El Gobierno Argentino carga contra la Comisi¨®n de Derechos Humanos

El Gobierno argentino ha decidido mantener hasta el ¨²ltimo minuto su estilo agresivo. A pocas horas de las elecciones del domingo, y cuando ya rige en Argentina la veda electoral ¨Cprohibici¨®n de hacer ning¨²n tipo de campa?a- el Ejecutivo lanz¨® una acusaci¨®n dur¨ªsima contra un organismo respetado como la Comisi¨®n Interamericana de Derechos Humanos. En una nota oficial del ministro de Asuntos Exteriores, H¨¦ctor Timerman, el Gobierno argentino acusa a la Comisi¨®n de ¡°interferir en el proceso electoral¡± argentino y servir a los intereses de la oposici¨®n. El enfado del Ejecutivo de Cristina Fern¨¢ndez de Kirchner llega porque la Comisi¨®n decidi¨® tratar hoy una denuncia de algunas organizaciones de derechos humanos argentinas, como Poder Ciudadano, la secci¨®n de Amnist¨ªa Internacional en este pa¨ªs, en la que reclamaban que se estudie la situaci¨®n de independencia judicial en Argentina. El enfrentamiento del Gobierno con una parte de la justicia es frontal, y el ¨²ltimo episodio grave se vivi¨® en julio, cuando el juez Claudio Bonad¨ªo fue apartado de la causa Hotesur, que afecta directamente a la familia de la presidenta y a sus hoteles en El Calafate (Santa Cruz).

La nota de Timerman es cualquier cosa menos diplom¨¢tica. Se titula ¡°El Gobierno denuncia una operaci¨®n pol¨ªtico-medi¨¢tica contra el proceso electoral¡± y consiste en una acusaci¨®n directa contra la Comisi¨®n, de la que recuerda su papel activo contra la dictadura militar argentina (1976-1983). La visita de la Comisi¨®n a Argentina en 1979, recordada en la carta, fue especialmente simb¨®lica. ¡°Es penoso y lamentable concluir que la Comisi¨®n, que tanto ha hecho en su funci¨®n principal de promover la defensa de los derechos humanos durante las dictaduras c¨ªvico-militares que asolaron el continente, hoy no acompa?a con la misma sabidur¨ªa, convicci¨®n y criterio los procesos democr¨¢ticos en Am¨¦rica¡±, se?ala Timerman.

El Gobierno argentino se?ala que la audiencia general sobre ¡°Situaci¨®n de la independencia judicial en la Argentina¡± que se celebr¨® en la Comisi¨®n, y que esta se neg¨® a retrasar hasta despu¨¦s de las elecciones, ¡°fue una burda operaci¨®n pol¨ªtico-medi¨¢tica para interferir en el proceso electoral argentino orquestada por sectores vinculados a la oposici¨®n y al Grupo Clar¨ªn¡±. ¡°La Argentina ha rechazado la referida convocatoria a esa audiencia por considerarla inaceptable, inadmisible e improcedente. La Comisi¨®n tiene la obligaci¨®n de evaluar la seriedad tanto de la denuncia como de los denunciantes y no simplemente, como ocurre en este caso, deslindar la responsabilidad de rechazar una causa a todas luces inexistente¡±. Timerman explica ah¨ª que Argentina decidi¨® no participar en la sesi¨®n y exigi¨® sin ¨¦xito que se trasladara a una fecha posterior a las elecciones.¡±La Argentina ha participado en m¨¢s de 300 audiencias desde el a?o 2003 siendo ¨¦sta la primera vez que se ve obligada a no presentarse¡±, asegura.

¡°Es preocupante si los miembros de la Comisi¨®n no se han percatado de la clara direccionalidad pol¨ªtica de las asociaciones peticionantes y sus objetivos pol¨ªtico-medi¨¢ticos. Ser¨ªa muy grave si la Comisi¨®n decidi¨® a sabiendas igualmente participar de la operaci¨®n medi¨¢tica contra el gobierno argentino¡±, sigue la carta, en claro tono amenazante. Despu¨¦s, el Gobierno acusa a cada una de las organizaciones denunciantes -Poder Ciudadano, Asociaci¨®n por los Derechos Civiles, Unidos por la Justicia, CIPPEC- de trabajar para la oposici¨®n argentina.