Valls aprueba de nuevo por decreto la ley liberalizadora de la econom¨ªa
La divisi¨®n entre los socialistas estalla al impedir el Gobierno que el Parlamento vote
Manuel Valls, primer ministro franc¨¦s, ha echado mano de nuevo del arma nuclear constitucional que le permite aprobar una ley sin que la vote el Parlamento. Con su golpe de autoridad, ha puesto de relieve una vez m¨¢s la profunda divisi¨®n entre los socialistas. La pol¨¦mica ley de liberalizaci¨®n de la econom¨ªa, conocida como Ley Macron, entrar¨¢ en vigor por esa v¨ªa r¨¢pida en julio ante el peligro de no contar con suficientes apoyos debido al rechazo de varias decenas de diputados socialistas rebeldes.
El jefe del Gobierno ya emple¨® el mismo m¨¦todo el pasado febrero por id¨¦nticas razones? en el primer debate del texto en la Asamblea Nacional. Ahora, su decisi¨®n reviste especial significado por dos razones. La ley ha incluido en un tiempo r¨¦cord la semana pasada los l¨ªmites para indemnizar a trabajadores despedidos, un hecho que ha enervado a los rebeldes. Y, en segundo lugar, Valls interviene as¨ª solo nueve d¨ªas despu¨¦s de que el Partido Socialista escenificara en su Congreso de Poitiers una ficticia unidad en sus filas.
Con m¨¢s de la mitad de la Asamblea vac¨ªa, por el boicoteo de todos los partidos de la oposici¨®n, Valls ha explicado que esa ley es ¡°esencial¡± para Francia. ¡°No nos podemos permitir un fracaso. Debemos acelerar el ritmo de las reformas¡±. Para el primer ministro, el pa¨ªs ¡°es v¨ªctima de bloqueos¡± que frenan su actividad y la creaci¨®n de empleo. Horas antes de la sesi¨®n parlamentaria, Valls hab¨ªa argumentado que su gesto no es un golpe de autoridad, sino de ¡°eficacia a favor de la econom¨ªa y de las empresas¡±.
El jefe del Gobierno ha recordado que, desde que el proyecto de ley lleg¨® al Parlamento en enero, el texto ha sido debatido durante 437 horas y que se han incorporado al mismo m¨¢s de 2.000 enmiendas. ¡°Los franceses nos piden ahora actuar¡±.
Los diputados socialistas rebeldes han vuelto a mostrar su hostilidad hacia Valls. ¡°Se aleja de la izquierda¡±, dice Christian Paul, el diputado que encabez¨® una corriente alternativa minoritaria en el Congreso.
La oposici¨®n anuncia una moci¨®n de censura contra el jefe del Gobierno tras boicotear su intervenci¨®n en el Parlamento
M¨¢s duros han sido los parlamentarios del principal partido de la oposici¨®n, Los Republicanos de Nicolas Sarkozy. ¡°El texto ser¨¢ adoptado sin ning¨²n respeto a la democracia¡±, ha dicho G¨¦rard Cherpion, secretario general de Empleo del partido. Durante el quinquenio de Sarkozy (2007-2012), no se utiliz¨® nunca ese procedimiento extraordinario, que se ha activado 83 veces durante la V Rep¨²blica, nacida en 1958.
La oposici¨®n dispone ahora de 24 horas para presentar una moci¨®n de censura contra el primer ministro. Ya han anunciado que lo har¨¢n este mismo martes. Ser¨¢ votada de inmediato. Es el mismo proceso seguido en febrero, cuando la moci¨®n obtuvo 234 votos, lejos de los 289 para la requerida mayor¨ªa absoluta. Los socialistas tienen 288 esca?os. Los Republicanos, 198. Solo si la moci¨®n saliera adelante, algo muy improbable porque no lo apoyar¨¢ ning¨²n socialista, quedar¨ªa anulado el decreto de Valls.
Con el paso dado este martes por Valls, decaen cientos de enmiendas presentadas por la oposici¨®n. Por procedimiento de urgencia, por el contrario, se han a?adido otras propuestas por el Gobierno, como el l¨ªmite a las indemnizaciones por despido: 12 mensualidades, 20 o 27, en empresas con plantillas de menos de 20 asalariados, entre 20 y 300 y m¨¢s de 300, respectivamente.
La Ley Macron, as¨ª denominada porque su autor es el ministro Enmanuel Macron, titular de Econom¨ªa, prev¨¦ ampliar de 5 a 12 los domingos de apertura de comercios (o todos en zonas tur¨ªsticas), facilitar la creaci¨®n de empresas de autocares, abrir a la competencia las profesiones reguladas como notarios, mejorar la fiscalidad de inversiones de empleados en sus empresas, ampliar la cobertura de Internet a toda Francia o agilizar la concesi¨®n de permisos de conducir.
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