El Lago Chad, nuevo refugio de la milicia Boko Haram
La presencia de los radicales islamistas provoca una situaci¨®n de emergencia en la regi¨®n
Los s¨¢bados son d¨ªa de mercado en Bagasola, un pueblo de 26.000 habitantes que se asoma al lago Chad. Junto a la orilla, donde reposan l¨¢nguidamente decenas de piraguas, Mahatma Hassan se toma un respiro apoyado en unos enormes sacos de pescado ahumado. Desde hace m¨¢s de veinte a?os se dedica al comercio a trav¨¦s de estas aguas, como su padre y el padre de su padre. ¡°No s¨¦ cu¨¢nto vamos a aguantar as¨ª. Antes tard¨¢bamos tres d¨ªas en cruzar de Nigeria a Chad con la mercanc¨ªa, ahora tenemos que dar un rodeo enorme y tardamos 23. La p¨¦rdida de tiempo y el gasto de combustible nos est¨¢n generando muchas p¨¦rdidas¡±, asegura. Las orillas y las islas de este lago se han convertido en el ¨²ltimo refugio de la milicia Boko Haram. Y su presencia no solo perturba a la pesca, el comercio y la agricultura, adem¨¢s est¨¢ provocando una emergencia en toda la regi¨®n.
¡°Muchos han cerrado sus tiendas¡±, explica Abdelkarin Moussa, representante local de los comerciantes. ¡°Sin paz no es posible que haya comercio¡±, lamenta. De Maiduguri, en Nigeria, proceden el 60% de los bienes que se consumen en Chad: material electr¨®nico, alfombras, teteras, az¨²car, frutas, verduras; y su ruta natural es a trav¨¦s del lago. Sin embargo, la frontera ha sido cerrada a causa de la violencia. ¡°Muchas ciudades del lado nigeriano con las que comerci¨¢bamos han sido arrasadas, sin paz no puede haber prosperidad¡±, a?ade.
El ¨²ltimo ejemplo tuvo lugar el pasado mi¨¦rcoles por la noche. Tras la ruptura del ayuno de Ramad¨¢n, cientos de fieles acudieron a las cuatro mezquitas de la poblaci¨®n de Kukawa (Nigeria), cercana al lago. De repente, unos 50 hombres irrumpieron en el pueblo con sus fusiles y dispararon contra la poblaci¨®n. Murieron un centenar de personas, seg¨²n el relato de varios supervivientes. ¡°S¨®lo Dios sabe lo que quiere esta gente, matan, destrozan todo e impiden que haya comercio, no lo entiendo¡±, remata Moussa.
Hace unos meses, los terroristas lanzaron una ofensiva a bordo de piraguas a s¨®lo 15 kil¨®metros de Bagasola, en la isla de Ngouboua, lo que provoc¨® un nuevo ¨¦xodo de personas hacia el campo de refugiados de Dar Es Salam, donde unas 7.200 personas se refugian de la violencia. Cada d¨ªa llegan all¨ª nuevos desplazados. ¡°Tenemos margen hasta las 15.000 personas, y es seguro que alcanzaremos esa cifra¡±, explica Mahamat Talur Adam, responsable local de la Comisi¨®n Nacional de Acogida y Reinserci¨®n de Refugiados y Repatriados. En las pr¨®ximas semanas, cuenta, evacuar¨¢n a poblaci¨®n de varias islas, como Kaiga y Kinderia donde ya hay unos 3.000 refugiados, para llevarlos a Dar Es Salam.
Y es que como ya hiciera N¨ªger en febrero, el Gobierno chadiano est¨¢ forzando a la poblaci¨®n civil a abandonar las islas. La raz¨®n es que la Fuerza Militar Conjunta contra Boko Haram ¡ªintegrada por los cuatro pa¨ªses ribere?os, Chad, Nigeria, N¨ªger y Camer¨²n¡ª prepara una amplia ofensiva en las islas para este verano. La progresiva desecaci¨®n del lago a causa del cambio clim¨¢tico y el incremento de la presi¨®n humana sobre los recursos h¨ªdricos han convertido buena parte del antiguo lago en un d¨¦dalo de islas donde decenas de miles de personas viven de la pesca y la agricultura, pero tambi¨¦n ideal como ¨²ltimo refugio para los terroristas, que han tenido que abandonar sus bases originales en los estados de Borno, Yobe y Adamawa, como el bosque de Sambisa o las monta?as fronterizas con Camer¨²n, hostigados desde hace cuatro meses por el Ej¨¦rcito nigeriano.
Los campos de ma¨ªz de la zona de Tchoukoutalia, hace a?os cubierta por las aguas y hoy una de las tierras m¨¢s f¨¦rtiles de Chad, suministran la base de la alimentaci¨®n a los habitantes del lago y son uno de los graneros del pa¨ªs. Sin embargo, hoy est¨¢n pr¨¢cticamente abandonadas pues se encuentran m¨¢s all¨¢ de la l¨ªnea roja, al alcance de los ataques de Boko Haram. ¡°Las tres regiones que dependen del Lago para vivir, Lac, Kanem y Barh El Gazal, han sido declaradas en situaci¨®n de emergencia alimentaria desde hace dos meses¡±, destaca Bruno Maes, representante de Unicef en Chad. La malnutrici¨®n ha aumentado un 35% en el primer cuarto de 2015 y la elevada presencia de refugiados y desplazados procedentes de Nigeria ¡ªunos 55.000¡ª supone una presi¨®n a?adida sobre los recursos.
Una superficie que merma
En 1964, el Lago Chad ten¨ªa una superficie de agua de 25.000 km2. En 2009, hab¨ªa descendido a 2.500 km2. El incremento global de la temperatura, que en esta zona alcanza una media anual de 37 grados, unido a la escasa profundidad de sus aguas (lo que facilita una mayor evaporaci¨®n) y al aumento de la presi¨®n humana sobre los recursos h¨ªdricos por la fuerte inmigraci¨®n est¨¢n detr¨¢s de esta desecaci¨®n acelerada que ha dividido el lago, cuyo principal tributario es el r¨ªo Chari. Sin embargo, la cubeta norte se ha recuperado en los ¨²ltimos cinco a?os, as¨ª como la vegetaci¨®n que la rodea, lo que ha permitido que en la actualidad el Lago tenga unos 14.000 kil¨®metros cuadrados de superficie.
¡°Las fluctuaciones entre estaciones y de un a?o a otro son enormes¡±, asegura Sanusi Imran Abdullahi, secretario ejecutivo de la Comisi¨®n de la Cuenca del Lago Chad, que integra a los cuatro pa¨ªses ribere?os. En la actualidad existe un proyecto para tratar de salvar lo que queda del Lago, un gigantesco trasvase de agua desde el r¨ªo Ubangui, en la Rep¨²blica Centroafricana, que ha generado no pocas cr¨ªticas.
¡°Decenas de miles de personas han llegado de pa¨ªses como Senegal, Mal¨ª, Congo y otros han llegado hasta aqu¨ª para buscar un futuro mejor, porque hay agua, pasto para los animales, buena tierra; unos 30 millones de personas dependen del Lago y sus recursos, nuestra obligaci¨®n es salvar este espacio¡±, asegura Abdullahi.
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