Unos 5.000 civiles acorralan a la polic¨ªa en Guatemala
Vecinos de Santiago de Atitl¨¢n atacan un cuartel al sospechar que un agente ebrio mat¨® a un comerciante
La poblaci¨®n civil de Santiago de Atitl¨¢n, en el Departamento de Solol¨¢ (al suroeste del pa¨ªs), inici¨® en la madrugada del lunes al martes un ataque contra la polic¨ªa de este municipio guatemalteco, de unos 45.000 habitantes, al sospechar que uno de los agentes, en estado de embriaguez, hab¨ªa matado a un comerciante de 28 a?os que se hab¨ªa negado a continuar suministr¨¢ndole alcohol fuera del horario permitido por la ley seca ¡ªnorma que proh¨ªbe la venta entre las diez de la noche y las siete de la ma?ana¡ª.
Dos versiones enfrentadas trataban ayer de explicar lo ocurrido: clientes de una abarroter¨ªa (tienda de comestibles) cercana sosten¨ªan que un polic¨ªa fuera de servicio y ebrio hab¨ªa disparado al comerciante; mientras que el oficial de bomberos, cuya estaci¨®n se encuentra junto al cuartel de polic¨ªa, Rub¨¦n Reanda Mendoza, aseguraba que el atacante era ajeno a las fuerzas del orden. ¡°La indignaci¨®n obedece a que la polic¨ªa no atendi¨® al llamado de auxilio. Llegaron tarde y no hicieron nada¡±, explic¨® por tel¨¦fono. Seg¨²n el bombero, el atacante fue un encapuchado que huy¨® del lugar.
¡°Al ver que tres agentes ingresaron a la abarroter¨ªa donde yac¨ªa el cuerpo del comerciante, la multitud baj¨® las persianas del negocio y los mantuvo encerrados en calidad de rehenes¡±, explic¨® Reanda. La multitud, cada vez m¨¢s fuera de control, seg¨²n el bombero, sac¨® a los agentes alrededor de las dos de la madrugada y los golpe¨® salvajemente. ¡°Uno de ellos presenta trauma craneal y calific¨® su estado como grave; los otros dos, golpes en la cara y el t¨®rax¡±, afirm¨®.
Obst¨¢culos a los refuerzos
Mientras Reanda daba declaraciones a este peri¨®dico, pudo ver c¨®mo la multitud romp¨ªa las puertas de la estaci¨®n policial y sacaba a golpes a los agentes all¨ª atrincherados. Despu¨¦s los llevaron a la plaza central del municipio, donde las autoridades locales intentaron llegar a un acuerdo con los descontentos, que reclaman, en primera instancia, la captura y enjuiciamiento del asesino y el retiro definitivo de la polic¨ªa de esa poblaci¨®n.
Frente al Ayuntamiento, la multitud prendi¨® fuego a todos los muebles de la estaci¨®n policiaca asaltada y quem¨® una motocicleta de la Municipalidad. Reanda asegur¨® que otro grupo de vecinos volvi¨® a rociar a las nueve de la ma?ana de ayer con gasolina las unidades motorizadas ¡°para reducirlas a cenizas¡±.
Los vecinos colocaron obst¨¢culos en las dos carreteras que llevan a la poblaci¨®n para impedir la llegada de refuerzos. Fuentes policiales informaron de que en la localidad vecina de San Pedro La Laguna un contingente de 70 agentes antidisturbios se preparaban para intervenir, pero la amenaza de los ciudadanos de asesinar a los rehenes los manten¨ªa a la expectativa. Otros 170 polic¨ªas de San Lucas Tolim¨¢n, otra poblaci¨®n cercana, esperaban por las mismas razones.
Poco despu¨¦s de que el gobernador civil de la provincia de Solol¨¢, Luis Garc¨ªa, admitiera que hab¨ªan perdido el control frente a una turba de ¡°alrededor de 5.000 personas¡±, un comando antimotines de la polic¨ªa logr¨® entrar a Santiago Atitl¨¢n y disolver a la multitud con gases lacrim¨®genos, a los que el grupo de descontentos respondieron con el lanzamiento de piedras. La polic¨ªa consigui¨® liberar a cinco rehenes, entre ellos a tres mujeres polic¨ªa, quienes han sido sacadas de la poblaci¨®n para salvaguardar su integridad f¨ªsica.
Seg¨²n Garc¨ªa, los lugare?os reivindicaban el cierre definitivo de los bares y la prohibici¨®n de la venta de bebidas alcoh¨®licas. La multitud ped¨ªa tambi¨¦n el retiro de la polic¨ªa y la creaci¨®n de patrullas de vecinos que asumieran las labores de seguridad. El di¨¢logo se rompi¨® sin embarg¨® por la intensa violencia civil.
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