El Princesa de Asturias premia la lucha contra el cambio clim¨¢tico

Bajo el paraguas de la UNFCC, un organismo dependiente de la ONU, 195 pa¨ªses cerraron en Par¨ªs el primer acuerdo global para intentar atajar las emisiones de gases de efecto invernadero, que seg¨²n la mayor¨ªa de los expertos est¨¢ contribuyendo al aumento de las temperaturas en el planeta. Este pacto, por primera vez, obliga a todos los pa¨ªses a poner en marcha planes de reducci¨®n de emisiones y no solo a los Estados considerados desarrollados. China y Estados Unidos, las potencias m¨¢s contaminantes, tambi¨¦n se sumaron. ?

Este pacto establece el compromiso de que el aumento de la temperatura a final del siglo se quede "muy por debajo de los dos grados" respecto a los niveles preindustriales.

El Acuerdo de Par¨ªs, que fue respaldado e impulsado por las principales potencias del mundo, es solo el inicio de un camino. De hecho, los compromisos de reducci¨®n de emisiones que los casi 200 pa¨ªses firmantes del pacto han puesto sobre la mesa no son suficientes y, al realizar las proyecciones, se llegar¨ªa a un incremento medio de la temperatura a final de siglo de casi tres grados. Por eso, el acuerdo contiene una cl¨¢usula de revisi¨®n al alza de esos compromisos, que son voluntarios, es decir, cada pa¨ªs decide c¨®mo quiere sumarse a esta lucha global.

Mensaje a los mercados

Muchos analistas coinciden en que el principal logro de este pacto, que se espera que entre en vigor este a?o cuando sea ratificado por una mayor¨ªa suficiente de pa¨ªses, es el mensaje que se manda a los mercados para que los actores se lancen a descarbonizar las econom¨ªas. Es decir, caminar hacia una econom¨ªa baja en emisiones de CO₂.

Aunque el acuerdo incluye tanto a los desarrollados como a los no desarrollados en el apartado de las reducciones de gases de efecto invernadero, los Estados m¨¢s ricos deber¨¢n hacer esfuerzos superiores. Por ejemplo, los desarrollados tendr¨¢n que movilizar 100.000 millones de d¨®lares anuales, que se emplear¨¢n en paliar los efectos de cambio clim¨¢tico que padecen y padecer¨¢n los pa¨ªses con menos recursos. Porque el objetivo no es ya revertir el calentamiento global, algo que se entiende que no se puede hacer debido a la gran cantidad de CO₂ que el hombre ha lanzado a la atm¨®sfera durante d¨¦cadas y que, seg¨²n los cient¨ªficos, impide que el planeta se enfr¨ªe igual que antes de la Revoluci¨®n Industrial. La meta es dejar el incremento de la temperatura en unos niveles que no supongan una cat¨¢strofe para algunas regiones.

El premio otorgado al Acuerdo de Par¨ªs es el s¨¦ptimo en concederse de los ocho galardones que convoca anualmente la Fundaci¨®n Princesa de Asturias, que este a?o alcanzan su XXXVI edici¨®n, que se cerrar¨¢ el pr¨®ximo mes septiembre con la concesi¨®n del de la Concordia.