Retrato de los que se quedaron
Una ONG recoge historias de los efectos de la inmigraci¨®n a EE UU en el estado mexicano de Yucat¨¢n, hasta ahora poco afectado
Mildre quiere volver a 1996, el a?o en que Francisco, su marido, decidi¨® hacer una peque?a maleta y cruzar la frontera rumbo a Estados Unidos. ¡°Lo cambio todo por traerlo de vuelta, me ha dejado sola con cuatro hijos¡ ¨¦l ya tiene otra familia en California¡±, dice esta mujer de 47 a?os que ve como Hoct¨²n, un municipio de Yucat¨¢n (sureste mexicano) se vac¨ªa lentamente. La zona ha perdido m¨¢s del 35% de su poblaci¨®n en 15 a?os. La mayor¨ªa han sido hombres que van en busca del ansiado sue?o americano.
EE UU es el pa¨ªs con el mayor n¨²mero de inmigrantes del mundo
UBELONG, una organizaci¨®n que gestiona programas de voluntariado, ha puesto el punto de mira en este sitio. ¡°En M¨¦xico siempre se ha hablado de la migraci¨®n del centro y norte del pa¨ªs, pero en los ¨²ltimos a?os el fen¨®meno se ha trasladado al sureste¡±, dice Ra¨²l Rom¨¢n, cofundador de la ONG. Durante su visita a Yucat¨¢n, 11 integrantes de UBELONG?han recolectado historias como las de Mildre. ¡°Hemos hablado con 40 familias que tienen a uno o m¨¢s miembros buscando el sue?o americano. Queremos contar lo que sucede con las personas que se quedan a la espera de que alg¨²n d¨ªa vuelvan los suyos¡±, agrega. Al proyecto de la expedici¨®n ¡ªLa inmigracion a trav¨¦s de la fotograf¨ªa¡ª se ha sumado Lonnie Schlein, veterano fotoperiodista del New York Times y ganador del Premio Pulitzer en 2002.
Mildre no solo ha sufrido el abandono de su marido. Mario, su hijo, se fue en el 2008 con 18 a?os. ¡°T¨² tampoco vas a regresar¡±, fue lo que le dijo antes de su partida. Tambi¨¦n en Hoct¨²n, Celia Gil, de 44 a?os, y su hija Karime, de 26, tienen vidas paralelas. Sus parejas se marcharon a EE?UU. Karime lo resume: ¡°Cuando nuestros esposos se van todos tenemos esperanza de que vuelvan pronto. Pero casi nadie regresa. Mi marido fue en busca de un sue?o, pero ese sue?o termin¨® con su familia¡±.
EE?UU es el pa¨ªs con el mayor n¨²mero de inmigrantes del mundo. En 2013 acog¨ªa 45,8 millones, seg¨²n datos de Naciones Unidas. Se estima que en 2013 resid¨ªan en ese pa¨ªs m¨¢s de 12 millones de mexicanos. Incluyendo a los de segunda y tercera generaci¨®n, la cifra llega a 34,7 millones, de acuerdo con datos del Current Population Survey.
Mi marido fue en busca de un sue?o, pero ese sue?o termin¨® con su familia Karime
Pese a que Yucat¨¢n se ha caracterizado por su poca inmigraci¨®n, sus pueblos empiezan a vaciarse, comenta ?ngel Basto, subdirector de atenci¨®n a migrantes del Instituto para el Desarrollo de la Cultura Maya. Las medidas adoptadas por Obama el 20 de noviembre ¡ªque pueden beneficiar a cinco millones de personas al recibir un permiso de residencia o de trabajo temporal y as¨ª dejar atr¨¢s la amenaza de la deportaci¨®n¡ª corrieron como la p¨®lvora en el pueblo de Mildre. ¡°La verdad, me gustar¨ªa que mi esposo y mi hijo se legalizaran¡±, comenta esta yucateca. ¡°Es mejor que se queden ah¨ª, porque volver ser¨ªa muy dif¨ªcil¡±. El fot¨®grafo Lonnie Schlein explica que este proyecto pretende aportar un grano de arena para que los estadounidenses sean menos hostiles hacia los migrantes. ¡°La fotograf¨ªa es un arma poderosa para conectar¡±, detalla.
La poblaci¨®n yucateca que emigra es en su mayor¨ªa ind¨ªgena, comenta Pedro Lewin, autor del libro Mayan Journeys: The New Migration from Yucatan to the US. El autor dice que este fen¨®meno ha tra¨ªdo beneficios ¡ª123 millones de d¨®lares en 2013 (98,7 millones de euros al cambio actual) por el env¨ªo de remesas¡ª, pero tambi¨¦n acarrea un desgate. Por ejemplo, dejan de hablar maya y las familias se desintegran. Mildre conoce las dos caras. ¡°Cuando se fue mi esposo ten¨ªamos una casita de paja, ahora vivimos bien, no nos quejamos, pero si hubiera sabido lo que iba a pasar preferir¨ªa comer ahora frijoles con tortillas¡±.
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