Estados Unidos desclasifica el informe secreto sobre la posible implicaci¨®n saud¨ª en el 11-S
La investigaci¨®n encontr¨® en 2002 v¨ªnculos, que no pudieron ser verificados, entre los terroristas y personas que podr¨ªan estar vinculadas al Gobierno de Riad
El Congreso estadounidense difundi¨® este viernes una secci¨®n hasta ahora secreta de la investigaci¨®n oficial sobre los atentados del 11-S, que determina que en Estados Unidos algunos de los terroristas tuvieron contacto y fueron ayudados por personas que ¡°podr¨ªan estar conectadas¡± con el Gobierno de Arabia Saud¨ª. El documento, elaborado en 2002 y que incluye elementos tachados, analiza numerosas sospechas de v¨ªnculos entre los secuestradores y las autoridades de Riad, pero reconoce que la comunidad de inteligencia estadounidense no pudo verificar de forma independiente estos hipot¨¦ticos lazos.
La desclasificaci¨®n de las 28 p¨¢ginas del informe que analizan un posible papel saud¨ª en los atentados de 2001 llega tras a?os de campa?a de familiares de las v¨ªctimas y de legisladores a favor de la difusi¨®n del documento ante las reticencias de la Casa Blanca a hacerlo. Riad, cuyas estrechas relaciones con Washington se han debilitado en los ¨²ltimos a?os, hab¨ªa pedido la desclasificaci¨®n del informe para tratar de atajar las sospechas sobre su posible implicaci¨®n en el 11-S, en que murieron cerca de 3.000 personas. Quince de los 19 terroristas eran saud¨ªes.
En su informe final en 2004, la comisi¨®n oficial del Congreso que investig¨® el 11-S no encontr¨® pruebas de que el Gobierno o altos cargos saud¨ªes financiaran a Al Qaeda. Sin embargo, las sospechas se mantuvieron por el hecho de que algunos miembros de esa comisi¨®n dijeran que no se pod¨ªan descartar lazos con Al Qaeda de miembros de menor rango del Gobierno saud¨ª y tambi¨¦n por mantenerse en secreto esas 28 p¨¢ginas del informe.
El ministro de Exteriores saud¨ª, Adel al Jubeir, dijo, en una rueda de prensa en Washington, que la secci¨®n desclasificada exonera a Arabia Saud¨ª y que "ahora el asunto se ha terminado".
El documento, sin embargo, mantendr¨¢ posiblemente vivas las especulaciones sobre un papel saud¨ª en los atentados dado que no descarta que existiera: menciona sospechas de v¨ªnculos, pero esgrime que no han podido demostrarse. ¡°En sus testimonios, ni los testigos de la CIA o del FBI fueron capaces de identificar definitivamente el alcance del apoyo saud¨ª a actividades terroristas globalmente o dentro de Estados Unidos, y si ese apoyo, si es que existe, es de naturaleza intencional o involuntaria¡±, se?ala la secci¨®n en sus conclusiones.
La Oficina de Inteligencia Nacional de Estados Unidos, que agrupa a todas las agencias de espionaje del pa¨ªs, se?al¨® que su aprobaci¨®n a la difusi¨®n del informe no significa que respalde su contenido.
Posibles contactos en California
El informe incluye detalles de hipot¨¦ticas conexiones entre los terroristas suicidas y el Gobierno de Riad a partir de informaciones del FBI y la CIA. Por ejemplo, menciona el caso de un funcionario del consulado saud¨ª en Los ?ngeles que era im¨¢n de la mezquita que visitaron dos de los terroristas del 11-S. El documento se?ala que el funcionario ¡°podr¨ªa haber estado en contacto¡± con los dos terroristas y que la mezquita es ampliamente conocida por predicar ideas antioccidentales.
Las p¨¢ginas desclasificadas analizan las sospechas de lazos entre los terroristas y dos personas que fuentes del FBI acusaron de ser agentes de inteligencia saud¨ªes. Por ejemplo, se?ala que uno de los posibles agentes podr¨ªa haber proporcionado en California una ¡°asistencia sustantiva¡± a dos de los secuestradores.
El documento tambi¨¦n?analiza las sospechas de que la familia real saud¨ª podr¨ªa haber mandado dinero a los secuestradores y revela el caso de un individuo, que se cree trabajaba para el Ministerio de Interior saud¨ª, que pareci¨® fingir una convulsi¨®n cuando agentes del FBI le interrogaron sobre sus posibles v¨ªnculos con uno de los secuestradores. Tras ser hospitalizado, el funcionario logr¨® salir de EE UU antes de ser interrogado de nuevo.
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