¡°El juicio y las sentencias fueron una venganza¡±
Fernando Gonz¨¢lez, uno de los cinco detenidos cubanos, cumpli¨® 15 a?os de c¨¢rcel en EE UU
Fernando Gonz¨¢lez, de 50 a?os, sostiene que todo el proceso contra los cinco, "estuvo viciado por la influencia pol¨ªtica de la extrema derecha de Miami. Fue una venganza pol¨ªtica", por el derribo de las dos avionetas de Hermanos al Rescate, el 24 de febrero de 1996, " y la frustraci¨®n por no poder acabar con la revoluci¨®n. Nombrado vicepresidente del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP), Gonz¨¢lez permaneci¨® cinco d¨ªa Espa?a, donde recibi¨® el apoyo de dirigentes y cargos electos de Izquierda Unida y otros grupos de la izquierda espa?ola. "Me voy a dedicar a trabajar por la libertad de mis tres compa?eros todav¨ªa presos".
Cuando lleg¨® a Miami en 1997 para infiltrarse en el anticastrismo, estaba casado en Cuba pero su esposa ignoraba su paradero y dedicaci¨®n. "S¨®lo sab¨ªa que estaba fuera. Mi familia nunca conoci¨® qu¨¦ tipo de trabajo hac¨ªa. Les dije que estaba cumpliendo un tarea de tipo comercial en otro pa¨ªs". "?Lo m¨¢s dif¨ªcil?. Hab¨ªa muchas complejidades. Ten¨ªa que velar por los mecanismos que posibilitaran cumplir las tareas sin ser detectado y eso implicaba la atenci¨®n a un numerosos detalles". Gonz¨¢lez coordinaba el trabajo de otros agentes ya infiltrados en los grupos m¨¢s radicales. "Eran compa?eros por los que ten¨ªa que preocuparme y ayudar, incluso en su vida persona".
El principal cargo contra Gonz¨¢lez fue actuar como agente extranjero sin comunicarlo a las autoridades norteamericanas, "cuya pena m¨¢xima eran diez a?os y deportaci¨®n, pero me fueron sumando otros cargos, como conspiraci¨®n para actuar como agente extranjero y otras violaciones como uso documentos falso, y otras cosas". El ex agente de inteligencia insiste en la politizaci¨®n del caso "porque el primer paso que da H¨¦ctor Pesquera, director del FBI en Miami, inmediatamente despu¨¦s de nuestro arresto es comunic¨¢rselo los dos congresistas de origen Miami Ileana Ross-Lethinen, Lincoln D¨ªaz Balart. Eso est¨¢ reconocido p¨²blicamente".
Pregunta. ?Qu¨¦ pruebas tiene para afirmar el FBI le detuvo para sabotear el incipiente acercamiento de Estados Unidos y Cuba?.
Respuesta. El propio H¨¦ctor Pesquera admiti¨® en una entrevista que se nos vigilaba desde hacia dos a?os y que en la oficina que ¨¦l dirig¨ªa hab¨ªa muchos oficiales que estaban en contra de que se nos arrestara. ?Por qu¨¦? Porque sencillamente esos agentes estaban consiguiendo informaci¨®n durante la investigaci¨®n contra nosotros". Operativamente no conven¨ªa nuestra detenci¨®n. Pesquera tuvo que hacer mucha labor de convencimiento en el Departamento de Justicia para que se autorizara arrestarnos
P. ?Consiguieron informaci¨®n militar secreta de EE.UU ?
R. No existe un solo ejemplo de que hubi¨¦ramos logrado informaci¨®n clasificada. Y no es que lo diga yo. Lo dijo, por ejemplo, al general Robert Clapper, que testific¨® como experto de la fiscal¨ªa, y que hoy en d¨ªa es el jefe de toda la comunidad de inteligencia de EE.UU (Director Nacional de Inteligencia). Los abogados de la defensa le preguntaron si hab¨ªa revisado los numerosos documentos presentados en el caso Dijo que s¨ª y que no hab¨ªa visto ni un solo documento que fuera informaci¨®n clasificada. Eso est¨¢ en las transcripciones del juicio Se pude revisar.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.