El reto opositor: demostrar que es mejor que el chavismo
El cambio puede abocar a un referendo sobre la continuidad de Nicol¨¢s Maduro en 2016
El rotundo triunfo opositor en las elecciones parlamentarias venezolanas del domingo puede conducir a un referendo revocatorio sobre la continuidad de Nicol¨¢s Maduro en 2016 o a nuevos choques civiles si la oposici¨®n no administra con inteligencia su victoria. Mucho de lo que pueda ocurrir depender¨¢ de qu¨¦ sector antigubernamental se ponga al tim¨®n. Si lo hacen los radicales del sector que lider¨® Leopoldo L¨®pez las cosas pueden ponerse feas. Si controla la situaci¨®n el sector moderado de Henrique Capriles, quiz¨¢ pueda negociarse con el chavismo una transici¨®n pac¨ªfica y ordenada: una hoja de ruta hacia el revocatorio y la convocatoria de elecciones presidenciales anticipadas ese mismo a?o.
Parece claro que si la oposici¨®n quiere consolidarse y volver a ganar tiene que andar con pies de plomo y no interrumpir los beneficios arbitrados por el chavismo durante 17 a?os para los venezolanos menos pudientes en materias como sanidad, educaci¨®n, vivienda y alimentaci¨®n. Si los anula o reduce sustancialmente puede ocurrir lo mismo que el domingo, pero al rev¨¦s. Es decir, que la gente que vot¨® contra las colas, en pr¨®ximas convocatorias puede votar contra el recorte de sus beneficios. Si la oposici¨®n no entiende que esas concesiones del chavismo son intocables en un pa¨ªs con el 75% del padr¨®n electoral viviendo en precario, tendr¨¢ un vuelo corto.
Otra de las debilidades de la oposici¨®n es que no ha presentado un programa de gobierno. Las bases chavistas sospechan que lo ha ocultado a sabiendas porque es 100% neoliberal. ¡°Si lo aplica sin anestesia se puede armar la de Dios es Cristo: una reedici¨®n del Caracazo, o peor¡±, subraya un ide¨®logo bolivariano. Una abrupta subida de precios y recorte de subsidios durante el segundo Gobierno de Carlos Andr¨¦s P¨¦rez desencaden¨® el 27 de febrero de 1989 una ola de disturbios callejeros con cientos de muertos.
La oposici¨®n ha ganado por paliza. La baza de las colas, producto de una escasez de media docena de art¨ªculos de primera necesidad, ha funcionado perfectamente, incluso mejor de lo que amplios sectores de la misma oposici¨®n anticipaban. El voto se ha limitado a castigar las colas. ?Qu¨¦ viene ahora? Varias son las hip¨®tesis. La oposici¨®n aprovechar¨¢ el tir¨®n y en 2016 promover¨¢ un referendo revocatorio que podr¨ªa acabar con el gobierno de Maduro. Eso llevar¨ªa a elecciones presidenciales en 2016.
Otra posibilidad es que los sectores m¨¢s radicales de la oposici¨®n quieran convertir los resultados en un plebiscito. Es decir, que exijan que Maduro salga ya, dejando de lado la Constituci¨®n y los pasos que en ella figuran para expulsarlo: el revocatorio. Otro aspecto dif¨ªcil de evaluar deriva de que la mayor¨ªa vot¨® contra algo, las colas, pero no a favor de algo, un programa. ?Cu¨¢l ser¨¢ la reacci¨®n de la gente de los barrios, tan ¨¢vida de inmediatez, si siente que una mayor¨ªa parlamentaria opositora no va acompa?ada de una mejora en sus condiciones de vida? ?Tendr¨¢ paciencia?
Frenar un tren es m¨¢s f¨¢cil que ponerlo en marcha. Para frenarlo basta con neutralizar la fuente de energ¨ªa que lo mueve. Ponerlo nuevamente en movimiento es m¨¢s complicado. Las inc¨®gnitas son muchas. Desde que el chavismo irrumpi¨® en la pol¨ªtica venezolana, en 1998, se han desarrollado 20 convocatoria a las urnas; la oposici¨®n ha ganado dos, una en 2007 y la del domingo. Arranca una situaci¨®n in¨¦dita y en ella la oposici¨®n tiene la tarea m¨¢s dif¨ªcil: le toca demostrar que puede hacerlo mejor que los chavistas.
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