La doble liberaci¨®n de ?ngel Am¨ªlcar
El hondure?o preso injustamente durante cinco a?os en M¨¦xico ha obtenido su libertad y, adem¨¢s, ha decidido perdonar a sus torturadores
?ngel Am¨ªlcar Col¨®n tiene un objetivo en mente: formalizar su relaci¨®n con July Baltazar, la mujer con la que tuvo a sus dos hijos. ¡°Quiero tener uno o dos hijos m¨¢s, construir un peque?o patrimonio y volver a reivindicar mi trabajo con la comunidad¡±. ?ngel ha tenido que esperar cinco a?os y nueve meses, tiempo que estuvo preso injustamente en una c¨¢rcel federal de M¨¦xico.
?ngel Am¨ªlcar fue puesto en libertad el pasado 15 de octubre. La Procuradur¨ªa General de la Rep¨²blica (Fiscal¨ªa) reconoci¨® que no ten¨ªa elementos que probaran la culpabilidad de ?ngel por los delitos de delincuencia organizada y acopio de armas, entre otros. ¡°Esto es un triunfo de la verdad y la justicia contra el mal¡±.
Amnist¨ªa Internacional y la ONG Centro Prodh lo hab¨ªan declarado preso de conciencia en julio pasado, cuando dieron a conocer su caso, explicaron todas las inconsistencias del proceso y consideraron que su detenci¨®n se deb¨ªa a su condici¨®n de migrante, hondure?o y gar¨ªfuna (afrodescendiente). ¡°Las c¨¢rceles mexicanas est¨¢n llenas de presos de conciencia¡±, declar¨® Denise Gonz¨¢lez, abogada defensora de Col¨®n. Desde su pa¨ªs?tambi¨¦n hubo pronunciamientos para liberar a ?ngel. En semanas pasadas el Doctor Roberto Herrera, ombudsman de Honduras, se reuni¨® con autoridades de la Fiscal¨ªa mexicana, quienes le aseguraron que habr¨ªa avances en el caso.
El periplo de ?ngel comenz¨® en enero de 2009, cuando decidi¨® dejar Honduras para ir a Nueva York a conseguir trabajo y poder mandar dinero para costear el tratamiento de su primog¨¦nito, aquejado por un c¨¢ncer. Su hijo muri¨® seis meses despu¨¦s de su partida y ?ngel no pudo llamar a su pareja para consolarla. Durante los cinco a?os que estuvo preso muri¨® no s¨®lo su hijo. ¡°Muri¨® la hija mayor de mi hermana, mi t¨ªa, mi hermano, mi mam¨¢. En ning¨²n momento se me dio la oportunidad de hacer una llamada y dar el p¨¦same a mis hermanos¡±.
Al iniciar el viaje hacia el norte, el traficante de personas que prometi¨® llevar a ?ngel Col¨®n a EE UU lo abandon¨® al entrar a M¨¦xico, ¨¦l consigui¨® llegar hasta el Distrito Federal en la caja de un tr¨¢iler junto a 119 personas. Despu¨¦s de dos meses de viaje logr¨® llegar a la ciudad fronteriza de Tijuana, en donde otro traficante lo llev¨® a una casa. ¡°Llegu¨¦ bajo amenazas y enga?os¡±. D¨ªas despu¨¦s escuch¨® disparos y gritos. Eran los a?os m¨¢s violentos de la guerra contra el narcotr¨¢fico emprendida por el expresidente Felipe Calder¨®n. ¡°Corr¨ª por mi vida¡±. Ah¨ª fue cuando lo detuvieron y lo acusaron de posesi¨®n de drogas y armas y delincuencia organizada.
La Polic¨ªa Federal lo detuvo 15 horas, despu¨¦s lo entregaron al Ministerio P¨²blico, que lo entreg¨® al Ej¨¦rcito en donde fue interrogado bajo tortura. ¡°Para evitar la macaneada que pretend¨ªan darme comenc¨¦ a realizar las peticiones que me ped¨ªan: me pusieron a limpiar los zapatos de otros detenidos con mi saliva, dar mi vestimenta a otros, realizar posturas militares que no sab¨ªa. Me insultaban. Me convirtieron en el payaso que divierte a su p¨²blico¡±, asegura en su declaraci¨®n escrita.
Aunque su liberaci¨®n se dio el mi¨¦rcoles pasado, la sede del Instituto Nacional de Migraci¨®n en Nayarit, Estado en donde se encuentra la prisi¨®n en donde estaba, no dej¨® que volara hacia la Ciudad de M¨¦xico porque dijeron desconocer el otorgamiento de la visa humanitaria que solicitaron sus abogados con el fin de que Col¨®n siga en el pa¨ªs para resolver la situaci¨®n de reparaci¨®n de da?os.
?ngel Col¨®n asegura sentirse melanc¨®lico y alegre por lo que le est¨¢ pasando y ha decidido tambi¨¦n liberar su conciencia. ¡°Una manera de liberarme es que he tomado la decisi¨®n de perdonar a todas aquellas personas que me hicieron da?o para aliviar la carga¡±. Aunque perdona, ?ngel sigue exigiendo justicia ya no s¨®lo para ¨¦l, sino para que a nadie m¨¢s le vuelva a pasar lo mismo. La reparaci¨®n de da?os que pide Col¨®n no se refiere necesariamente a una compensaci¨®n econ¨®mica sino a ¡°la investigaci¨®n de las personas que me torturaron. Quisiera asegurarme de que el Estado va a hacer su investigaci¨®n para que llegue la aplicaci¨®n de la justicia¡±.
?ngel espera la llegada de su esposa en cualquier momento, tiene pocas certezas y entre ellas est¨¢ la de volver alg¨²n d¨ªa a Honduras para seguir luchando con las ONG de las que forma parte como la Organizaci¨®n Fraternal Negra Hondure?a.
¡°Las angustias las traigo pero estoy mucho m¨¢s alegre, ya sonr¨ªo m¨¢s¡±, dice ?ngel Col¨®n mientras confiesa sentirse aliviado porque a pesar de todas las entrevistas que ha dado, todav¨ªa no le duele la cabeza.
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