Rousseff: ¡°Es grav¨ªsimo que se ejecute un programa sin pasar por las urnas¡±
La expresidenta de Brasil ha ofrecido su primera rueda de prensa tras ser destituida del cargo por el Senado
La entrada del Palacio de la Alvorada, en Brasilia, est¨¢ franqueada por tres banderas. Una es la de Brasil. La otra es la de la alianza de Mercosur. Y la tercera, la verde, es la presidencial. Cuando el presiente se encuentra en el palacio, se alza. Y si no est¨¢, se deja a media asta. Estos d¨ªas ocurre lo segundo. Dilma Rousseff fue depuesta del cargo de presidente el mi¨¦rcoles despu¨¦s de que el Senado as¨ª lo votase, con 61 votos a favor y 20 en contra, en un pol¨¦mico proceso de impeachment. Se mudar¨¢ de inmediato, probablemente al Estado de Porto Alegre, donde vive su hija; o quiz¨¢ a R¨ªo de Janeiro, donde vive su madre. Y entonces, su vicepresidente, Michel Temer, ocupar¨¢ la residencia presidencial.
Pero antes, el viernes, la expresidenta dio su primera rueda de prensa tras el fin de su impeachment. Volvi¨® a defenderse de las acusaciones que hab¨ªan facilitado su ca¨ªda (resumiendo muy burdamente: que el a?o pasado maquill¨® detalles de las cuentas p¨²blicas). Coment¨® la sorpresa de que el voto en su impeachment le permitiese mantener sus derechos pol¨ªticos y presentarse, si quisiera, a cargos p¨²blicos (exceptuando la presidencia). Y algo tal vez menos sorprendente: que sus partidos rivales (Partido del Movimiento Democr¨¢tico Brasile?o ¨CPMDB¨C, el Partido de la Social Democracia Brasile?a ¨CPSDB¨C, Dem¨®cratas y el Partido Popular Socialista) le hayan pedido al Tribunal Supremo que suspendiese esa decisi¨®n.
Su exministro de Justicia, Jos¨¦ Eduardo Cardozo, tambi¨¦n estuvo en la rueda de prensa y asegur¨® que recurrir¨¢ esa maniobra. ¡°Es lo correcto¡±, afirm¨®. ¡°Y porque hay un gran jurista llamado Michel Temer que dice que eso es el correcto¡±, ironiz¨® en referencia al actual presidente y el libro que public¨® este cuando ense?aba derecho en la universidad, Elementos del Derecho Constitucional. Es m¨¢s, Carodozo ley¨® un fragmento del tomo en el que se habla que todo proceso de impeachment tiene dos penas ¨Cp¨¦rdida del poder e inhabilitaci¨®n pol¨ªtica¨C. Por eso es justo, argument¨®, que ambas cosas se juzguen por separado.
La propia Rousseff admiti¨® que le pareci¨® ¡°rar¨ªsimo¡± que se votara ¡°por un lado una vez y por el contrario la siguiente¡±. Ella lo achaca a que muchos senadores estaban indecisos y recelosos. ¡°El segundo voto [el de la inhabilitaci¨®n pol¨ªtica, 42 votos a favor, 36 en contra y 3 abstenciones] es el de quienes consideran que yo no merec¨ªa un castigo. Son senadores indecisos que sufrieron presiones¡±. Y a?adi¨® que, a su entender, los votantes que le dieron la victoria en 2014 no apoyan al gobierno de Temer. ¡°Me parece grav¨ªsimo que se vaya a ejecutar en los pr¨®ximos a?os un programa que no ha sido elegido en las urnas. Se ha juzgado a la democracia a la vez que a m¨ª, soy consciente de eso. Al igual que lo ser¨¢, poco a poco, parte de la sociedad. Desgraciadamente, hemos perdido. Espero que, juntos, sepamos reconstruirla¡±.
Hay una idea en la sociedad brasile?a de que, si ella puede preservar sus derechos pol¨ªticos a pesar de haber sido hallada culpable de cr¨ªmenes de responsabilidad, entonces el pol¨¦mico expresidente del Parlamento, Eduardo Cunha, que dimiti¨® recientemente entre esc¨¢ndalos de corrupci¨®n, podr¨ªa verse beneficiado. ¡°Eduardo Cunha tiene cuentas en el extranjero y recib¨ªa sobornos¡±, ha alegado la expresidenta ¡°A m¨ª me juzgan, a Eduardo Cunha no. Hasta las aves de la Alvorada saben que para m¨ª la ley es una [del impeachment] y, para los senadores y diputados, otra [la Ley de la Ficha Limpia].¡± Rousseff est¨¢ convencida de que la principal raz¨®n para que no acabara su mandato son las investigaciones del megacaso de corrupci¨®n Petrobras, que est¨¢ pasando como un rodillo sobre las esferas de poder brasile?as y sacando todas sus irregularidades. Cit¨® una grabaci¨®n en concreto: una conversaci¨®n telef¨®nica entre un empresario y un senador, donde se insinuaba la necesidad de echar a Rousseff para ¡°detener la sangr¨ªa¡±
Mientras el pa¨ªs digiere los cambios de poder, Rousseff insiste en que tratar¨¢ de anular su impeachment. Ha recurrido la decisi¨®n del Senado ante el Tribunal Supremo. Eduardo Cardozo presentar¨¢ un segundo recurso tras haber detectado irregularidades en el proceso de votaci¨®n. Por ejemplo, el que muchos senadores dijeran que no cambiar¨ªan de opini¨®n fueran cuales fueran las pruebas de la defensa. O que no hubiera, a su parecer, causa justa para el impeachment. ¡°Si no hay supuesto jur¨ªdico, no puede haber proceso pol¨ªtico¡±, subray¨®.
Casi a la hora de la comida de este viernes, circularon algunas cajas de cart¨®n por la entrada del edificio. No eran muchas pero llamaron la atenci¨®n de algunos c¨¢maras. Los agentes guardaron las cajas r¨¢pidamente.
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