Obama admite que EE UU ¡°tard¨® en defender los derechos humanos¡±
Rodeado de fotos de desaparecidos argentinos, el presidente reivindica el giro con Jimmy Carter
Barack Obama ya apunt¨® una cierta autocr¨ªtica sobre el papel de EE UU en las dictaduras latinoamericanas en la rueda de prensa conjunta con Mauricio Macri, pero se guard¨® el mensaje m¨¢s profundo para el d¨ªa m¨¢s especial, cuando se cumplen 40 a?os del golpe de Estado argentino, y en el lugar m¨¢s simb¨®lico, el Parque de la Memoria, donde est¨¢n todas las fotos y nombres de los desaparecidos. All¨ª Obama reconoci¨® que EE UU "tard¨®" en defender los derechos humanos en Argentina y otros pa¨ªses, una admisi¨®n impl¨ªcita de la responsabilidad de su pa¨ªs en los setenta. A¨²n as¨ª, enseguida reivindic¨® el giro que se dio en 1977 con el presidente dem¨®crata Jimmy Carter.
"S¨¦ que existen pol¨¦micas sobre la pol¨ªticas de Estados Unidos en esos d¨ªas oscuros", arranc¨® el presidente. "Es algo que EE UU est¨¢ analizando. Las democracias deben tener el valor de reconocer cuando no se est¨¢ a la altura de los valores que defendemos. Cuando hemos tardado en defender los derechos humanos. Ese fue el caso en Argentina", explic¨®.
"No podemos olvidar el pasado. Pero una vez que encontramos el valor de afrontar el pasado, es cuando podemos cambiarlo y construimos un futuro mejor. Eso es lo que han hecho las v¨ªctimas, y EE UU continuar¨¢ ayud¨¢ndolas en sus esfuerzos. Lo que sucedi¨® aqu¨ª en Argentina no es ¨²nico, pas¨® en diferentes partes del mundo. Tenemos la responsabilidad de analizar ese pasado, de ser responsables hacia el futuro, es lo que vamos a hacer para hacer del mundo un lugar mejor para nuestros hijos", remat¨®.
Obama no pidi¨® perd¨®n en nombre de EE UU, como reclamaban algunos activistas en favor de los derechos humanos. Ninguno de los principales dirigentes, en especial Estela de Carlotto, l¨ªder de Abuelas de Plaza de Mayo, lo acompa?aba, un claro gesto de distancia. Tampoco entr¨® en detalles ni dio ejemplos sobre el papel de su pa¨ªs en los cr¨ªmenes cometidos en aquellos a?os. Pero defendi¨® la necesidad de que las democracias, como EE UU, sean capaces de abordar sus propios cr¨ªmenes.
Obama quiso subrayar que hubo, en las Administraciones estadounidenses de la ¨¦poca, comportamientos honorables, como el de diplom¨¢ticos y altos funcionarios que denunciaron los abusos tras el golpe de 1976. El presidente de EE UU evoc¨® el papel de Jimmy Carter. Elegido aquel a?o, Carter fue el primer presidente de EE UU en situar los derechos humanos en el centro de la pol¨ªtica exterior.
Todo el discurso de Obama, acompa?ado de Macri, estaba pensado para esas v¨ªctimas que no estaban con ¨¦l pero sin duda le escucharon. Ambos presidentes recorrieron el Parque de la Memoria y despu¨¦s lanzaron unas flores al R¨ªo de la Plata, el lugar donde los militares lanzaban los cuerpos de los desaparecidos en los llamados vuelos de la muerte. "Este es un tributo a su memoria, a su tenacidad, a sus hijos que recuerdan, a la valent¨ªa y perseverancia de los padres que buscaron la verdad. Es un homenaje a los familiares, porque ustedes han liderado esos esfuerzos, ustedes garantizan el nunca m¨¢s", dijo pronunciando las simb¨®licas palabras en castellano. Adem¨¢s reiter¨® que desclasificar¨¢ documentos del Pent¨¢gono y la CIA para que las familias puedan saber toda la verdad.
"Se necesita valor para que una ciudadan¨ªa aborde las inc¨®modas verdades de las etapas oscuros de su pasado, los delitos cometidos por sus l¨ªderes puede ser fuente de divisi¨®n y frustraci¨®n pero es fundamental que avancemos, que construyamos un futuro en paz", insisti¨® el presidente para reivindicar despu¨¦s el papel de diplom¨¢ticos, cient¨ªficos y periodistas de EE UU que ayudaron a las v¨ªctimas. En especial a Pat Derian, secretaria de derechos humanos bajo Carter. "Jimmy Carter entendi¨® que los derechos humanos son un elemnto fundamental de la pol¨ªtica exterior y ese entendimiento marc¨® la forma en que entendemos la pol¨ªtica exterior desde entonces", asegur¨® para dejar claro que EE UU ha cambiado. Ese fue el gran mensaje de su viaje a Argentina, que concluye hoy con una visita a Bariloche, la joya tur¨ªstica y tecnol¨®gica de este pa¨ªs.
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