bajos recursos econ¨®micos. Es decir, marihuana gratis para los pobres. Para quienes no pueden afrontar pagar los 400 d¨®lares que como m¨ªnimo cuesta una onza (28 gramos) de la hierba en los dispensarios.
La idea, en palabras del alcalde de Berkeley, Tom Bates, ¡°es proporcionar a todas las personas la oportunidad de adquirir cannabis por motivos m¨¦dicos, independientemente de su poder adquisitivo¡±.
¡°Hay casos que por una mera cuesti¨®n humanitaria deben ser atendidos, como el de las personas con c¨¢ncer que no tienen dinero para mitigar su dolor consumiendo cannabis. Es una idea noble ponerlo al alcance de los pobres. En cualquier caso en Berkeley siempre lanzamos ideas nuevas¡±, expresa con total convencimiento Bates. Y asegura que la demanda es enorme: ¡°Podr¨ªamos haber establecido un 20% en lugar del 2%¡±.
No todos opinan lo mismo que el alcalde. De hecho, la idea ha irritado a muchos, que la califican de ¡°terrible¡± y ¡°una locura m¨¢s dentro de los frecuentes experimentos liberales de Berkeley¡±, tal y como figura en una carta publicada en San Francisco Chronicle.
¡°Si Berkeley es seria con sus pobres hay ideas mejores que repartir gratis bolsas de marihuana. Por ejemplo, usar ese dinero para proporcionar pr¨¢cticas de trabajo, construir casas y subvencionar el cuidado de los ni?os. Deber¨ªa destinarse m¨¢s dinero a los programas para homeless (personas sin hogar), salud mental y drogadicci¨®n¡±, se dice en la carta.
Pese a la pol¨¦mica, la medida acaba de salir adelante y quienes ganen menos de 32.000 d¨®lares al a?o podr¨¢n beneficiarse de la marihuana gratis a partir del pr¨®ximo mes de agosto, fecha en que entrar¨¢ en vigor la propuesta.
Hace 20 a?os que se legaliz¨® en California la marihuana para uso medicinal, pero nunca hasta ahora se hab¨ªa propuesto dispensarla gratis para quienes no pueden costearla. Si bien en el mismo Berkeley existen programas privados como el del dispensario Berkeley Patiens Group que proporciona dosis gratis de cannabis para los pacientes con bajos recursos necesitados de asistencia m¨¦dica. Actualmente unas cien personas se benefician del uno por ciento de las donaciones de este establecimiento a trav¨¦s del programa Helping Hands.
El cannabis que se dispense gratis deber¨¢ ser de la misma calidad que el que se paga, una regulaci¨®n que compete a Berkeley, ya que estatalmente no se hace y var¨ªa dependiendo de cada dispensario.
Veintiuno de los 50 estados permiten el uso terap¨¦utico del cannabis y un 51% de ciudadanos de EE UU est¨¢n a favor de la legalizaci¨®n.
El alcalde de Berkeley lo tiene claro: ¡°Si nuestra decisi¨®n significa un paso adelante para legalizar la marihuana para uso recreacional, bienvenida sea. Es una cuesti¨®n de tiempo que suceda¡±.
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