Las cuentas del ISIS: la extorsi¨®n gana terreno a la industria del petr¨®leo

El recibo, con el n¨²mero 102, tiene un sello del Estado Isl¨¢mico (ISIS, en sus siglas en ingl¨¦s) en el centro. En la parte superior izquierda aparece el nombre "Departamento de Recursos Naturales y Antig¨¹edades del Estado Isl¨¢mico". Por debajo, el signatario, Abu Sayyaf al Iraqi, da cuenta de que ha recibido 2.152.000 libras sirias (algo m¨¢s de 10.500 euros) como porcentaje ¡ªuna suerte de licencia¡ª de la venta de antig¨¹edades en la provincia de Deir al Zor, en la franja oriental siria. El nombre del receptor aparece en la hoja tachado, probablemente por el personal del Departamento de Estado estadounidense que difundi¨® el documento en septiembre.

Lo hizo unos meses despu¨¦s de la muerte en una operaci¨®n especial del propio Abu Sayyaf, considerado un alto mando del ISIS en la gesti¨®n de los hidrocarburos. En el despliegue, EE UU se hizo con documentaci¨®n de los negocios de este veterano yihadista, un bot¨®n de muestra del entramado de financiaci¨®n del grupo, centrado esencialmente en la explotaci¨®n y expolio del territorio, algo que su hoy archienemiga en la batalla por el cetro de la yihad global, Al Qaeda, nunca pudo hacer, dependiente de las donaciones privadas.

El pasado mes de octubre, EE UU lanz¨® la Operaci¨®n Tidal Wave II (en homenaje a una misi¨®n contra los nazis en la II Guerra Mundial) para atacar la industria de extracci¨®n y comercio de petr¨®leo ¡ªcamiones, instalaciones y rutas de tr¨¢fico¡ª en las zonas controladas por el ISIS, fuente de financiaci¨®n vital para el califato de Abubaker al Bagdadi. Y los resultados, siempre seg¨²n la versi¨®n de Washington, han sido buenos: los yihadistas ya no tienen control sobre ning¨²n campo petrol¨ªfero en Irak, mientras que desde Siria, el crudo sirve principalmente a compradores de dentro del territorio y es muy poco el que logra atravesar la frontera turca.

Seg¨²n cifras difundidas por el Departamento del Tesoro estadounidense, la explotaci¨®n de petr¨®leo le ha podido reportar al ISIS unos 500 millones de d¨®lares al a?o. Sea por los ¨¦xitos de los bombardeos o por errores de c¨¢lculo, el crudo no es ya la mina de oro de anta?o. El analista Aymenn Jawad al Tamimi, experto en inteligencia y yihadismo, ha difundido documentos de la contabilidad del ISIS de la provincia de Deir al Zor, rica en hidrocarburos, recogidos entre finales de 2014 y principios de 2015. Seg¨²n sus cuentas, la explotaci¨®n de petr¨®leo y gas supone alrededor del 27,7% de los ingresos, por un 23,7% los impuestos (extorsi¨®n) y un 3,9% la gesti¨®n de la electricidad. La palma, con un 44,7% de lo ingresado, se la lleva la confiscaci¨®n de bienes ¡ªde gente que huye, de la venta sin permiso de alcohol, tabaco u otros bienes¡ª. El 43,6% de lo que entra en las arcas va a parar al pago de los combatientes.

Las cuentas del ISIS llevan a Al Tamimi a concluir que en los pozos de petr¨®leo de esa provincia, muy representativa, el ISIS podr¨ªa obtener al d¨ªa unos 66.433 d¨®lares, muy lejos de las cifras publicadas y de las estimaciones de las canciller¨ªas. "Por un margen considerable", dice Al Tamimi en un intercambio de correos, "el ISIS recibe ya m¨¢s ingresos de la extorsi¨®n que de la industria del petr¨®leo". El grupo yihadista ha establecido un entramado burocr¨¢tico en el territorio que controla entre el Tigris y el ?ufrates bajo el que cualquier movimiento, desde la apertura de una tienda, una cl¨ªnica, hasta el inicio de unas obras, un parking o la venta de antig¨¹edades en el mercado negro requieren el pago de un impuesto. Y eso es m¨¢s dif¨ªcil de bombardear.

"Est¨¢ prohibido para cualquier hermano [miembro] del Estado Isl¨¢mico excavar antig¨¹edades", dice otro de los documentos incautados a Abu Sayyaf, "o dar permiso a alguien para hacerlo salvo que reciba el sello del Departamento de Recursos Naturales y Antig¨¹edades del Estado Isl¨¢mico". El que "desobedezca", dice el comunicado aprehendido por las fuerzas especiales estadounidenses, "estar¨¢ sujeto a sanci¨®n de acuerdo con los tribunales de la shar¨ªa [ley isl¨¢mica]".