Boris Johnson: Trump con un Tesauro

Es dif¨ªcil creer que haya en Europa un pol¨ªtico m¨¢s carism¨¢tico, m¨¢s erudito o m¨¢s eficazmente populista que Boris Johnson, el l¨ªder de la triunfante campa?a por el Brexit y probable futuro primer ministro de Reino Unido.

Lo entrevist¨¦ en 2012. Arranqu¨¦ haciendo menci¨®n de Jorge Luis Borges. Antes de que pudiese acabar la frase me interrumpi¨® y me cit¨® la primera l¨ªnea de un cuento del escritor argentino. No fue la ¨²nica vez en aquel encuentro que me dej¨® boquiabierto. Al poco rato mencion¨¦ a Adriano, el emperador romano ¡°espa?ol¡±, y Johnson que habla¡ªs¨ª, habla¡ªlat¨ªn, me contest¨®, ¡°A ver, no recuerdo bien¡­?naci¨® en Hispania Ulterior o Hispania Citerior?¡±

M¨¢s informaci¨®n

Boris Johnson, abucheado al salir de su casa en Londres

La ¨²ltima apuesta de Boris

Me deslumbr¨® como ha deslumbrado al p¨²blico brit¨¢nico en general. El pol¨ªtico que fue hasta hace mes y medio alcalde de Londres, y es hoy diputado parlamentario conservador, ha sido durante a?os el pol¨ªtico m¨¢s popular del pa¨ªs. Nadie da discursos m¨¢s el¨¦ctricos o entrevistas m¨¢s entretenidas. Es un payaso y un genio a la vez. En cuanto a sus legendarias infidelidades, se las han perdonado tanto su esposa como el grueso de la poblaci¨®n.

Amigos que lo hab¨ªan conocido cuando fue periodista, entre otras cosas corresponsal del Daily Telegraph en Bruselas y director y columnista de la revista The Spectator, me hicieron empezar a dudar de ¨¦l. Era mal compa?ero, me dijeron; se inventaba historias, era una persona absolutamente amoral.

Me lo cre¨ª todo y m¨¢s cuando sorprendi¨® al mundo pol¨ªtico en febrero de este a?o anunciando que iba a hacer campa?a a favor de la salida de Reino Unido de la Uni¨®n Europea. Hasta aquel d¨ªa hab¨ªa estado dubitativo sobre el tema en p¨²blico, aunque anteriormente hab¨ªa escrito y hablado muchas veces con un burl¨®n afecto, muy t¨ªpico de ¨¦l, sobre la UE. Un libro que escribi¨® sobre la antigua Roma se?al¨® un paralelismo positivo entre el viejo imperio y el gran proyecto europeo moderno.

Todo lo cual contribuy¨® a que buena parte de la clase pol¨ªtica brit¨¢nica opinara que opt¨® por el Brexit no por principios sino para alimentar su obsesiva y largamente conocida ambici¨®n de ser primer ministro. Figuras importantes de aquel sector de su partido que ha estado en contra del Brexit le atacaron sin piedad. Uno dijo que era un ¡°obsceno¡± oportunista; otro que era ¡°un buf¨®n¡±; otro m¨¢s que era un mentiroso perdido que ¡°se inventa cosas sobre la marcha¡±.

La cr¨ªtica mas lacerante corresponde a un exdirector del Daily Telegraph llamado Max Hastings que coincidi¨® con ¨¦l como periodista durante 20 a?os. Hastings escribi¨® de Johnson: ¡°La mayor¨ªa de los pol¨ªticos son ambiciosos e implacables, pero Boris es un egoman¨ªaco medalla de oro. No le confiar¨ªa ni a mi esposa ni, francamante, mi billetera. Y es tambi¨¦n mucho m¨¢s despiadado y ruin de lo que el p¨²blico cree.¡±

Johnson posee aquel requisito indispensable en un pol¨ªtico triunfador, una piel de rinoceronte a prueba de balas. Por eso y porque su opci¨®n por el Brexit result¨® ser una jugada maestra, ah¨ª est¨¢ hoy, dominando el escenario pol¨ªtico como nunca, tan l¨²cido, tan encantador y tan descarado como siempre. ¡°Es Donald Trump con un Tesauro¡±, dijo hace poco otro pol¨ªtico de ¨¦l. Pero a diferencia, se supone, de Trump (aunque uno ya no puede estar seguro de nada en la pol¨ªtica de hoy en d¨ªa), Johnson apunta, sin rival a la vista, a ser el pr¨®ximo jefe de gobierno de su pa¨ªs.