La oposici¨®n boliviana gana espacios clave en las elecciones regionales
El Movimiento al Socialismo de Evo Morales se mantiene como primera fuerza pero pierde en El Alto y Cochabamba
Las elecciones subnacionales (municipales y auton¨®micas) de este domingo 29 llenaron de buenas noticias a la oposici¨®n boliviana, no mucho despu¨¦s de que esta fuera ampliamente superada por Evo Morales en las presidenciales de octubre pasado.
Varios partidos de oposici¨®n le arrebataron al Movimiento al Socialismo (MAS) de Morales las alcald¨ªas de El Alto y Cochabamba, y las gobernaciones de La Paz y Tarija, que hasta ahora hab¨ªan estado bajo control oficialista. Al mismo tiempo, los opositores conservaron la alcald¨ªa de La Paz, la alcald¨ªa y la gobernaci¨®n de Santa Cruz, y forzaron a una segunda vuelta para la gobernaci¨®n del Beni, seg¨²n los resultados preliminares. Sin embargo, el MAS se mantuvo como la fuerza pol¨ªtica m¨¢s importante del pa¨ªs ganando cuatro gobernaciones y la mayor cantidad de municipios en todo el pa¨ªs.
Los resultados m¨¢s llamativos fueron los que obtuvieron Soledad Chapet¨®n, de Unidad Nacional, y F¨¦lix Patzi, de Soberan¨ªa y Libertad (SOL.bo), que batieron al oficialismo en sus dos bastiones hist¨®ricos: la ¡°ciudad rebelde¡± de El Alto (de un 53 a un 32%), y el centro pol¨ªtico del pa¨ªs, el departamento de La Paz (de un 55 a a un 43%), respectivamente. Adem¨¢s, el ex alcalde de la ciudad de La Paz, Luis Revilla, de SOL.bo, obtuvo un 55% y puso la capital boliviana fuera del alcance del MAS, que logr¨® un 43%.
Tanto Chapet¨®n como Patzi son descendientes directos de ind¨ªgenas aimaras, pero en esta elecci¨®n corrieron con las banderas de la oposici¨®n y dieron la gran sorpresa. Patzi comenz¨® su carrera pol¨ªtica en el MAS: ocup¨® el cargo de ministro de Educaci¨®n de Morales entre 2006 y 2007, pero en 2010 fue expulsado de su partido por indisciplina. A estas elecciones concurri¨® en alianza con SOL.bo, que agrupa a otros antiguos aliados del oficialismo.
Soledad Chapet¨®n, de 34 a?os, es la mejor carta de Samuel Doria Medina, el empresario que sali¨® segundo en las elecciones presidenciales del a?o pasado, lejos de Evo Morales. ¡°Se inicia una nueva etapa pol¨ªtica en el pa¨ªs; la gente comenz¨® a cansarse del MAS, su arbitrariedad y su corrupci¨®n¡±, declar¨® a este peri¨®dico un alegre Doria Medina poco despu¨¦s de que el conteo preliminar diera la victoria de su candidata. Record¨® que ¡°Soledad (Chapet¨®n) gan¨® pese a las amenazas que hizo el Gobierno a la gente para que no votara por ella¡±, refiri¨¦ndose a la reiterada advertencia del presidente Morales en sentido de que el Gobierno no trabajar¨¢ con el municipio de El Alto si este ca¨ªa en manos de ¡°la derecha¡±.
El vicepresidente ?lvaro Garc¨ªa Linera se anticip¨®, la ma?ana de la votaci¨®n, a desaconsejar que se sacara conclusiones inadecuadas de los resultados electorales, pues en las anteriores elecciones subnacionales de 2010 el MAS baj¨® 1,5 millones de votos respecto de las presidenciales del a?o precedente, y sin embargo esto no cambi¨® el predominio de este partido sobre el pa¨ªs en el ¨²ltimo lustro.
Dos de los protagonistas de la jornada son descendientes directos de ind¨ªgenas aimaras que han competido por la oposici¨®n
Las elecciones bolivianas fueron empa?adas por la ejecuci¨®n, hace 10 d¨ªas, de una sanci¨®n de inhabilitaci¨®n contra un partido regional que era el favorito para ganar la gobernaci¨®n del Beni, por haber difundido una encuesta prelectoral no autorizada. Esta sanci¨®n ¡ªsin precedentes en la historia democr¨¢tica del pa¨ªs¡ª fue introducida por una ley electoral que ahora la oposici¨®n llama inconstitucional, pero que en su momento no denunci¨® ante los tribunales competentes. Adem¨¢s de protestar nacional e internacionalmente, el partido eliminado hace apenas 10 d¨ªas lleg¨® a un acuerdo de ¨²ltimo momento con la agrupaci¨®n local NACER, que gracias a este espaldarazo obtuvo el segundo lugar, con un 33%, mientras el partido de Gobierno qued¨® adelante con un 38%. Sin embargo, como nadie logr¨® la mayor¨ªa absoluta, la legislaci¨®n exige que se organice una segunda vuelta.
Otro importante opositor, Rub¨¦n Costas, fue reelecto sin inconvenientes como gobernador de la regi¨®n m¨¢s pr¨®spera del pa¨ªs, Santa Cruz, que desde 2006 ha sido la plaza fuerte de la oposici¨®n, pese a lo cual Evo gan¨® en ella en las presidenciales.
El presidente Morales no envi¨® su habitual mensaje al pa¨ªs al conocerse los resultados
El hecho de que el MAS no hubiera arrasado en estas elecciones, como era la costumbre, y de que la oposici¨®n hubiera ganado algunas posiciones clave, se manifest¨® en la ausencia al final de la jornada de Evo Morales, quien no dirigi¨® su usual mensaje al pa¨ªs. En su lugar compareci¨® ante los medios el vicepresidente ?lvaro Garc¨ªa Linera, el cual reconoci¨® que la poblaci¨®n no hab¨ªa acompa?ado a algunos de los candidatos oficialistas, pero lo atribuy¨® a la ¡°falta de liderazgos locales¡±, al mismo tiempo que subray¨® los aspectos positivos de las elecciones para el MAS: su presencia en todos los municipios del pa¨ªs, su calidad de ¨²nica fuerza pol¨ªtica de car¨¢cter verdaderamente nacional, en contraste una oposici¨®n ¡°fragmentada¡±, la mayor¨ªa que obtuvo en los parlamentos regionales, aun en los lugares donde sus candidatos a cargos ejecutivos perdieron.
¡°Esto muestra que la poblaci¨®n acompa?a el proyecto, pero no estuvo de acuerdo con los candidatos que propusimos¡±, razon¨®. En opini¨®n de Garc¨ªa Linera, el resultado electoral no pone en riesgo la orientaci¨®n pol¨ªtica y econ¨®mica del pa¨ªs, ya que ¨¦sta qued¨® definida en las elecciones presidenciales de octubre de 2014, mientras estos comicios solo sirvieron para ventilar qu¨¦ l¨ªderes deber¨¢n ejecutar, en el nivel local, las l¨ªneas directrices ya establecidas.
Los comicios se realizaron sin incidentes graves y con una gran participaci¨®n de la poblaci¨®n, lo que es tradicional en Bolivia. Tambi¨¦n cumple con la tradici¨®n el que no se vaya a conocer los resultados oficiales hasta d¨ªas despu¨¦s de la votaci¨®n, lo que en este caso, sin embargo, puede resultar m¨¢s riesgoso que antes, ya que la oposici¨®n no conf¨ªa en el Tribunal Electoral, que fue elegido por la mayor¨ªa parlamentaria y no ha sabido administrar bien los conflictos, en especial la sanci¨®n mencionada en el Beni; tambi¨¦n ha cometido peque?os desaciertos desconcertantes, que levantaron olas de cr¨ªticas, como escribir ¡°botaremos¡± en un tuit oficial.
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