Uruguay se prepara para despedir al presidente Jos¨¦ Mujica
Cristina Fern¨¢ndez no estar¨¢ el domingo en la toma de posesi¨®n de Tabar¨¦ V¨¢zquez
Son d¨ªas de mucha agitaci¨®n y solemnidad en Uruguay ante la inminente despedida de Jos¨¦ Mujica y la toma de posesi¨®n el domingo de Tabar¨¦ V¨¢zquez, ganador de las elecciones del pasado mes de noviembre. El primero en llegar a Montevideo ha sido Evo Morales, quien apura las ultimas horas del mandato de Mujica con la firma de un acuerdo sobre la participaci¨®n de Bolivia en la construcci¨®n de un mega puerto uruguayo en el Atl¨¢ntico. Este acuerdo tienen ante todo un valor simb¨®lico ya que el proyecto es una de las grandes utop¨ªas que ha cultivado Mujica durante su mandato, una obra en suspenso debido a la falta de sinton¨ªa dentro de Mercosur. El presidente boliviano manda tambi¨¦n un mensaje a Chile buscando una salida al mar para las exportaciones de su pa¨ªs por el R¨ªo de la Plata. As¨ª, en las primeras horas de su estad¨ªa en Montevideo visit¨® la sede de la ALADI (Asociaci¨®n Latinoamericana de Integraci¨®n), donde su pa¨ªs tiene abierto un contencioso con Chile entorno a la libre circulaci¨®n de camiones hacia el Pac¨ªfico.
Morales no se cruzar¨¢ el domingo con Michelle Bachelet cuando tenga lugar la ceremonia de cambio de mando, a la que s¨ª asistir¨¢ su vicepresidente. Pero Montevideo no dejar¨¢ de ser por ello un hervidero diplom¨¢tico, con la presencia de delegaciones de alto nivel, incluyendo la del vicepresidente estadounidense, Joe Biden, y la del presidente cubano, Ra¨²l Castro. Los dos hombres coincidir¨¢n en momentos de grandes cambios en sus relaciones y con el actual ministro de Exteriores de Uruguay, Luis Almagro, como favorito para acceder a la secretar¨ªa general de la OEA. Almagro ha declarado que su principal objetivo ser¨¢ devolver a Cuba a ese organismo.
En medio de medidas de seguridad desconocidas en el pl¨¢cido pa¨ªs rioplatense, los uruguayos miden estos d¨ªas el aumento de su prestigio internacional.
¡°Est¨¢ claro que hay un mensaje impl¨ªcito de esos presidentes que est¨¢n aprobando as¨ª el modelo uruguayo. Uruguay se ha destacado por la estabilidad y la racionalidad de su pol¨ªtica, cuando la inestabilidad de Am¨¦rica Latina es lo que m¨¢s preocupa al mundo. Mujica le ha a?adido su toque personal a toda una doctrina hist¨®rica y en ese sentido ha hecho un gran aporte¡±, dice Ramiro Podetti, historiador y profesor de relaciones internacionales de la Universidad de Montevideo.
A pesar de su estilo campechano y sus declaraciones pol¨¦micas, el exguerrillero tupamaro se ha mantenido dentro de una tradici¨®n de la diplomacia uruguaya que combina neutralidad, afirmaci¨®n de los intereses nacionales frente a las grandes potencias y defensa de la integraci¨®n americana. Esta doctrina que exige altas dosis de pragmatismo lleg¨® a generar sorpresa dentro de la propia izquierda ya que las relaciones de Mujica con Estados Unidos y la administraci¨®n Obama fueron inmejorables, con gestos como el acuerdo para trasladar presos de Guant¨¢namo.
Pero hasta el final, la pol¨ªtica exterior habr¨¢ sido terreno resbaladizo para el presidente, quien esta semana, ante la llegada inminente de Nicol¨¢s Maduro, se ha enfrentado a duras cr¨ªticas de la oposici¨®n por su decisi¨®n de no condenar la detenci¨®n del alcalde de Caracas Antonio Ledezma.
A partir del pr¨®ximo lunes, con Tabar¨¦ V¨¢zquez llegar¨¢ otro estilo, continuidad en muchos temas y las mismas dificultades que afront¨® Mujica, especialmente con Argentina. La nota disonante del traspaso de poder en Uruguay la ha puesto la ausencia de Cristina Fern¨¢ndez de Kirchner. Seg¨²n la prensa local, el Gobierno uruguayo ha recibido con disgusto que el pa¨ªs est¨¦ representado por el vicepresidente, Amado Boudou, procesado por corrupci¨®n.
Mujica ha criticado en los ¨²ltimos d¨ªas la falta de visi¨®n regional de Argentina en una clara alusi¨®n a las medidas proteccionistas de su vecino, que han llevado el intercambio econ¨®mica a sus horas m¨¢s bajas en d¨¦cadas. Con Tabar¨¦ V¨¢zquez esa situaci¨®n no tiene perspectivas de mejora ya que durante su primer mandato mantuvo un duro enfrentamiento con Buenos Aires por la instalaci¨®n de una f¨¢brica en un r¨ªo com¨²n.
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