China enviar¨¢ a sus artistas a vivir al campo para ¡°experimentar la vida¡±

Artistas y profesionales de la televisi¨®n en China tendr¨¢n que residir en el campo una temporada. En una iniciativa que acarrea ecos de la ¨¦poca mao¨ªsta, cuando los intelectuales y los ¡°j¨®venes educados¡± fueron enviados a vivir en las aldeas para aprender de los campesinos y deshacerse de sus opiniones burguesas, el Gobierno chino trasladar¨¢ temporalmente a grupos de productores, actores, guionistas y otros profesionales del cine y la televisi¨®n al medio rural para ¡°hacer trabajo de campo y experimentar la vida¡±.

Un comunicado de la Administraci¨®n Estatal de la Prensa, Publicaciones, Radio, Pel¨ªculas y Televisi¨®n china (SAPPRFT) ha anunciado esta semana que organizar¨¢ traslados cada trimestre de profesionales de series de televisi¨®n y del cine a ¡°¨¢reas remotas monta?osas, campos, escuelas comunitarias, cuarteles y minas¡±. Los viajes durar¨¢n al menos 30 d¨ªas. ¡°Esto ayudar¨¢ a los artistas a formarse un punto de vista correcto y crear m¨¢s obras maestras¡±, asegura el organismo gubernamental encargado de la censura de los medios de comunicaci¨®n.

Mediante esta iniciativa, ¡°que ser¨¢ de largo plazo¡±, la SAPPRFT enviar¨¢ al campo anualmente al elenco de cinco pel¨ªculas -actores, directores, y guionistas, entre otros- y desplazar¨¢ tambi¨¦n a un centenar de presentadores y directores de programas art¨ªsticos de la cadena central CCTV y de emisoras locales a zonas fronterizas, pobladas por minor¨ªas ¨¦tnicas o que hayan tenido un papel destacado en la historia revolucionaria china.

El anuncio se produce despu¨¦s de que en octubre se celebrara en Pek¨ªn una reuni¨®n de las autoridades chinas sobre arte y literatura en el que particip¨® el presidente Xi Jinping. Seg¨²n informaron entonces los medios oficiales chinos, Xi inst¨® a los artistas en un discurso de dos horas a no ser ¡°esclavos¡± del mercado y a crear obras que ¡°no acarrearan el hedor del dinero¡±. En su lugar, dijo entonces el presidente chino, los creadores deben producir obras que no s¨®lo tengan m¨¦rito creativo sino que tambi¨¦n representen los valores socialistas e inspiren al servicio del pueblo.

Xi arremeti¨® tambi¨¦n entonces contra la arquitectura de dise?o m¨¢s atrevido, que calific¨® de ¡°rara¡±. La arquitectura, y el arte deben ser ¡°como la luz del sol en el cielo azul y la brisa primaveral que inspiran las mentes y rescaldan los corazones; alimentan el gusto y limpian los estilos de trabajo poco deseables¡±, asegur¨®.

Aquel discurso de Xi ya suscit¨® comparaciones con Mao, que consideraba el arte como un instrumento de propaganda y al servicio de la pol¨ªtica. En 1942, en la base comunista de Yanan durante la guerra civil, el ¡°Gran Timonel¡± se?alaba que ¡°no hay tal cosa como el arte por el arte, arte que est¨¦ por encima de las clases, arte que est¨¦ separado, o sea independiente, de la pol¨ªtica¡±. Esas ideas se emplear¨ªan a?os m¨¢s tarde, durante la Revoluci¨®n Cultural, (1966-1976) para atacar a intelectuales y figuras de la cultura. Decenas de miles de ellos, y de j¨®venes que hab¨ªan recibido educaci¨®n formal, fueron enviados a trabajar al campo para reeducarse.

Desde su llegada al poder hace dos a?os, Xi Jinping -que ha recurrido en m¨¢s de una ocasi¨®n a la vieja ret¨®rica mao¨ªsta para reclamar ¡°autocr¨ªticas¡± o declarar ¡°campa?as de rectificaci¨®n¡±- ha endurecido la actitud del Gobierno chino hacia las artes. Mientras que en el sector cinematogr¨¢fico permanecen censuradas pel¨ªculas como la premiada ¡°Un toque de violencia¡± (2013), de Jia Zhangke, la Administraci¨®n de Cine y Televisi¨®n tambi¨¦n ha vetado la difusi¨®n por internet de series extranjeras como ¡°The Big Bang Theory¡±.