El frente de los rebeldes sirios en Alepo se desmorona

Las l¨ªneas rebeldes en el norte de Siria se desmoronan r¨¢pidamente ante la intensidad que ha tomado en los ¨²ltimos d¨ªas la ofensiva lanzada contra Alepo por las tropas leales al presidente Bachar el Asad, apoyadas por milicias chi¨ªes y la aviaci¨®n rusa. Ayer las filas del r¨¦gimen se situaban en las cercan¨ªas de Tal Rifat, a tan s¨®lo una veintena de kil¨®metros del paso de ?nc¨¹pinar-Bab al Salam entre Turqu¨ªa y Siria, provocando gran ansiedad entre los desplazados que se aglomeran junto a la frontera.

¡°Nos atacan por todos lados, El Asad, el ISIS y los kurdos¡±, se quejaba Kazim Kenyo, un combatiente rebelde del Frente Levantino atendido en el hospital turco de Kilis tras ser herido en combate contra el Estado Isl¨¢mico (ISIS). Efectivamente, la ya estrecha franja que controla el bando rebelde ¡ªque agrupa desde la oposici¨®n moderada a El Asad hasta grupos yihadistas¡ª en el norte de Siria est¨¢ siendo sometida a gran presi¨®n. El ISIS ataca el ¨¢rea de Marea desde hace meses; los kurdos del cant¨®n de Afrin arrebataron tres aldeas rebeldes ayer y el r¨¦gimen avanza desde el sur en una maniobra envolvente para cercar Alepo, tomando la carretera que conectaba con Turqu¨ªa, principal m¨¦todo de aprovisionamiento del frente rebelde y la v¨ªa utilizada por decenas de miles de personas para huir de la ciudad. ¡°La ruta norte est¨¢ cortada por los combates¡±, confirm¨® a EL PA?S Christine Nyirjesy, portavoz de la ONG Mercy Corps, con presencia sobre el terreno.

P¨¢nico entre los civiles

¡°La situaci¨®n humanitaria es muy mala. Los civiles han entrado en p¨¢nico¡±, explicaba un activista sirio desde el interior de Alepo, donde muchos est¨¢n haciendo acopio de alimentos para resistir un previsible asedio, lo que ha disparado los precios. La ¨²nica v¨ªa de escape que queda para quienes huyen de los bombardeos rusos son carreteras secundarias y caminos al oeste de la urbe ¡ªla m¨¢s poblada de Siria antes de la guerra¡ª hacia la provincia de Idlib y la frontera de Reyhanli-Bab al Hawa. Hacia all¨¢ se dirigen unas 10.000 personas, seg¨²n el vicepresidente de la Media Luna Roja turca, Kerem Kinik, que se suman a los 90.000 desplazados en el norte de la provincia de Alepo bajo control rebelde: ¡°Es una de las mayores ofensivas que hemos visto desde el inicio de la guerra. La gente tiene miedo de que Alepo quede cercada y la gente muera de hambre¡±.

En una improvisada rueda de prensa sobre el paso fronterizo de ?nc¨¹pinar, tres ministros del Gobierno interino formado por la oposici¨®n siria denunciaron que Rusia comete ¡°cr¨ªmenes de guerra¡±, a la vez que se quejaban de la ¡°pasividad internacional¡± y clamaban por que el Consejo de Seguridad de la ONU garantice la aplicaci¨®n de la resoluci¨®n 2254, que pide a las partes el fin inmediato de los ataques a objetivos civiles y los bombardeos indiscriminados. Los representantes de la oposici¨®n exigieron la creaci¨®n de una ¡°zona segura¡± para los desplazados.

En el campo de refugiados de ?nc¨¹pinar (Turqu¨ªa), al sirio Hassan Salih, de 17 a?os, se lo llevaban los demonios de la impotencia ante las noticias del avance del r¨¦gimen sobre su localidad natal, Tal Rifat. ¡°Quiero tomar las armas y ayudar a los opositores. No soy s¨®lo yo, somos decenas los que queremos regresar a Siria a combatir, pero Turqu¨ªa no deja¡±. Fuera del campamento, junto al paso fronterizo, merodeaba un barbudo de unos 30 a?os, que se identific¨® como Abu Hazer Ansari y miembro de Frente al Nusra, filial siria de Al Qaeda: ¡°Debo unirme a mis hermanos en la yihad contra El Asad¡±. Herido hace meses, Abu Hazer afirmaba haberse recuperado para volver a combatir, pero se quejaba de que las autoridades turcas no le permiten el paso de vuelta: ¡°Estoy muy agradecido porque Turqu¨ªa me haya curado, pero tienen que dejarme volver. Nuestros chicos son los m¨¢s valerosos, uno de nosotros vale como diez soldados de los dem¨¢s grupos¡±.

Una de las razones del desmoronamiento rebelde son las rencillas entre facciones. Los intentos de unificar el mando han sido infructuosos, lo cual est¨¢ provocando una radicalizaci¨®n de quienes se oponen a El Asad. Un portavoz del grupo salafista Ahrar al Sham explicaba recientemente a este periodista que ¡°si la revoluci¨®n [es decir, el bando rebelde] fracasa, muchos se pasar¨¢n al ISIS¡±.