Merkel visita una Turqu¨ªa convertida en el guardi¨¢n de la frontera de la UE
El presidente del Consejo Europeo, que acompa?a a la canciller alemana, califica de "ejemplar" el trato de Ankara a los refugiados
La canciller alemana, Angela Merkel, ha viajado este s¨¢bado al sur de Turqu¨ªa para analizar c¨®mo se gestiona el pacto de la UE para contener a los migrantes y visitar un campamento de refugiados sirios acompa?ada por el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, y el vicepresidente de la Comisi¨®n Europea, Frans Timmermans. M¨¢s que contenido pr¨¢ctico, el viaje tiene un sentido simb¨®lico -ofrecer apoyo al papel de guardianes del flanco suroriental de Europa que ejercen las autoridades turcas- pues los gestos son de tremenda importancia en las relaciones con un pa¨ªs tan nacionalista y orgulloso como Turqu¨ªa.
Merkel ha dejado claro en una comparecencia en Gaziantep que comparte la idea turca de establecer una "zona segura" en el lado sirio de la frontera. "He demandado de nuevo que tengamos zonas donde el alto el fuego se aplica especialmente y donde se pueda garantizar un determinado nivel de seguridad", ha recalcado la canciller. Estas zonas, criticadas por diversas ONG, son una reiterada demanda de Ankara y est¨¢n contempladas en el pacto migratorio que entr¨® en vigor el 20 de marzo, que pretende la expulsi¨®n pr¨¢cticamente generalizada de los llegados ilegalmente a la UE. Por su parte, Tusk ha calificado de "ejemplar" el trato que las autoridades turcas est¨¢n dispensando a los refugiados, informa Europa Press. "Turqu¨ªa es el mejor ejemplo del mundo entero a la hora de tratar a los refugiados. Me enorgullece que seamos socios".
Desde que entr¨® en vigor el pacto antimigratorio entre Bruselas y Ankara, Turqu¨ªa ha incrementado la vigilancia en sus fronteras lo que, unido a condiciones atmosf¨¦ricas desfavorables, ha reducido la llegada de refugiados y migrantes a las islas griegas desde el millar diario de enero y febrero a una media de 134 en abril.
Pero la buena marcha del acuerdo reside en que las autoridades de Ankara se sientan correspondidas, tal y como advirti¨® el primer ministro, Ahmet Davutoglu, esta semana, instando a Bruselas a cumplir su parte del trato; es decir, eximir del obligatorio visado a los turcos que entren a territorio Schengen a partir de junio. El pr¨®ximo 4 de mayo est¨¢ previsto que la UE presente un informe sobre esta cuesti¨®n, pero algunas voces en el seno de los Veintiocho ya han mostrado sus dudas de que Turqu¨ªa cumpla los requisitos requeridos por la Uni¨®n.
Merkel y su delegaci¨®n han visitado el denominado ¡°centro de acogida¡± de Nizip (en la provincia de Gaziantep, fronteriza con Siria) que, como el resto de los 26 campos para refugiados sirios e iraqu¨ªes existentes en Turqu¨ªa, cumple de sobra con los est¨¢ndares internacionales. La cuesti¨®n es que estos recintos solo acogen a 268.097 refugiados, es decir, un 10 % de todos los sirios que, seg¨²n la ONU, residen en el pa¨ªs.
Lo cierto es que la mayor¨ªa de los sirios prefieren vivir fuera de estos campos, en las grandes ciudades del oeste de Turqu¨ªa, ya que as¨ª disponen de mayor libertad para moverse y buscar trabajo. De hecho, en los campos existentes hay varias decenas de miles de plazas libres y se est¨¢n habilitando nuevas instalaciones para refugiados, as¨ª como ampliando los centros de internamiento de inmigrantes para acoger a los que sean deportados desde Grecia.
Adem¨¢s de este viaje, otro gesto de la canciller alemana destinado a contentar a Ankara ha sido dar luz verde al procesamiento del humorista Jan B?hmermann por su poema contra el presidente turco, el islamista Recep Tayyip Erdogan, algo que ha sido aclamado por los medios que le son afines como una victoria. En cambio, el primer ministro holand¨¦s, Mark Rutte, ha decidido exigir una aclaraci¨®n por la petici¨®n del consulado de Turqu¨ªa en R¨®terdam a las organizaciones turcas que trabajan en Holanda pidiendo los nombres y datos de todos aquellos que ¡°insulten a nuestro presidente [Erdogan], la naci¨®n turca o Turqu¨ªa en general a trav¨¦s de correos electr¨®nicos o redes sociales¡±.
¡°Nuestras libertades, incluidas la libertad de expresi¨®n no estar¨¢n sujetas a ning¨²n tipo de regateo¡±, advirti¨® Donald Tusk antes de la visita a Turqu¨ªa.
Para reducir los flujos migratorios, Turqu¨ªa tambi¨¦n ha impuesto el visado a varios pa¨ªses -incluida Siria- antes exentos de modo que los ciudadanos de Estados del Norte de ?frica y Oriente Medio volaban a Estambul y desde all¨ª intentaban dar el salto a la UE. Y adem¨¢s ha incrementado la vigilancia en su frontera con Siria, restringiendo el paso de los sirios que huyen de la guerra a casos de emergencia.
Desde inicios de a?o, a ra¨ªz de la ofensiva del r¨¦gimen de Bachar el Asad sobre Alepo, unos 100.000 sirios se han agolpado en el paso fronterizo de Bab al Salam (provincia de Alepo) en espera de que Turqu¨ªa les permita cruzar. Otras 130.000 personas se hallan ante el paso de Bab al Hawa y en toda la provincia de Idlib (noroeste de Siria) hay m¨¢s de 700.000 desplazados internos por el conflicto.
¡°La situaci¨®n es muy dif¨ªcil y hay problemas de alojamiento. En el norte de Alepo, por ejemplo, el ISIS atac¨® la semana pasada varios campos de refugiados, expulsando a unas 4.000 familias hacia Bab al Salam, una zona ya de por si superpoblada¡±, explica Dalia Al Awqaty, de la ONG Mercy Corps: ¡°Son personas que durante cinco a?os de conflicto han tenido que cambiar de lugar varias veces, y muchos querr¨ªan refugiarse en Turqu¨ªa¡±.
En una muestra de la esquizofrenia que gu¨ªa las relaciones euro-turcas, algunos estamentos de la UE han exigido a Turqu¨ªa que abra esta frontera para permitir a los refugiados ponerse a salvo, al mismo tiempo que le exig¨ªa mayor vigilancia de sus fronteras mediterr¨¢neas para evitar que llegasen a territorio europeo. Con todo Turqu¨ªa mantiene que su pol¨ªtica de ¡°puertas abiertas¡± a los refugiados sirios contin¨²a vigente, pese a que es obvio que no se est¨¢ permitiendo el paso como se hac¨ªa hasta hace un a?o. Una fuente del Ejecutivo turco puntualiza que ¡°esta pol¨ªtica de puertas abiertas no significa permitir cruzar libremente a todo el que quiera¡± sino solo a aquellos que sufran ¡°un riesgo inminente¡±.
El control fronterizo ha aumentado hasta tales niveles que se han registrado muertes de refugiados que intentaban cruzar entre ambos pa¨ªses por disparos de las fuerzas de seguridad turcas. Algunos creen que se trata de casos aislados, pero otros, como el representante de Amnist¨ªa Internacional en Turqu¨ªa, Andrew Gardner, aseguran que ¡°son frecuentes¡±, como tambi¨¦n lo son, en los ¨²ltimos meses, las devoluciones en caliente de los sirios que cruzan la frontera.
La raz¨®n es que, por el momento, Turqu¨ªa prefiere atender a los refugiados al otro lado de la frontera en campos de desplazados en territorio sirio. ¡°Son las propias autoridades turcas las que deciden en qu¨¦ lugares [del territorio sirio] se establecen estos campos y luego env¨ªan a IHH [una organizaci¨®n islamista turca con buenas relaciones con los grupos armados rebeldes sirios] a construirlos. El resto de ONG vamos detr¨¢s a ver en qu¨¦ podemos ayudar¡±, asegura una fuente del sector humanitario que pide el anonimato.
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