Rousseff resiste la oleada de popularidad de Marina Silva
La presidenta brasile?a rebate las acusaciones de corrupci¨®n y remonta en los sondeos
La presidenta brasile?a, Dilma Rousseff, del Partido de los Trabajadores (PT), haciendo gala de una aleaci¨®n incombustible, comienza a remontar poco a poco en los sondeos, dando la vuelta a una situaci¨®n en la que todo, hace una semana, parec¨ªa jugar en su contra. La irrupci¨®n mete¨®rica y sorpresiva de la candidata Marina Silva, del Partido Socialista Brasile?o (PSB), que pronto se coloc¨® a la par (cuando no por encima) de la actual presidenta, hizo temblar a los dirigentes del PT. Nada parec¨ªa detener la figura ascendente de Silva. Y sin embargo, el ataque frontal de la presidenta a la candidata, a la que acusa, entre otras cosas, de servir y servirse de los bancos y de no aclarar muchas partes oscuras de su programa, parece que comienza a surtir efecto.
Una encuesta hecha p¨²blica el mi¨¦rcoles presentaba una t¨ªmida remontada de la actual mandataria brasile?a y, en t¨¦rminos generales, un empate t¨¦cnico entre las dos mujeres, tanto en la primera ronda como en la segunda. Este viernes otro sondeo muestra que Dilma Rousseff ser¨ªa la candidata m¨¢s votada en esa primera ronda, con un 39%: Marina Silva obtendr¨ªa un 31% y el tercero en discordia, cada vez m¨¢s relegado a su papel de comparsa, A¨¦cio Neves, del? conservador Partido Socialdem¨®crata Brasile?o (PSDB), se quedar¨ªa en un 15%. En el segundo turno, por ahora, Dilma Rousseff y Silva est¨¢n pr¨¢cticamente empatadas, con un 42% y un 43%, respectivamente.
El sondeo tambi¨¦n arroja datos sobre los seguidores de unos y otros: Marina Silva, ex ministra de Medio Ambiente con Lula, alejada posteriormente del PT, es la preferida de la clase media emergente y de los habitantes de las grandes ciudades como S?o Paulo o R¨ªo; mientras, Rousseff mantiene entre su electorado a la franja m¨¢s pobre de la poblaci¨®n y de las zonas rurales.
A la irrupci¨®n y avance de Marina Silva se le sum¨® el s¨¢bado pasado un problema m¨¢s a?adido a Rousseff: la existencia de una enmara?ada y gigantesca red de corrupci¨®n creada a expensas de la mayor empresa p¨²blica brasile?a, la petrolera Petrobras. La revista Veja revelaba ese d¨ªa que, a cambio de una rebaja en la pena por un asunto de blanqueo de dinero, Roberto Costa, exdirector de abastecimiento de Petrobras, donde entr¨® a trabajar 35 a?os atr¨¢s, hab¨ªa entregado una lista al juez de decenas de nombres de pol¨ªticos brasile?os que se han beneficiado de los sobornos que las constructoras versaban a la petrolera para adjudicarse obras.
Seg¨²n el semanario, en la lista del delator hay desde ministros a diputados federales. Los pol¨ªticos aparentemente envueltos pertenecen a varios partidos pero el esc¨¢ndalo, que sacudi¨® la ya de por s¨ª convulsa campa?a pol¨ªtica brasile?a, golpeaba de lleno en Dilma Rousseff, responsable ¨²ltima de la empresa p¨²blica. El mi¨¦rcoles, el exdirectivo testificar¨¢ ante una comisi¨®n de investigaci¨®n parlamentaria que puede convertirse en otro bombazo informativo.
El episodio hizo temer a los miembros de la campa?a de Dilma Rousseff un nuevo desplome de la candidatura de la presidenta. No ha sido as¨ª, a juzgar por los datos de los sondeos. Rousseff, adem¨¢s de emplearse a conciencia contra Silva, endureciendo la campa?a, tom¨¢ndola ya como ¨²nico blanco a batir, ha aprovechado sus m¨²ltiples comparecencias p¨²blicas (la campa?a monopoliza todo el espacio medi¨¢tico brasile?o) para alejarse del foco del esc¨¢ndalo y repetir que siempre ha luchado contra ese tipo de pr¨¢cticas corruptas y abogado por su persecuci¨®n: ¡°Nunca, durante toda mi vida pol¨ªtica, nadie me ha visto tratar de esconder cosas debajo de la alfombra. Estamos combatiendo la corrupci¨®n no con palabras vac¨ªas sino con acciones concretas¡±. Desde el otro lado, Marina Silva le lanza una acusaci¨®n tambi¨¦n muy concreta: ¡°El PT coloc¨® al director de Petrobas para asaltarla¡±.
De aqu¨ª al final del primer turno, todo va a ser as¨ª: las dos mujeres acus¨¢ndose mutuamente mientras A¨¦cio Neves pierde relevancia paulatinamente. Parad¨®jicamente, recobrar¨¢ importancia cuando, si las encuestas se confirman, quede eliminado y su formaci¨®n aconseje a sus electores por qui¨¦n votar. Su 15% se antojar¨¢ entonces crucial. Todo apunta a que optar¨¢ por Silva, pero a¨²n es pronto para asegurarlo.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Sobre la firma
Archivado En
- Marina Silva
- Dilma Rousseff
- A¨¦cio Neves
- Petrobras
- Presidente Brasil
- Elecciones Brasil
- Candidaturas pol¨ªticas
- Brasil
- Presidencia Brasil
- Elecciones presidenciales
- Sudam¨¦rica
- Latinoam¨¦rica
- Gobierno Brasil
- Elecciones
- Empresas
- Am¨¦rica
- Gobierno
- Econom¨ªa
- Administraci¨®n Estado
- Administraci¨®n p¨²blica
- Elecciones Brasil 2014
- Partido de los Trabajadores
- Partidos pol¨ªticos
- Pol¨ªtica