Canad¨¢ abre los brazos a los refugiados sirios m¨¢s vulnerables
El pa¨ªs ha acogido a 18.000 de los 25.000 que prometi¨® su primer ministro, Trudeau
Mohamed Faher el Din, un sirio de 27 a?os que huy¨® de su pa¨ªs al ser llamado a filas hace tres a?os, aterrizaba en Canad¨¢ el pasado mayo. Un oficial del aeropuerto de Toronto lo recibi¨® con una sonrisa y la mano extendida. El refugiado, que hab¨ªa vivido 14 meses en L¨ªbano, rompi¨® a llorar. ¡°Por primera vez en mucho tiempo me sent¨ª seguro¡±, explica por tel¨¦fono desde Toronto. Faher fue uno de los sirios que Canad¨¢ acog¨ªa por entonces con cuentagotas. Todas las restricciones se relajaron en diciembre de la mano de Justin Trudeau, primer ministro del pa¨ªs desde hac¨ªa un mes.
¡°Bienvenidos. Ya est¨¢is a salvo en casa¡±, fueron en diciembre las calurosas palabras de Trudeau a los primeros 163 refugiados de los 25.000 que en campa?a prometi¨® recibir. El primer vuelo estaba compuesto principalmente por sirios avalados por patrocinadores privados, en una iniciativa civil de acogidas que data de los a?os setenta; otros son avalados por las autoridades. Ya han llegado 18.346 en decenas de aviones del programa RefugeesWelcome (Bienvenidos, refugiados).
En 2015 Europa se ha enfrentado a la crisis de refugiados m¨¢s grave desde la II Guerra Mundial. Con 4,5 millones de desplazados por la guerra siria, m¨¢s de un mill¨®n de personas han arribado ilegalmente a la Uni¨®n Europea, la gran mayor¨ªa arriesgando la vida en fr¨¢giles barcazas en el Mediterr¨¢neo, donde unos 3.000 han muerto. Mientras el continente sigue inmerso en una crisis pol¨ªtica para decidir c¨®mo gestiona la oleada, al otro lado del Atl¨¢ntico el Gobierno de Canad¨¢ comprometi¨® 678 millones de euros en seis a?os para reubicar e integrar a la cuota de refugiados que prev¨¦ recibir antes de marzo.
La Agencia para los Refugiados de las Naciones Unidas (ACNUR) est¨¢ a cargo del proceso de selecci¨®n de los pendientes de viajar a Canad¨¢ desde L¨ªbano (que acoge a 1,2 millones de refugiados sirios) y Jordania (con 635.000 refugiados). En Turqu¨ªa, es el Gobierno el que selecciona directamente entre los 2,5 millones de refugiados.
Un esfuerzo de 678 millones de euros
- La guerra siria ha generado m¨¢s de 4,5 millones de desplazados internacionales.M¨¢s de un mill¨®n de ellos han llegado a Europa, principalmente a trav¨¦s del Mediterr¨¢neo, donde se calcula que al menos 3.000 han muerto en la traves¨ªa.
- L¨ªbano acoge a 1,2 millones de sirios, Turqu¨ªa a 2,5 millones y Jordania a 635.000.
- Canad¨¢ se ha comprometido a acoger a 25.000, de los cuales ya han llegado 18.000 al pa¨ªs.
- El proceso le costar¨¢ 678 millones de euros a Canad¨¢, principalmente para reubicar e integrar a los refugiados.
Estos procesos son laboriosos por las numerosas barreras pol¨ªticas y administrativas en los pa¨ªses de acogida. Por eso solo 10.055 de los refugiados sirios en L¨ªbano ¡ªel 0,66% del total¡ª han sido reubicados por un cauce legal en Europa.
¡°Seleccionamos los casos m¨¢s vulnerables que se correspondan con los criterios del pa¨ªs de acogida¡±, explica en Beirut Dana Suleim¨¢n, responsable de prensa de ACNUR. Canad¨¢ da prioridad a familias completas, mujeres en riesgo con hijos a su cargo y a los colectivos vulnerables, como el de LGTBI (lesbianas, gais, transexuales, bisexuales e intersexuales), asegura Remi Lariviere, del Centro de Inmigraci¨®n Canadiense (CIC) en L¨ªbano.
¡°S¨¦ que estoy hoy aqu¨ª porque soy gay¡±, dice Faher el Din. Su patrocinador, la Iglesia Unificada de Canad¨¢, se compromete a costear el m¨ªnimo de 12.700 euros durante el primer a?o de estancia.
Faher el Din forma al mismo tiempo parte de otra minor¨ªa: es un sirio de origen palestino. Referidos a la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en L¨ªbano, estos son excluidos del proceso de reubicaci¨®n dirigido por ACNUR. Tan s¨®lo unos pocos casos, como Faher el Din, lograr¨¢n ayuda. ¡°Estoy feliz. Pero es duro. He pasado de tener una familia, amigos y trabajo a vivir s¨®lo en un pa¨ªs nuevo¡±, comenta el joven antes de regresar a sus clases de franc¨¦s en Toronto.
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