Rousseff reconfigura su gabinete ante la presi¨®n de sus aliados

Enredada en una crisis sin tregua, la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, ha cedido ante sus inestables aliados y su mentor, el expresidente Luis In¨¢cio Lula da Silva. Esta semana la mandataria ha comenzado una serie de cambios en su gabinete a los que ni su fiel escudero, el petista Aloizio Mercadante, ha logrado sobrevivir. Despu¨¦s de meses de presi¨®n y de discusiones casi p¨²blicas con Lula, Mercadante ha dejado el poderoso puesto de jefe de gabinete. Se le ha ofrecido una salida con honor: volver al Ministerio de Educaci¨®n, en el que estuvo en la legislatura anterior.

El objetivo de este movimiento es dejar el puesto m¨¢s cercano a la presidenta a alguien menos odiado en la base del Gobierno, sobre todo en el PMDB, el partido al que pertenecen el vicepresidente y los presidentes del Senado y de la C¨¢mara.

Nada es oficial en una Brasilia inmersa en una tensi¨®n constante. Pero todo apunta a que el nuevo jefe de gabinete ser¨¢ Jaques Wagner, actual ministro de Defensa. Wagner pertenece al Partido de los Trabajadores (PT), como Mercadante, pero siempre ha sido m¨¢s cercano a Lula. Por la ma?ana, cuando sal¨ªa de una audiencia en la C¨¢mara de los Diputados, Wagner dijo que no hab¨ªa sido invitado a reemplazar a Mercadante, pero que si lo fuese aceptar¨ªa. ¡°Formo parte de este proyecto. Y voy a seguir ayudando en lo que pueda¡±, coment¨®. Mientras tanto, Mercadante dijo a algunos interlocutores que se sinti¨® molesto con el relevo y que lo entendi¨® como una rebaja de sus funciones.

La danza de sillas involucra otros puestos y tiene la intenci¨®n de favorecer al PMDB y a otros aliados en la lucha para resistir las tentativas de impugnaci¨®n (impeachment) de la presidenta en el Congreso. Pero no es un proceso sin dolor: los cambios disgustan a la propia base de apoyo petista. Rousseff ha sacado del cargo, por ejemplo, al respetado ministro de Salud del PT. Esta oficina es la que tiene el mayor presupuesto entre los ministerios del Gobierno. El presupuesto ir¨¢ a las manos de un aliado que no es necesariamiente uno que tenga compromiso con el enorme sistema p¨²blico de salud de Brasil, el mayor del mundo.

Otros ministros tambi¨¦n respetados en sus ¨¢reas y fuera de la ri?a pol¨ªtica tambi¨¦n han dejado sus puestos: Mangabeira Unger, de Asuntos Estrat¨¦gicos, y el profesor de ¨¦tica Renato Janine, un nombre aclamado por sus pares, ha dejado Educaci¨®n.

Lo que no ha quedado claro hasta ahora es si la presidenta, con tantos intereses a atender, va a conseguir cumplir su promesa de reducir el n¨²mero de ministerios. La idea original era recortar diez puestos para enviar el mensaje de que est¨¢ dispuesta a "cortar en carne propia" en un momento de ajustes y crisis.

El d¨ªa no ha terminado para Rousseff sin una nota casi c¨®mica. Mientras arreglaba la situaci¨®n con sus aliados, su doble en internet, Dilma Bolada ¡ªun c¨®mico con un perfil en Twitter¡ª, caus¨® revuelo hasta convertirse en tendencia mundial. El personaje, que le ayud¨® durante la campa?a y que presuntamente recibe una paga del Gobierno, ha anunciado su "renuncia": no apoyar¨¢ m¨¢s la presidenta. Su mensaje en las redes ha sido ¨¢cido: "No hay m¨¢s ideolog¨ªa, izquierda, progresismo. Solo hay una subasta de puestos en el Gobierno".