Rusia estrecha lazos con Siria para afirmarse como potencia global
El Asad viaja por primera vez al extranjero desde que comenz¨® la guerra en 2011
Con su creciente implicaci¨®n b¨¦lica en Siria, Rusia trabaja para recuperar la posici¨®n de potencia global, tanto pol¨ªtica como militar, que ocup¨® la Uni¨®n Sovi¨¦tica durante la Guerra Fr¨ªa. La visita rel¨¢mpago y no anunciada del presidente sirio Bachar el Asad el martes a Mosc¨², invitado por su colega Vlad¨ªmir Putin, parece indicar una intensificaci¨®n de las relaciones entre el Kremlin y el r¨¦gimen sirio, algo que inquieta especialmente a Turqu¨ªa. En la ma?ana de este mi¨¦rcoles, Putin coment¨® los resultados de la visita del dirigente sirio en una conversaci¨®n telef¨®nica con su colega turco, Recep Tayyip Erdogan.
¡°Siria es un pa¨ªs amigo nuestro. Estamos dispuestos a contribuir con lo que podamos no solo en el curso de las acciones militares en la lucha contra el terrorismo, sino en el curso del proceso pol¨ªtico. Por supuesto, en estrecho contacto con otras potencias mundiales y con los pa¨ªses de la regi¨®n que est¨¦n interesados en la resoluci¨®n pac¨ªfica del conflicto¡±, dijo Putin a El Asad, seg¨²n la informaci¨®n oficial difundida el mi¨¦rcoles por la ma?ana, cuando el presidente sirio ya estaba de vuelta en Damasco. La visita fue la primera salida oficial al extranjero del l¨ªder sirio desde que comenz¨® la guerra en 2011.
Poco se sabe en Mosc¨² sobre la duraci¨®n prevista de la operaci¨®n militar rusa, en la que ha intervenido tanto la aviaci¨®n como la flotilla del Caspio (en colaboraci¨®n con Ir¨¢n). Tampoco se sabe cu¨¢l es el coste de la empresa, que permite mostrar armamento y rodar a los militares rusos, ni c¨®mo se reflejar¨¢ ¨¦sta en la situaci¨®n econ¨®mica de Rusia, afectada por el descenso de los precios del petr¨®leo y las sanciones internacionales. Los costes de los ataques a¨¦reos rusos en Siria son de cuatro millones de d¨®lares (3,5 millones de euros) por d¨ªa, seg¨²n un c¨¢lculo realizado por el grupo de informaci¨®n de defensa y seguridad IHS Jane's, citado por el diario Moscow Times, editado en la capital rusa en lengua inglesa.
En el frente diplom¨¢tico, Rusia da muestras de gran actividad. Ma?ana jueves, una delegaci¨®n de parlamentarios rusos viaja a Damasco para entrevistarse con el presidente sirio y el viernes los ministros de exteriores de Rusia y EE UU se dan cita en Viena en una reuni¨®n a la que han sido invitados tambi¨¦n los responsables de Exteriores de Arabia Saud¨ª y Turqu¨ªa, seg¨²n inform¨® el Ministerio de Exteriores, citando una conversaci¨®n telef¨®nica entre Sergu¨¦i Lavrov y su colega norteamericano, John Kerry. El ministro ruso desea que el 23 de octubre se re¨²na adem¨¢s el cuarteto de interlocutores sobre la regulaci¨®n de Oriente Pr¨®ximo (Rusia, EE UU, UE y ONU).
Hasta el 30 de septiembre, cuando la aviaci¨®n rusa comenz¨® sus bombardeos sobre objetivos del Estado Isl¨¢mico (ISIS, en sus siglas inglesas) y otros grupos que Mosc¨² considera terroristas, el Kremlin hab¨ªa limitado sus intervenciones militares en el extranjero a pa¨ªses del vecino entorno postsovi¨¦tico, donde reivindica un papel de potencia regional con especiales derechos.
Al enviar la aviaci¨®n a Siria, Rusia ha vuelto de forma activa y b¨¦lica a espacios abandonados durante a?os a EE UU y sus aliados. En su retorno, Rusia act¨²a vinculada con los pa¨ªses vecinos de la zona, la misma Siria, Ir¨¢n e Irak, y al margen de Washington y sus aliados, aunque los intereses de estas dos constelaciones de jugadores se solapen en parte, en lo que se refiere a su oposici¨®n a los islamistas m¨¢s radicales.
El memorando firmado entre las instituciones de Defensa de EE UU y Rusia tiene por objeto evitar las interferencias m¨¢s all¨¢ de la zona en la que los intereses se solapan. Los funcionarios rusos tienden a caracterizar la relaci¨®n actual entre militares rusos y norteamericanos como un paso hacia una colaboraci¨®n bilateral m¨¢s sofisticada y compleja, pero los portavoces occidentales indican que no existe la confianza requerida para desarrollar la relaci¨®n.
En Mosc¨², Putin y El Asad se entrevistaron en solitario y tambi¨¦n en compa?¨ªa de los dos ministros claves de la pol¨ªtica internacional de Putin, Lavrov y Sergu¨¦i Shaig¨², de Defensa, este ¨²ltimo considerado un personaje clave en la operaci¨®n militar llevada a cabo en febrero y marzo de 2014 para asegurar la anexi¨®n de Crimea.
En el fragmento de la conversaci¨®n con El Asad difundido por el Kremlin, Putin se refiri¨® varias veces al ¡°terrorismo internacional¡±, pero en ning¨²n momento mencion¨® al ISIS como tal ni pronunci¨® la palabra ¡°islamista¡±. Dijo Putin que las actividades del ¡°terrorismo mundial¡± preocupan a Mosc¨² y afirm¨® que ¡°por lo menos 4.000¡± oriundos de las rep¨²blicas de la ex URSS combaten contra las tropas gubernamentales en Siria.
Las estimaciones sobre los combatientes de procedencia postsovi¨¦tica var¨ªan seg¨²n los momentos y las fuentes. Recientemente, en una cumbre de los pa¨ªses de la Confederaci¨®n de Estados Independientes (CEI) en Kazajist¨¢n, Putin estim¨® que los combatientes oscilaban entre 5.000 y 7.000, y a principios del verano las cifras que barajaban los servicios de seguridad rusos eran de 2.000 a 2.500. El argumento aducido por Putin para apoyar a Asad en Siria no var¨ªa, a saber, no permitir que estos combatientes entrenados y convenientemente mentalizados regresen a sus localidades de origen para atentar.
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