Francisco Toledo: ¡°El Gobierno de M¨¦xico no sabe en qu¨¦ pa¨ªs vive ¡±
El pintor oaxaque?o critica al gobierno y a los maestros y dice que una intervenci¨®n policial a?adir¨ªa m¨¢s descontentos a las protestas
El pintor vivo m¨¢s cotizado de M¨¦xico llega a la entrevista con tres cuadernos bajo el brazo de chicas rubias en ropa interior. Aparece con el pelo alborotado, la camisa arrugada y el rostro preocupado. Sin embargo, de los tres pliegues, s¨®lo el ¨²ltimo es novedad.
La situaci¨®n en Oaxaca, su tierra, es convulsa ¡°y as¨ª es dif¨ªcil vivir, trabajar y llevar una vida normal¡± dice Francisco Toledo (Juchit¨¢n, Oaxaca; 1940) bajo las buganvillas de la que fuera su antigua casa, hoy un museo donado a la ciudad. ¡°Hay una gran tensi¨®n a ra¨ªz de los muertos, la represi¨®n policial, el intento de desalojo y la falta de di¨¢logo¡estamos viviendo algo que ya sufrimos en 2006 y es preocupante¡±, lamenta.
Los maestros disidentes del sindicato (CNTE) agrupados en la Secci¨®n 22 ¡ªque a¨²na los docentes de Chiapas, Oaxaca y Guerrero¡ª, se han levantado contra la reforma educativa impulsada por el Gobierno de Enrique Pe?a Nieto. A las protestas y plantones en plazas p¨²blicas han a?adido bloqueos de carreteras que asfixian los estados de Oaxaca y Chiapas, los dos m¨¢s pobres de M¨¦xico. Por el momento hay una tibia mesa de negociaci¨®n puesta en marcha, pero el Gobierno amenaza con actuar si siguen los bloqueos.
En Oaxaca hay un gran descontento social y no s¨®lo de los maestros
?Est¨¢ a favor de una intervenci¨®n policial para despejar las carreteras? ¡°Ser¨ªa un gran error porque hay un gran descontento social y no s¨®lo de los maestros. Una actuaci¨®n violenta de la polic¨ªa unir¨ªa toda la inconformidad de la gente que adem¨¢s se extiende por varios Estados¡±, contesta.
Seg¨²n Toledo, la intervenci¨®n policial de hace 20 a?os "s¨®lo sirvi¨® para calmar la situaci¨®n brevemente", pero luego "reaparecieron los problemas¡±, recuerda. El artista zapoteco atribuye gran parte de la culpa de este nuevo conflicto a la cerraz¨®n del Ejecutivo y las autoridades mexicanas ¡°que no saben en qu¨¦ pa¨ªs viven y que cree que el DF [la capital] es todo M¨¦xico¡±.
En apenas unas frases el maestro Toledo, como todos lo conocen, repite dos veces una misma fecha: 2006, un a?o que se clava como una sombra dolorosa en el inconsciente de los oaxaque?os.
Aquel a?o se vivi¨® la crisis pol¨ªtica y social m¨¢s grave del Estado de Oaxaca y para muchos analistas es el origen de la revuelta que se vive hoy. Todo comenz¨® en junio con una frustrada intervenci¨®n policial en contra de los maestros acampados en el z¨®calo de Oaxaca. A partir de ah¨ª, comenz¨® una revuelta? popular contra el gobernador, Ulises Ru¨ªz (PRI), que sumi¨® la entidad en una anarqu¨ªa delirante durante m¨¢s de cinco meses.
Estamos viviendo lo mismo que ya sufrimos en 2006
De junio a noviembre de 2006, el gobernador y el Congreso local sesionaron en la clandestinidad, la polic¨ªa desapareci¨® de las calles y se multiplicaron las barricadas controladas por el movimiento insurgente. Las emisoras de radio y televisi¨®n fueron ocupadas y la seguridad estaba a cargo de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO), que deten¨ªa, juzgaba y condenaba a los delincuentes en la misma farola de la plaza. La capital oaxaque?a entr¨® en un total desgobierno que se extendi¨® por otros puntos del Estado, hasta que todo termin¨® con una intervenci¨®n policial por tierra y aire pocos d¨ªas antes de la llegada de Felipe Calder¨®n (PAN) al poder.
Una d¨¦cada despu¨¦s, la tensi¨®n tiene forma de mensaje de WhatsApp y circula fren¨¦ticamente de celular en celular: ¡°compa?eros, hoy intervendr¨¢ la Federal¡±, dice un mensaje an¨®nimo. ¡°Alerta, no salgan hoy de casa porque habr¨¢ enfrentamientos en la calles¡±, subraya otro.
¡°La gente est¨¢ temerosa y nerviosa. Y lo que nos falta a¨²n¡¡±, responde enigm¨¢ticamente el pintor. Por el momento, el Gobierno dice que no negociar¨¢ ni una coma de la ley que obligar¨¢ a examinarse a los maestros y ha pedido permiso al Senado para emplear al ej¨¦rcito si fracasa la mesa de negociaci¨®n puesta en marcha. Los maestros llevan en pie de lucha tres a?os, pero la muerte a tiros de 8 civiles segun las cifras que manejan las autoridades ¡ª11 segun los maestros¡ª tras una intervenci¨®n policial, ha tensado m¨¢s la situaci¨®n.
?Tienen raz¨®n los maestros en sus demandas? "Es complicado. A ellos los han pintado como los malos de la pel¨ªcula, pero hoy son una fuerza pol¨ªtica que ha llegado hasta donde el Estado les ha permitido. Durante a?os, como si fueran parte del folclore, acampaban en el z¨®calo de Oaxaca para protestar.Y cada a?o se iba solucionando el problema sin que la sociedad civil supiera en qu¨¦ consisten esos acuerdos¡±, explica. ¡°El propio Estado cre¨® sindicatos como el de la SNTE [dirigida por la pol¨¦mica Elba Esther Gordillo, hoy encarcelada] a la que le dieron de todo a cambio de fuerza pol¨ªtica y votos, pero igual sucede con sindicatos petroleros o mineros que est¨¢n coptados por el Estado¡±, resume
Toledo no es una opini¨®n m¨¢s. A unos d¨ªas de cumplir 76 a?os, no s¨®lo es el m¨¢ximo exponente de la escuela oaxaque?a de arte, de la que han salido pintores como Rufino Tamayo o Luis Z¨¢rate, sino que es s¨ªmbolo vivo de la defensa de las tradiciones y la cultura ind¨ªgena tanto en la calle como en el estudio.
En la obra de Toledo, su tierra zapoteca es el centro de su creaci¨®n. De ella emanan las criaturas primitivas y fant¨¢sticas que salen de su paleta. Paralelamente ha puesto en pie una activa red de centros culturales y medioambientales en Oaxaca desde los que difunde el arte entre los j¨®venes y da apoyo a las causas que considera justas. Una de las m¨¢s conocidas fue su movilizaci¨®n, tamal en mano, en contra de la instalaci¨®n de un McDonald's en el Z¨®calo hasta que logr¨® que la cadena estadounidense tirara la toalla.
En el caso de los maestros, Toledo reconoce que es muy dif¨ªcil tener una opini¨®n clara. Sin embargo, hay dos cosas que le irritan sobremanera del mundo que vive: ¡°el desprecio a la ense?anza en lenguas ind¨ªgenas y la comida chatarra que invade las comunidades¡±.
Actualmente Toledo ¡°apadrina¡± a 16 hijos de campesinos que estudian en la Normal de Tlacochahuaya, pero su ¨²ltima aportaci¨®n a la causa ha sido editar cuadernos escolares en lengua ind¨ªgena elaborados con papel reciclado e ilustrados con animales aut¨®ctonos, grabados del cuerpo humano o plantas dibujadas por los primeros dominicos espa?oles que recorrieron la sierra en el siglo XVII.
¡°Estos cuadernos construyen y forman, y no esa porquer¨ªa¡±, dice lanzando las libretas blancas californianas que tra¨ªa bajo el brazo y que utilizan la mayor¨ªa de ni?os ind¨ªgenas de Oaxaca. Si algo le cabrea m¨¢s que el conflicto magisterial en s¨ª mismo es descubrir que est¨¢ s¨®lo en su cruzada. ¡°No hay nada en zapoteco: la ¨²nica manera de que la lengua siga viva es teniendo radios, peri¨®dicos, publicaciones y revistas; hay que hacerlo y el Estado no se ocupa de eso¡±, lamenta.
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