Sin permiso para disfrutar del beb¨¦

Un hombre grande y barbudo se sienta en una peque?a silla y observa a sus dos hijas, de uno y cuatro a?os, jugar al sal¨®n de belleza.

Mam¨¢ no est¨¢. Probablemente se encuentre en el trabajo o haciendo alg¨²n quehacer. Mientras, pap¨¢ deja que sus peque?as le coloquen hebillas en el poco cabello que tiene.

Esta escena transcurre en Suecia donde mam¨¢ y pap¨¢ comparten una licencia paga por maternidad/paternidad de 480 d¨ªas. Esto permite que quien ¡°vuelva¡± primero a sus responsabilidades fuera de casa no siempre sea el padre y permite extender el tiempo que ambos disfrutan con los nuevos integrantes de casa.

Lejos de esta escena se encuentran los hogares promedio de Latinoam¨¦rica y el Caribe. De acuerdo al relevamiento realizado por el Banco Mundial solo pocos pa¨ªses que garantizan licencias pagas que se ajustan a la norma recomendada por la Organizaci¨®n Internacional del Trabajo (OIT) que son 16 semanas ¨C unos 112 d¨ªas corridos.

Entre los m¨¢s ¡°generosos¡± se encuentran Brasil y Costa Rica con leyes que reconocen y garantizan 120 d¨ªas de licencia paga para las madres y Venezuela, con 182 d¨ªas. El resto, por debajo de la norma, est¨¢n publicados en este ranking.

¡°Tal protecci¨®n no s¨®lo garantiza la igualdad de acceso de la mujer al empleo, sino que tambi¨¦n asegura la continuidad de ingresos a menudo vitales, necesarios para el bienestar de toda su familia¡± establece la organizaci¨®n.

Por su parte, Uruguay cuenta desde el a?o pasado con 98 d¨ªas de licencia paga para las madres pero a partir del primer d¨ªa del 2016 es uno de los pocos pa¨ªses que extiende la licencia de paternidad a 10 d¨ªas.

Existen otros pa¨ªses como Colombia, Ecuador y Venezuela que tambi¨¦n reconocen el derecho de los padres a contribuir con los primeros d¨ªas del reci¨¦n nacido con 10, 12 y 14 d¨ªas respectivamente. Mientras que pa¨ªses como Argentina, Guatemala o Paraguay solo reconocen 2 d¨ªas corridos, es decir, si un ni?o nace un viernes por la noche, el lunes por la ma?ana es hora de volver al trabajo.

Todos estos n¨²meros tienen gusto a poco cuando se compara con el caso sueco, donde adem¨¢s de los 480 d¨ªas para distribuir entre ambos padres, el pa¨ªs est¨¢ impulsando que los pap¨¢s se tomen un m¨ªnimo de 60 d¨ªas, derecho que solo ha disfrutado un 14% de los nuevos padres en el ¨²ltimo a?o.

A pesar de que la OIT no establece una norma respecto a los pap¨¢s, lo recomienda. ¡°Puede tener efectos positivos sobre la igualdad de g¨¦nero en el hogar y en el trabajo, y ser indicio de cambios en las relaciones y en la percepci¨®n de los roles de los progenitores, as¨ª como en los estereotipos predominantes¡± sostiene.

No todo es de color gris en la regi¨®n. Si retrocedemos m¨¢s de 20 a?os atr¨¢s, solo el 17% de los pa¨ªses de la regi¨®n reconoc¨ªan las licencias de paternidad, mientras que en el a?o 2013, casi el 40% establece alg¨²n tipo de legislaci¨®n.

Un empuj¨®n a la productividad

Detr¨¢s de estos n¨²mero se esconde por parte de los padres y madres, el miedo a perder el trabajo y por parte de las empresas, el miedo a sufrir una baja en la productividad.

Un estudio de la Corporaci¨®n Financiera Internacional, el brazo del Banco Mundial que apoya al sector privado establece todo lo contrario:

¡°Pol¨ªticas que le abren las puertas a las mujeres o mejoran sus condiciones de trabajo pueden aumentar la satisfacci¨®n de todos los empleados (tanto de mujeres como de hombres), dando lugar a cambios en el comportamiento y el rendimiento de los empleados, ayudando as¨ª a impulsar los indicadores globales de desempe?o organizacional¡±.

* Mar¨ªa Victoria Ojea es productora online del Banco Mundial.