Putin y Jamenei reafirman en Teher¨¢n su apoyo al r¨¦gimen sirio

Los esfuerzos diplom¨¢ticos para frenar la guerra en Siria se han intensificado este lunes con la visita del presidente ruso, Vlad¨ªmir Putin, a Teher¨¢n, y del secretario de Estado norteamericano, John Kerry, a Abu Dhabi. Putin, que ha sido recibido por el l¨ªder supremo iran¨ª, el ayatol¨¢ Ali Jamenei, espera su apoyo a la coalici¨®n internacional contra el Estado Isl¨¢mico (ISIS) que promueve Mosc¨² para salvar a Bachar el Asad, al que ambos respaldan. Mientras, al otro lado del golfo P¨¦rsico, Arabia Saud¨ª trata de reunir una conferencia de opositores sirios que constituyan una alternativa al dictador.

Putin y Jamenei han coincidido en que ¡°las potencias globales no pueden imponer su voluntad pol¨ªtica sobre Siria¡±, seg¨²n fuentes rusas citadas por los medios iran¨ªes. ¡°Cualquier soluci¨®n para Siria debe ser conocida y acordada por los sirios¡±, ha reiterado el l¨ªder iran¨ª, de acuerdo con un resumen difundido a trav¨¦s de su cuenta Twitter. Tambi¨¦n ha subrayado que ¡°el presidente sirio fue elegido¡± y que EE UU, a quien ha acusado ¡°intentar dominar Siria y toda la regi¨®n¡±, no puede ignorar el voto de la poblaci¨®n.

Por su parte, el presidente ruso, que ha viajado a Teher¨¢n para participar en el III Foro de los Pa¨ªses Exportadores de Gas, ha declarado m¨¢s tarde que los bombardeos de su pa¨ªs en Siria durar¨¢n ¡°lo que sea necesario para castigar a los responsables del atentado¡± contra el avi¨®n derribado el mes pasado sobre el Sina¨ª (Egipto) y en el que murieron 224 personas.

La ayuda de Ir¨¢n y Rusia ha permitido al r¨¦gimen de Damasco recuperar terreno frente a los rebeldes y los yihadistas que lo combaten. Sin embargo, no es tanto una alianza como un pacto de conveniencia. M¨¢s all¨¢ del recelo hist¨®rico por el apoyo que la entonces Uni¨®n Sovi¨¦tica prest¨® a Irak en su guerra contra la Rep¨²blica Isl¨¢mica (1980-1988), difieren tanto en sus intereses geogr¨¢ficos como en su estrategia. Mientras que para Mosc¨² lo esencial es el oeste de Siria, donde tiene la base naval de Tartus desde la que ahora bombardea a los enemigos de El Asad, para Teher¨¢n cuenta sobre todo el sur del pa¨ªs que le da acceso al Hezbol¨¢ liban¨¦s

Adem¨¢s, la Fuerza de Defensa Nacional (FDN) que los iran¨ªes han contribuido a formar constituye un potencial elemento de fricci¨®n. Esa milicia progubernamental, que sigue el patr¨®n que los iran¨ªes han utilizado antes en Irak y L¨ªbano, y que se inspira en su propia experiencia revolucionaria, va a la larga en detrimento del Ej¨¦rcito convencional, con el que los rusos mantienen relaciones estrechas desde hace d¨¦cadas. La FDN, que junto al Hezbol¨¢ liban¨¦s ha sido clave para frenar a los rebeldes, se ha convertido en una de las principales v¨ªas de influencia iran¨ª en Siria.

Por ahora, Rusia obvia esas diferencias, al menos en p¨²blico, con el objetivo de lograr esa gran coalici¨®n internacional contra el ISIS, aprovechando que el impacto psicol¨®gico y pol¨ªtico de los recientes atentados de Par¨ªs parece haber disminuido la oposici¨®n occidental a tolerar a El Asad, al menos de forma transitoria. De hecho, resulta significativo que Putin, adem¨¢s de regalar a Jamenei un Cor¨¢n manuscrito, haya hecho coincidir con visita el levantamiento de la prohibici¨®n de exportar material y tecnolog¨ªa nuclear a la Rep¨²blica Isl¨¢mica y el inicio de la entrega del sistema antimisiles S-300. Ambos asuntos estaban anunciados desde que Ir¨¢n firm¨® el pacto nuclear con las seis potencias el pasado julio.

Mosc¨² tambi¨¦n ha contribuido, seg¨²n fuentes diplom¨¢ticas, a que los dirigentes saud¨ªes aceptaran la presencia de Ir¨¢n en las conversaciones sobre el futuro pol¨ªtico de Siria. Al parecer, Putin les ha presentado su campa?a a¨¦rea como una forma de equilibrar la presencia iran¨ª sobre el terreno.

Riad, que apoya a algunos de los grupos sun¨ªes que combaten a El Asad, sigue mostr¨¢ndose reticente a la continuidad de este, ni si quiera por un periodo transitorio. Tras la primera reuni¨®n en la que particip¨® Ir¨¢n el pasado 30 de octubre, los medios de ese pa¨ªs dieron detallada informaci¨®n del tenso intercambio que mantuvo su ministro de Exteriores con el titular saud¨ª. Dos semanas despu¨¦s, y justo tras los ataques de Par¨ªs, la veintena de participantes en ese proceso se fijaron como objetivo lanzar unas conversaciones de paz y lograr un alto el fuego antes del pr¨®ximo 1 de enero. El reto ahora es identificar quienes van a participar en ellas.

En un intento de tomar la iniciativa, la diplomacia saud¨ª trata de organizar una conferencia de grupos opositores para mediados de diciembre, que elija a los representantes que deber¨¢n sentarse a negociar con El Asad. De ah¨ª que Kerry haya hecho una escala en Abu Dhabi para tantear la situaci¨®n con los responsables emirat¨ªes y con su hom¨®logo saud¨ª, Adel al Jubeir.