Montevideo mira al Interior

La plaza central de la localidad de San Jos¨¦ (Uruguay), a unos 100 kil¨®metros de Montevideo, es estos d¨ªas un lugar seguro y tranquilo. Es la capital de un departamento cuya principal actividad es la lecher¨ªa, una regi¨®n que registra 10 a?os de crecimiento econ¨®mico sostenido: el desempleo ronda el 6%, no hay inseguridad ciudadana, el salario medio se ha multiplicado por dos, el valor de la hect¨¢rea de tierra por ocho.

En la redacci¨®n de La Primera Hora, el peri¨®dico del departamento, el periodista Wilson Ram¨ªrez muestra una de las portadas de este a?o. ¡°Pobreza cay¨® en un 78% en los ¨²ltimos seis a?os¡±, reza el titular. Preguntado sobre cu¨¢ndo fue la ultima vez que pas¨® algo grave en San Jos¨¦, Ram¨ªrez pasa un rato pensativo y, despu¨¦s de muchas vueltas, evoca un lejano asesinato, hace m¨¢s de un a?o, en el contexto de un ajuste de cuentas por drogas.

Con matices, esta situaci¨®n podr¨ªa repetirse en cada uno de los 17 departamentos restantes que componen Uruguay: la vida se desarrolla pl¨¢cidamente en un clima de confianza, una tranquilidad mecida por los buenos precios de las materias primas en los mercados internacionales.

Analistas pol¨ªticos, soci¨®logos y periodistas montevideanos examinan estos d¨ªas con lupa la situaci¨®n en el llamado ¡°Interior¡± del pa¨ªs, que el pasado 26 de octubre fue el origen de un vuelco electoral que nadie vio venir: el Frente Amplio (FA) conserv¨® su mayor¨ªa parlamentaria a pesar de que todos los sondeos pronosticaban un fuerte retroceso de la izquierda gobernante desde hace nueve a?os. Cuando faltan menos de dos semanas para la segunda vuelta (30 de noviembre), que servir¨¢ para designar al presidente, el candidato del FA, Tabar¨¦ V¨¢zquez, aparece como favorito indiscutible.

Analistas pol¨ªticos, soci¨®logos y periodistas examinan con lupa la situaci¨®n en el llamado ¡°Interior¡± del pa¨ªs

Los resultados del FA se han cimentado con un nuevo caudal de votos procedentes del Interior, hasta hace poco bastiones de la derecha tradicional. Para los analistas, la clave est¨¢ en los excelentes indicadores en estas zonas en las que vive la mitad de la poblaci¨®n del pa¨ªs. Por ello, la prensa montevideana evoca una ¡°d¨¦cada ganada en el Interior¡±, jugando con aquella expresi¨®n acu?ada en toda Am¨¦rica Latina en los ochenta, cuando se hablaba de una ¡°d¨¦cada perdida¡± para la regi¨®n.

Pilar Cami, de la Asociaci¨®n Rural de San Jos¨¦, explica que el 80% de la producci¨®n lechera local se exporta al extranjero. Brasil, Venezuela, M¨¦xico y Cuba son los compradores tradicionales de la leche uruguaya, a los que ahora se suma la inmensa China. Para hacer frente a la demanda, los granjeros locales han impulsado una aut¨¦ntica revoluci¨®n productiva, con importantes aportaciones de la tecnolog¨ªa y fuertes inversiones. Lo que ocurre en San Jos¨¦ sucede en casi todos los departamentos de Uruguay, donde se exporta soja, arroz, madera o carne: en 10 a?os se ha cambiado radicalmente la forma de trabajar la tierra.

Brasil, Venezuela, M¨¦xico y Cuba son los compradores tradicionales de la leche uruguaya, a los que ahora se suma la inmensa China

As¨ª, el valor de la hect¨¢rea se ha multiplicado por ocho desde el 2002, seg¨²n el Instituto Siglo XXI, organismo de promoci¨®n de la inversiones. En las listas de los habitantes m¨¢s ricos de Uruguay aparecen ahora grandes propietarios rurales. En menor medida, tambi¨¦n se han enriquecido los productores medianos, que han adquirido maquinaria de ¨²ltima generaci¨®n, viviendas y coches todoterreno de lujo, entre otros. Estos nuevos empresarios viven ahora pendientes del mercado de materias primas de Chicago, siguen la situaci¨®n pol¨ªtica en China y los ¨²ltimos avances tecnol¨®gicos de la agricultura mundial.

La suerte de los trabajadores del campo tambi¨¦n ha mejorado. El Frente Amplio ha limitado la jornada laboral de los peones rurales a ocho horas y ha impulsado un aumento salarial de hasta un 40% en el sector. El cambio se ha producido sin grandes enfrentamientos con los grandes propietarios agr¨ªcolas, ya que los Gobiernos del FA han evitado subir los impuestos a los exportadores. Seg¨²n el Instituto de estudios Cuesta Duarte, el campo uruguayo soportar¨ªa menos presi¨®n fiscal que las empresas privadas.

El pasado octubre el FA se impuso en San Jos¨¦ en la primera ronda de las elecciones, que determinan la composici¨®n del Parlamento. Lo mismo sucedi¨® en departamentos tradicionalmente conservadores como Cerro Largo y Rivera, donde nunca hab¨ªa ganado la izquierda. El mapa electoral de Uruguay cambia y Montevideo mira ahora hacia el Interior.