La UE ofrece incentivos a Turqu¨ªa si consigue frenar la salida de migrantes

Si hay un pa¨ªs emergente clave para la UE es Turqu¨ªa. Ankara y la Uni¨®n escenificar¨¢n ma?ana su nueva relaci¨®n, tras a?os de tiranteces, en plena crisis de refugiados y de seguridad. A la fuerza ahorcan: Turqu¨ªa tiene un papel clave por su situaci¨®n geogr¨¢fica, sistema pol¨ªtico, historia y cultura. Los Veintiocho le ofrecen 3.000 millones, adelantar un a?o la entrada en Schengen (adi¨®s a los visados) y reabrir la negociaci¨®n de adhesi¨®n a la UE. A cambio, quieren un compromiso en firme del Gobierno turco, muy difuso a d¨ªa de hoy, para taponar la marea de refugiados.

Turqu¨ªa y la UE firmaron su primer acuerdo de asociaci¨®n hace 50 a?os. Tras varios intentos fallidos, Ankara consigui¨® el estatus de candidato a la adhesi¨®n en 2004. En todos esos a?os la Uni¨®n no ha dejado de darle largas ante las dificultades que presenta un pa¨ªs que en unos pocos a?os ha pasado de ser pobre a estar entre las 20 primeras econom¨ªas del mundo, pero que a la vez ha sido incapaz de asimilar los est¨¢ndares occidentales en derechos civiles y que tiene contenciosos hist¨®ricos con Grecia y Chipre. En esas lleg¨® la crisis de refugiados, y ambas partes parecen haber desatascado el asunto, e incluso han decidido convocar una cumbre para escenificar su nueva relaci¨®n: Turqu¨ªa se sabe imprescindible para controlar la crisis de los refugiados, y quiere concesiones.

Los Veintiocho preparaban ayer un men¨² que incluye 3.000 millones de euros ¡°inicialmente¡± a cambio de su colaboraci¨®n; la posibilidad de que los turcos no necesiten visado para entrar en suelo europeo en octubre de 2016 ¡ªun a?o antes de lo previsto inicialmente¡ª, y la reapertura de las negociaciones de adhesi¨®n. Grecia y Chipre tratan de maniobrar para hacer m¨¢s difusas las posibilidades de Ankara de acercarse a la UE, ante los sempiternos conflictos entre esos pa¨ªses, especialmente en suelo chipriota. Pero Berl¨ªn considera a Turqu¨ªa una de las claves de b¨®veda imprescindibles para poner la crisis de refugiados en v¨ªas de soluci¨®n y presiona con toda su bater¨ªa diplom¨¢tica para que Atenas y Nicosia acepten esas medidas.

Ninguna de las concesiones llegar¨¢ gratis. El borrador de conclusiones de la cumbre es rotundo: a cambio de esas ventajas, Turqu¨ªa debe comprometerse a tomar medidas para mejorar la situaci¨®n socioecon¨®mica de los 2,3 millones de sirios, 400.000 iraqu¨ªes y 100.000 afganos que alberga. Deber¨¢ luchar contra las mafias de traficantes de personas, que usan los puertos del pa¨ªs para fletar grandes barcos. Y sobre todo tendr¨¢ que controlar sus fronteras, impedir la entrada de inmigrantes irregulares, devolver a los inmigrantes econ¨®micos y suscribir un acuerdo de readmisi¨®n al que se resiste: Turqu¨ªa debe comprometerse a readmitir y hacerse cargo de los inmigrantes que se demuestre que han entrado en Europa a trav¨¦s de ese pa¨ªs, algo que rechaza en estos momentos.

La cumbre se presume r¨¢pida: la reuni¨®n sobre el cambio clim¨¢tico de Par¨ªs reduce la posibilidad de que se alargue a la noche del domingo. Pero puede deparar sorpresas.

La canciller alemana, Angela Merkel, sorprendi¨® ayer con la convocatoria de una minicumbre previa, a la que en principio no est¨¢ invitada Espa?a y en la que s¨ª estar¨¢n al menos Holanda, Suecia, Austria, B¨¦lgica y Luxemburgo. Merkel quiere darle un arre¨®n a las negociaciones: pretende que esos pa¨ªses ¡ªy puede que Francia¡ª apoyen la posibilidad de que la Uni¨®n sea a¨²n m¨¢s generosa con Turqu¨ªa, siempre que Ankara cumpla sus compromisos. La canciller apunta alto. Si el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, colabora, propone un incremento sustancial del n¨²mero de asilados que Europa aceptar¨ªa en origen: desde los campos de refugiados turcos a los pa¨ªses de acogida, para evitar las mafias.

Nada de eso va a resultar f¨¢cil. Las relaciones UE-Turqu¨ªa son una suerte de im¨¢n para los problemas. El mismo d¨ªa que el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, convoc¨® la cumbre, Turqu¨ªa derrib¨® un caza ruso que supuestamente viol¨® su espacio a¨¦reo, algo que niega Mosc¨². Y en plenos preparativos, Ankara encarcela al director de uno de los diarios m¨¢s cr¨ªticos con Erdogan. Turqu¨ªa lleva varias semanas felicit¨¢ndose por el ¨¦xito de su control de fronteras, pero en los ¨²ltimos d¨ªas han vuelto a llegar decenas de embarcaciones a Grecia. Un informe de Human Rights Watch alertaba esta semana de que la frontera con Siria sigue abierta: el pa¨ªs no ha conseguido crear la zona de seguridad que prometi¨®.

Ankara sugiri¨® ayer que Erdogan no estar¨¢ en Bruselas: Turqu¨ªa podr¨ªa estar representada por el primer ministro, Ahmet Davutoglu. Los diplom¨¢ticos apuntaban anoche que puede que todo sea m¨¢s sencillo si Erdogan, que arremete con cierta frecuencia contra la UE ¡ª¡°no estamos dispuestos a seguir jugando el papel de d¨®cil suplicante a sus puertas¡±, dijo hace tres a?os a Newsweek¡ª, se queda en su palacio de 1.150 habitaciones, 30 veces m¨¢s grande que la Casa Blanca.