La extradici¨®n que no fue

Antes de fugarse este s¨¢bado de prisi¨®n por segunda vez, Joaqu¨ªn El Chapo Guzm¨¢n estuvo 16 meses en la c¨¢rcel del Altiplano, considerara de m¨¢xima seguridad. Ese tiempo fue suficiente para que el Estado mexicano tramitara su extradici¨®n a Estados Unidos, pero el Gobierno de Enrique Pe?a Nieto no quiso hacerlo. El regreso del PRI dio un giro a la pol¨ªtica de intercambio de presos que M¨¦xico tiene con su vecino del norte. El env¨ªo de importantes capos del narcotr¨¢fico se redujo sustancialmente despu¨¦s de haber conseguido m¨¢ximos hist¨®ricos durante el sexenio de Felipe Calder¨®n, el presidente que declar¨® la guerra a la delincuencia organizada.

En enero de este a?o el procurador (fiscal) Jes¨²s Murillo Karam reconoci¨® que sab¨ªa de manera "extrainformal¡± que Washington preparaba el tr¨¢mite ante la secretar¨ªa de Relaciones Exteriores para reclamar al capo del C¨¢rtel de Sinaloa. Sus declaraciones motivaron una ofensiva del equipo legal del Chapo, que consigui¨® un amparo para frenar una extradici¨®n que nunca existi¨®.

El Chapo aparece en sumarios judiciales en al menos seis cortes federales de Estados Unidos. Una de ellas en Chicago, una ciudad que lo ha declarado enemigo p¨²blico n¨²mero uno y que le acusa de importar dos toneladas de coca¨ªna al mes. Tambi¨¦n se cree que es responsable de blanquear 14.000 millones de d¨®lares a trav¨¦s de centenares de empresas.

El Chapo se tiene que quedar aqu¨ª a cumplir su condena y despu¨¦s lo extradito. Unos 300-400 a?os despu¨¦s
Jes¨²s Murillo Karam, exfiscal general?

¡°M¨¦xico no est¨¢ obligado a mandarlo y tampoco se puede exigir una extradici¨®n porque se invade la soberan¨ªa del juez¡±, se?ala Gilberto Santa Rita, catedr¨¢tico de Derecho en la Universidad Iberoamericana. El acad¨¦mico se?ala que el tema de las extradiciones no es estrictamente judicial, sino que roza la esfera pol¨ªtica.

Washington no vio en M¨¦xico voluntad para mandar a Guzm¨¢n al extranjero. Murillo, antes de dejar el cargo en febrero de este a?o, hab¨ªa dicho p¨²blicamente que esperaba que el narcotraficante terminara de pagar la sentencia de 20 a?os que qued¨® interrumpida por su fuga en 2001. "Yo puedo aceptar la extradici¨®n, pero en el momento en que yo diga. El Chapo se tiene que quedar aqu¨ª a cumplir su condena y despu¨¦s lo extradito. Unos 300-400 a?os despu¨¦s. Falta mucho", dijo el fiscal, que dej¨® el cargo en febrero de este a?o.

En los dos primeros a?os del Gobierno de Pe?a Nieto fueron extraditadas 133 personas, solo 45 fueron enviadas al norte por delitos contra la salud. La cifra representa una disminuci¨®n comparada a los dos ¨²ltimos a?os del presidente Felipe Calder¨®n (188 personas, 55 reos m¨¢s). La Administraci¨®n del PRI solo ha extraditado a dos altos mandos del narcotr¨¢fico. El primero fue Iv¨¢n Vel¨¢zquez Caballero, de Los Zetas, en noviembre de 2013. Conocido como El Talib¨¢n, fue enviado a una corte de Texas que lo acus¨® de 47 cargos criminales. Pas¨® un a?o para que otro capo cambiara las c¨¢rceles mexicanas por las de Estados Unidos. Alfredo Beltr¨¢n Leyva, conocido como El Mochomo, hab¨ªa sido capturado en 2008, pero fue hasta noviembre de 2014 que compareci¨® frente a un juzgado del Distrito de Columbia, en Washington. El jefe de una organizaci¨®n que se escindi¨® del c¨¢rtel de Sinaloa fue acusado de importar toneladas de coca¨ªna y metanfetaminas.

La Administraci¨®n de Pe?a Nieto opt¨® por la soberan¨ªa y el orgullo que significaba cuidar al criminal m¨¢s importante del pa¨ªs. Esperaba que cumpliera su condena en M¨¦xico antes de enviarlo a Estados Unidos para que fuera juzgado. Imaginaban una custodia compartida que durar¨ªa d¨¦cadas. "Pensaron que se iba a morir en la c¨¢rcel", dice Santa Rita. "Si hubiese habido voluntad, un a?o es un tiempo razonable para haber tramitado la extradici¨®n¡±, afirma. No la hubo. El Chapo est¨¢ nuevamente en libertad.