Cumbres de Panam¨¢: De 1956 a 2015
En 59 a?os las cosas han variado poco. Se mantiene en el olvido la relaci¨®n que Estados Unidos demuestra con el continente
Se dijo de la Reuni¨®n Presidencial de julio de 1956 en Panam¨¢ que, por lo concurrida, dif¨ªcilmente ser¨ªa superada en el futuro. De los 21 pa¨ªses americanos en aquel momento s¨®lo dos se ausentaron, Honduras y Colombia, presidida por el dictador General Gustavo Rojas Pinilla, aunque ambos a posteriori firmaron lo inocuo que all¨ª se acord¨®. Tiempos pasados.
A instancias del presidente de Estados Unidos, Dwight Eisenhower, el condecorado general de la II Guerra Mundial, se celebr¨® en julio de 1956 en la capital paname?a, al igual que ocurrir¨¢ en la Cumbre de las Am¨¦ricas el 10 y 11 de abril pr¨®ximos, un c¨®nclave que reuni¨® a los mandatarios de todo el continente, esta vez con 35 en lugar de 21 como en el 56. Los norteamericanos quer¨ªan jugar un papel diferente para con la abandonada Latinoam¨¦rica y mejorar su imagen global frente a Europa.
En la Declaraci¨®n de Panam¨¢ se dijo que ¡°su objetivo era fortalecer la paz, la seguridad y consolidar la democracia¡±. El sentido de ¡°democracia¡± en aquella ¨¦poca, gobernada mayoritariamente por militares, era ser anticomunista. Como dijera un dirigente norteamericano, ¡°we know Somoza is a son of a b¡¡±, but is our son of a b¡¡±, ("Sabemos que Somoza es un hijo de... Pero es nuestro hijo de...", en ingl¨¦s) algo aplicable a otros de los que en el 56 se dieron cita en Panam¨¢.
Adem¨¢s de Rojas Pinilla, la legi¨®n anticomunista estaba representada por Pedro Aramburu de Argentina, Fulgencio Batista de Cuba, Carlos Ib¨¢?ez de Chile, H¨¦ctor Trujillo (hermano de Rafael Le¨®nidas) de Rep¨²blica Dominicana, Alfredo Stroessner de Paraguay, Jos¨¦ Mar¨ªa Lemus de El Salvador, Carlos Castillo Armas de Guatemala, Venezuela con Marcos P¨¦rez Jim¨¦nez y Nicaragua con Anastasio ¡°Tacho¡± Somoza Garc¨ªa. S¨®lo Ecuador con Jos¨¦ Mar¨ªa Velasco Ibarra, Hait¨ª con Paul Maglorie, M¨¦xico con Adolfo Ruiz Cort¨ªnez (de la longeva dictadura de 60 a?os del PRI), Uruguay con Alberto Zubir¨ªa, Costa Rica con Jos¨¦ Mar¨ªa Figueres Ferrer (antimilitarista que asisti¨® por ser Eisenhower quien convocaba), Hern¨¢n Siles Suazo, el presidente electo de Bolivia, Manuel Prado de Per¨² y Juscelino Kubistchek del Brasil, representaban a los que mediante el voto popular hab¨ªan llegado al poder.
Panam¨¢ estuvo representado por Ricardo Manuel Arias Espinosa, quien asumi¨® el cargo tras el asesinato el a?o anterior del Presidente Rem¨®n y la destituci¨®n de quien reemplaz¨® al Coronel Rem¨®n, Jos¨¦ Ram¨®n Guizado, infamia ¨¦sta a la que se opuso, entre otros 7 diputados, Plinio Varela Arjona, t¨ªo del actual Presidente de Panam¨¢ Juan Carlos Varela.
Con excepci¨®n de la isla caribe?a ya no quedan militares el poder, aunque s¨ª mandatarios que vestidos de elecciones peri¨®dicas se arropan con trajes democr¨¢ticos
En 59 a?os las cosas han variado poco. Se mantiene en el olvido la relaci¨®n que los Estados Unidos demuestran para sus vecinos del continente. La lucha anticomunista termin¨®, aunque todav¨ªa queda Cuba, que ahora se reincorpora a Latinoam¨¦rica y sirve de escenario para el relanzamiento de su nueva relaci¨®n con Estados Unidos luego de m¨¢s de medio siglo de alejamiento y el efecto positivo que tal acci¨®n ha merecido para el presidente Obama. Con excepci¨®n de la isla caribe?a ya no quedan militares el poder, aunque s¨ª mandatarios que vestidos de elecciones peri¨®dicas se arropan con trajes democr¨¢ticos, hechos a su medida trav¨¦s de las cada vez m¨¢s comunes reelecciones: Venezuela, Bolivia, Brasil, Ecuador, Argentina y Nicaragua y por supuesto Cuba, con sus elecciones donde s¨®lo participa el partido oficial. Adem¨¢s, que cada uno nos habla de alguna nueva forma de socialismo, que parece que ni ellos logran entender, y que doy por llamar ¡°verde¡± por el color del d¨®lar que les encanta a sus diferentes l¨ªderes. En el fondo cada vez se asemejan a reg¨ªmenes totalitarios por su intolerancia.
Los tiempos no han cambiado mucho. Antes todos marchaban al son que le tocara Estados Unidos. Ahora son varias las orquestas, hasta con ininteligibles idiomas que escuchan los hoy acomodaticios anti imperialistas yanquis. Antes eran militares corruptos y abusivos; ahora son civiles y militares que se enriquecen con la corrupci¨®n y siguen violentando los derechos humanos y pol¨ªticos, eso s¨ª, m¨¢s conocidos que antes por la cantidad multiplicada que tenemos hoy de medios de comunicaci¨®n.
Los males contin¨²an en nuestras subdesarrolladas sociedades, antes dominadas por militares pro gringos y hoy subyugadas por particular¨ªsimos dem¨®cratas. Con excepci¨®n de pocos como Costa Rica, Chile, Uruguay, Panam¨¢ y otros pocos, se hacen esfuerzos para apuntalar nuestros d¨¦biles sistemas democr¨¢ticos.
La VII Cumbre en Panam¨¢, cuya idea suger¨ª en 2012 cuando era Embajador de Panam¨¢ ante la Organizaci¨®n de Estados Unidos de Am¨¦rica servir¨¢ para que, al igual que en 1956, los presidentes se conozcan personalmente, aunque Obama evite saludar a Maduro que dudo que venga, degusten la excelente comida paname?a, visiten el majestuoso Canal de Panam¨¢, disfruten de los preciosos bailes t¨ªpicos de nuestro pueblo y admiren la belleza de la mujer paname?a. Pensar en algo m¨¢s, ser¨ªa totalmente ilusorio.
Guillermo Cochez fue Embajador de Panam¨¢ ante la OEA de Julio de 2009 a enero de2013. gcochez@cableonda.net
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